Evil

Cap. 1 Dulce, dulce amargura.

-Muchas gracias por darle clases a mi hijo, señor Smith- hablaba la madre del pequeño Rick hacia aquel apuesto castaño de parche.

-No agradezca, señorita. Su hijo esta en buenas manos, puede irse a trabajar tranquila- La mujer le dio una ultima sonrisa y se fue. Mientras tanto, Rick miraba con curiosidad al castaño ¿A donde irían de aventura esta vez?

Hacia casi seis meses que conocía al señor Morty. Era un adulto joven de apariencia excéntrica. Sabia hasta ahora que Morty tenia un asombroso conocimiento sobre muchas cosas y que podía viajar por dimensiones. Lo que todavía no sabia era porque Morty estaba en su dimensión, y porque lo habia escogido a el como compañero. Y lo decía porque era realmente incómodo acompañarlo a hacer cosas que, a sus ojos no estaban bien.

-Hoy tenemos que ir a vender unas cosas, descuida, estarás lejos de "la zona de acción", no quiero que tengas traumas.- hablo el castaño abriendo un portal.

-¿Entonces porque me llevas?-pregunto inocente.

-No puedo dejarte aquí solo, y necesito que aprendas unas cosas que pueden suerte útiles en un futuro. Algún día entenderás.

Aprender

Eso era lo primordial a su parecer, pues Morty lo decía constantemente.

...

Aquella dimensión era un completo desastre, Morty también lo era. De echo, Morty era el verdadero desastre.

La policía estaba persiguiéndolo ahora, Morty corría a su lado sujetándole con con una mano, y disparando con la otra.

-Mort-Morty...- jadeo, su paso cada vez se volvía mas lento -Estoy-y cansado.

- Lo se, Rick, pero  a veces debes seguir aunque duela, es parte de existir - en un momento de distracción de la policia, logro cargar al chiquillo en su hombro, para así continuar escapando. No hace falta decir que estaba siendo un rotundo éxito, pronto volvería a la casa del menor con el trabajo hecho, y con la certeza de haberle enseñado algo nuevo al niño.

- Estoy empezando a cansarme, Morty - Rick descansaba la cabeza en sus piernas, ambos ya se encontraban en casa. Claro, Morty no había salido ileso, había tenido que enviar al pequeño a darse un baño para poder sacar las balas de su cuerpo con tranquilidad.

-¿Cansarte de qué? - le dio un sorbo a su café, era difícil tener que comportarse de forma tan despreocupada, no quería hacerlo acarrear traumas, pero hacerlo fuerte era su prioridad.

- De... Todo esto, lo que hacemos esta mal. Esos policías solo buscan el bien del universo. ¿Porque no usas tu inteligencia en algo bueno?

- Rick... No serviría de nada hacer algo bueno, ayudas a muchos, si, optienes dinero, si. Pero ¿No crees que se vuelva tedioso? Ser alabado y admirado, yo no quiero eso, quizá lo desee alguna vez, pero ya no importa. Ahora se que lo importante es proteger a quien amas y hacer lo posible por garantizarle una buena vida, cueste lo que cueste, aun si rompes las reglas. Porque esas no son mis reglas, son las de otros. Así que dime Rick ¿Has aprendido algo de las aventuras? ¿No te sientes mas capaz? Todo lo que quiero es que entiendas que para las mentes fuertes no hay barreras, y quiero que seas fuerte, porque la vida siempre te dará golpes, y a veces no sabrás evadirlos, quiero que seas fuerte para soportarlos.

- Pero si ser fuerte significa lastimar a otros, no creo que quiera serlo... Asesinaste muchas vidas hoy...

- Lo se, regla número uno, Rick. A veces debes sacrificar unas cuantas vidas para salvar la tuya, y eso esta bien, tu igual eres valioso, pero no mejor, tampoco especial, pero eso no importa, lo su importa es que sobre vivas.