#13 Budgerigar°

7.4K 504 88
                                    

Un Tesla model S rojo, parece tan obvio que este sea su auto, también es precioso.

— ¿Tenías tantas ganas de verlo? — bromea.

— No puedo creer que vinieras — respondo con un ligero dolor abdominal.

— No tenía nada mejor que hacer.

Ella comienza a conducir el auto, es como lo imaginé, en lugar de ser ruidoso sólo se escucha un ronroneo rápido.

Hace veinte minutos la llamé, y estuve esperando con miedo a que no llegara en una cafetería frente a la casa de Bruno, coloqué mi celular en modo avión para no recibir las llamadas del chico preguntando porqué me había ido sin decir nada.

Ella conduce rápido pero con cuidado, así como programa, así como trabaja, así como vive.

— Bueno, tienes suerte, hoy justo me invitaron a la playa... — la miro con estupefacción — tendremos que hacer algo con tu ropa ¿Tienes dinero?

De repente me encuentro involucrada en un escenario con demasiado nivel para lo que esperaba, aunque siendo sinceros, ella siempre me lleva a lugares muy raros, Paris Scott es una persona que no existe en escenarios comunes.

En medio de la zona comercial se detiene y me dice, a secas, que compre un bañador.

— ¿Hablas totalmente enserio? — pregunto antes de bajar para ir a la tienda.

— Es lo que hay.

Mueve los hombros y permanece con una sonrisa burlona, si no me encantara tanto ya habría salido corriendo para tomar el tranvía de vuelta a casa.

Voy tímidamente a la tienda, es un baratillo común y corriente, ¿Qué se supone que debo ponerme? Un bikini, un traje de dos piezas, una camisa playera, son las 20 horas ¿Quién va a la playa a esta hora? Veo una cesta que dice "Descuento 30% bañadores" son normales, de dos piezas en varios colores.

Muy bien, respiro hondo, tendré que hacerlo, vamos Sarah Pearson ya hemos tenido ovarios para hacer cosas peores.

Amarillo, rojo, azul o verde, lo medito, azul es un poco de furcia, rojo es como el Tesla que me espera afuera, verde es demasiado feo, entonces elijo el amarillo.

Pero también cojo una camiseta blanca enorme y una bermuda corta, antes de salir doy un recorrido a la tienda, me he vuelto lo suficientemente mayor como para asustarme por no llevar todo lo necesario.

Vuelvo al auto, Paris mete todo lo que llevo en el asiento de atrás y sigue conduciendo, mientras pasamos los semáforos me da algunas miradas, realmente debo parecer preocupada.

— Tranquila — la miro, relaja el ceño  — Nunca te haré hacer nada malo.

De pronto es como si mi corazón se pintara de estampado de flores, nos detenemos en un apeadero, ahí una chica entra al auto, es la rubia, Marti.

— El desgraciado de Jameel me hizo trabajar hasta las siete ¿Puedes creerlo? — le dice a Paris quien sólo le da una media sonrisa — pero me pagará las horas extra malditasea.

Me da risa su tono, ella me parece bastante graciosa en realidad, seguimos por la autopista en dirección a la playa, por acá las construcciones están bastante separadas entre ellas. Paris se detiene frente a un caserío de cabañas muy iluminado, parece el lugar más apropiado para una reunión de adolescentes con dinero.

— Creo que aquí se casarán Jonah y Callie — le comenta Marti a Paris cuando nos bajamos.

Me parece extraño saber de una u otra forma de que se trata la amistad entre estas personas.

WORSHIP | Lesbian ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora