Duré una semana sin hablar con él, intentaba no tener que trabajar con él y cuando teníamos que hablar, no seguía la conversación. Un jueves en la noche, él me escribió por Facebook, para preguntarme si había alguna tarea, yo le dije que no, pero después de eso me puse a pensar que porqué me habla como si no pasara nada, como sí yo actuara igual que todos los días. La cosa es que caí en cuanta que la verdad, no éramos amigos, no habíamos hablado mucho tiempo, lo que hizo posiblemente fue algo descortés, pero pues no era importante, le di muchas vueltas y concluí que no tenía razón para estar "sentido", tampoco era alguien que me importara mucho, o eso creía. Honestamente duré mucho tiempo sin darle mucha importancia, hablaba con él como si nada, había momentos que me divertía con él, otros que se comportaba como un patán, pero la verdad, no me importaba mucho.
Un mese después de entrar a clases empecé a almorzar en el colegio, tenía algo de miedo porque no conocía a nadie, salvo a una compañera que era nueva, el primer día que almorcé allá, almorzé solo, pero al día siguiente ella se hizo amiga de unas niñas de octavo, ahí conocí a Tania, era una persona muy agradable, era divertida y súper extrovertida, a veces era algo abalanzada, por así decirlo. Ella era muy linda y nos hicimos buenos amigos al poco tiempo. Pasábamos todo el tiempo de almuerzo, hablando sobre música, sobre personas grados mayores, sobre series y películas. Unos meses más tarde, ya no cogía bus en el paradero, sino que lo cogía más cerca, con Tania. Pasábamos tiempo con su primo menor y jugábamos el transcurso del bus, afianzamos nuestra amistad bastante, los descansos me los pasaba de vez en cuando con ella y a veces salíamos a comer después de clases.
Dos semanas antes de salir a vacaciones de mitad de año, empezó a actuar extraño, hablaba de un niño que conoció de un colegio diferente, siempre que estaba con las amigas, decía que Iván esto y que él aquello, me parecía normal, ella ya hablaba así cuando le gustaba alguien, solo que ahora era más frecuente, y que hablaba de un niño de su grado al mismo tiempo. Todo cambio, cuando me fui con una amiga de ella en el bus, ella me empezó a cuestionar que, si me gustaba Tania o que, si me podría gustar, estuvo así todo el trayecto, al final me moleste un poco y le pregunte de mala forma que porqué preguntaba tanto, ella me dijo que yo le gustaba. Yo no le creí para nada, pero me dijo algo extraño, me dijo que yo era Iban, que así se refería a mi cuando yo estaba cerca para que no sospechara nada. Yo me quedé todo el tiempo pensando en ella, pues al parecer, ella también me gustaba. En contraste, también me sentía bien, al parecer no me gustaba Camilo, ya no me importaba, solo lo veía como un compañero más y ya. Así que, al otro día, le pregunte a las amigas si era cierto, la mayoría me dijo que si, las demás intentaban decir que no, pero pues se ponían nerviosas. Yo me alegré, pero el fin de semana, ese fin de semana antes de salir a vacaciones hablé con ella por chat, ya tenía todo preparado para decirle que ella me gustaba, se lo diría en la fiesta que se haca a mitad de año, estaba muy emocionado.
Sin embargo, ese fin de semana, ella me dijo que yo le gustaba, yo quede anonadado, no sabía que responder, me lo dijo por chat, no sabía si era mentira, la verdad pensé que era una broma, no soy el prototipo de muchacho "bonito" o "cool", pero tomé valor y le dije que también me gustaba. Quedamos en actuar como si nada, quería preguntarle si quería ser mi novia en la fiesta, esa semana estábamos muy cariñosos, y pasábamos todo el tiempo posible juntos, me acuerdo que estaba con mis compañeros en el descanso y ella llego y se sentó a mi lado, me pareció lo más bonito que alguien pudo hacer, ya que ella no conocía a nadie, ni a Cristian ni a Daniela.
Llegó el día, estaba feliz, la verdad ese año me dio duro académicamente, ya que venía de un colegio que me dejó muy malas bases académicas, pero ese día, toda mi frustración se fue, me arreglé lo mejor que pude, llevaba un pequeño regalo para Tania, todo se sentía inmensamente feliz, llegué, por un momento pensé en camilo, lo busqué con la mirada, estaba bailando en un grupo, me empecé a poner nervioso, la verdad Daniela y Cristian no fueron, estaba con unos compañeros que no suelen ir para nada a esos eventos, pero me quedé con ellos. No bailé, ya que me da pena, no hablaba con nadie, sentí que me iría mal, me acerqué a Tania, que estaba en un grupo bailando, le dije hola, ella me volteó a ver y sonrió, me dijo hola y volvió a voltearse. Quedé desconcertado, me fui con valentina y con los de su grupo y empecé a bailar, ya había pasado una hora y volví a tomar fuerzas, me acerqué a ella y cuando dije su nombre ella se volteó y me gritó que la dejara en paz, yo me asusté y la verdad fingí que nada había pasado nada, ya se estaba acabando la fiesta y mientras bailaba, vi a Tania y al chico que ella me decía que le gustaba, besándose, yo solo esperé a que se acabara la canción y llame un taxi para que me recogiera, al llegar a mi casa, lo primero que hice fue preguntarle por Facebook que si estaba bien, que si la había enojado, ella me respondió al día siguiente que estaba bien, "que su novio la había hecho sentir mejor". Yo le hablé como un amigo, fingí que no sentía nada, que no me había dolido y me alegré por ella.
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¿Por qué de el?
RomanceLa cosa es que era un estudiante nuevo en un colegio, pero lo mas novedoso era no saber que me terminaría enmorando de un amigo