¿Por qué de el?

A primer visita

Me levanté para ir al primer día de clases, ya con los estudiantes antiguos, estaba muy nervioso, no sabía qué me iba a encontrar, no tenía ni idea de cómo reaccionar o como me iría. Ya una vez en el colegio, intente buscar a los chicos nuevos, pero no habían llegado, me quede sentado en las escaleras mientras veía a alguien conocido, unos minutos después se sentaron dos chicos al lado cerca mío, estaban hablando de lo que habían hecho en vacaciones, cuando voltee a mirar... quede perplejo, no entendía porque al ver a uno de ellos me sentí ansioso y me sonroje. Para mí fue muy extraño, ya que no me había pasado nunca antes salvo cuando vi por primera vez a Carol, quien fue mi novia durante dos años cuanto estaba en quinto y sexto de primaria.

Finalmente llegó Daniela, me quede con ella hablando sobre nuestras expectativas de ese año escolar y principalmente la primera semana, después de un tiempo ya estábamos todos los estudiantes nuevos de noveno reunidos en un rincón del patio, una hora después de haber llegado al colegio, a las ocho, la directora nos hizo formar filas por grado, en orden de estatura, ubicados por curso. Por mi estatura, me tocó de, en los tres primeros, en ese momento, fueron llevando curso por curso al auditorio, para que se conocieran todos los estudiantes, ya era turno de nosotros, los de noveno. Cuando subíamos las escaleras, para llegar al piso donde se encontraba el auditorio, me tropecé con mis propios pies, pero alguien de atrás me cogió de la cintura y de un hombro, pensé que era Cristian, ya que él se encontraba atrás mío en la fila, sin embargo, al darme la vuelta para darle las gracias, era el chico por el cual me había sonrojado y puesto nervioso, el me miro sonriendo.

- "casi empiezas mal este año" me dijo riendo

Yo lo mire un poco asustado y le di las gracias y solté una risa pequeña, seguí caminando muy avergonzado, más que todo porque me daba pena que alguien me hubiera visto tropezarme aparte de él, cuando llegamos Fernando y Daniela se sentaron al lado mío y mientras esperábamos a los profesores que serían nuestros directores de grado, nos pusimos a hablar, fue cuando Fernando empezó a decir que había un chico muy lindo en grado decimo, valentina, que estaba por detrás le empezó a preguntar por ese muchacho del que hablaba Fernando, yo estaba un poco sorprendido, ya que, aunque suene extraño, nunca había conocido a alguien abiertamente gay, sin embargo me encantaba ver la confianza que tenía Fernando para expresarse sin ningún tipo de miedo, a parte que era musculoso para la edad y que media poco más de un metro setenta, lo que era alto para los que estábamos ahí, así que era poco probable que alguien se metiera con él.

Ya había llegado dos directoras de grado y la directora, en ese momento nos hicieron presentarnos en orden de cómo nos habíamos sentado, frente a todos los estudiantes, que éramos casi 50 estudiantes, por lo que mis manos empezaron a sudar y mi corazón a latir más rápido cuando se acercaba mi turno. Pero cuando era el turno de él, el chico que me ayudó en las escaleras, el que mi hizo sentirme impotente en el patio, todo se detuvo, suena a típica película cursi, pero en realidad, solo podía escuchar lo que estaba en su dirección, me acuerdo de todo lo que dijo, que se llamaba Andrés Camilo, que tenía 15 años, le gustaba el deporte, los comics, escuchar música y que llevaba en el colegio 6 años, no entendía por qué le puse tanta atención pero se me quitaron los nervios sin embargo, cuando terminó, me volvió la ansiedad, pase al frente, hable bajo y dije muy pocas cosas, solo que me gustaban las series, el anime, algunos videojuegos y que era vegetariano.

El punto es que nos dividieron en dos salones, cuando las profesoras llamaban a los que harían parte del 9-a, yo como raro, estaba nervioso, quería que me tocara con Fernando, Daniela, Valentina y/o Cristian. Lo bueno es que solo Fernando y Valentina quedaron en 9-a, lo que significaba que me tocaría con Cristian y Daniela, sin embargo, también quería quedar con Camilo, lo que en ese momento no entendía por qué quería, pero deseaba con un extraño desdén, pero no fue así.