No sé cómo, cuándo o en qué momento me convertí en tu amiga.
Solo sabia que siempre me saludas y me contabas tus cosas.
Y eso me emocionaba, porque a pesar de todo tenía un lugar en tu vida, quizás no como lo tenía ella, pero tenía algo.
No sé cómo, cuándo o en qué momento me convertí en tu amiga.
Solo sabia que siempre me saludas y me contabas tus cosas.
Y eso me emocionaba, porque a pesar de todo tenía un lugar en tu vida, quizás no como lo tenía ella, pero tenía algo.