- M-me duele...- El pequeño Sanchez apretaba el brazo de su ahora mejor amigo y maestro de vida, Morty. Este mismo trataba de desinfectar la herida en su pantorrilla, pero el pequeño no paraba de quejarse y sollozar.
-Agh, lo se, Rick, pero es necesario. - bufo el adulto - Esto no pasaría si te defendieras de tus bravucones.
-N-no puedo, son mas altos y mas fuertes...
- ¿Y eso que? Escucha Rick, no importa que tan gordo sea el pez, todos tienen algo que los hace débiles. Y yo te ayudare a descubrirlo.
-... ¿Qué?
- No puedo permitir que esos ineptos sigan creyendo que tienen poder sobre ti, así que les vamos a pegar por donde les duele, tu solo sigue siendo tu por ahora, yo me encargare del trabajo mas sucio.
- ¿Como?- Rick se giro hacia el castaño con una mirada de asombro y curiosidad.
-No necesitas saberlo, pero funcionara.
Al día siguiente, Morty no apareció, ni el siguiente, ni el siguiente.
Fue algo doloroso para el peliazul, nunca había tenido un amigo cercano en realidad, y que su único confidente desapareciera, le dolía, y le preocupaba. ¿Fue su culpa? No le extrañaría, pudo haberlo agobiado con su personalidad y problemas infantiles. Se sentía decepcionado de si mismo.
- ¿Que onda, Ricky? No me digas, el amante de tu mamá se harto de ti y se fue al igual que tu padre - El niño de mayor altura rió con sorna, haciendo que el peliazul se sintiese menos seguro.
-E-el no era amante de mi m-madre... Y mi papá no se fue...- respondió agazapado.
- Eso te dicen por lástima, si tuviese un hijo estupido como tu, yo tambien inventaría cualquier cosa para largarme.
- Ah... - De repente hubo un click en su cabeza, y sus labios empezaron a moverse por su cuenta - ¿Lo dices por experiencia propia, verdad?
-... ¿¡Qué dices, idiota!?
- Al menos mi padre envía cartas y fotografías, envía " Los amo" al final de cada una, aun si es mentira, mi papá no me abandono por completo. Osea ¿Tu qué juzgas? Mi mamá no es una drogadicta y yo como su hijo no soy un imbécil buscando su aprobación, por que mi mamá esta orgullosa de mi. ¿Tu quien eres sin tus amigos? Solo un bastardo cuya madre no aprecia lo suficiente, pobre Doug.
-¡Callate!- el mas alto lo tomo de la camisa - ¡Tu no sabes nada!
- ¿Piensas golpearme? Te recuerdo que si te ven y te expulsan otra vez, tu madre te odiara aun mas...
Rick no podía creer que aquellas palabras horribles salieran de su boca, pero tal parece que el grandulon si, no pasaron mas de dos segundos cuando lo libero cubierto de lágrimas. Este junto a sus amigos, desapareció entre los demás estudiantes, sin tocarle un solo pelo.
Ese mismo día, a la salida, Rick se topo con una muy grata sorpresa.
-¡Morty! ¡Volviste!
- Hey, pequeñin. Si, así es. Vamos a casa y cuentame qué tal estuvo tu día.- hablo el castaño tomándolo de la mano.
Para el esos tres días habían sido una tortura, había iniciado una relación secreta con la desagradable madre del tal Doug, había hecho cosas muy desagradables, pero había obtenido información valiosa. Con ello en mente, creo un chip de control mental para Rick, claro, se lo quitaría en unos días, puesto que era solo para que el chico pudiese defenderse y alejar a aquellos imbéciles de el.
Morty nunca se considero buena persona, pero claramente era capaz de hacer cualquier cosa por el bien de su Rick.
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Evil
Fanfiction★Esta es una historia homosexual. ★Los personajes pertenecen a Justin Roiland. ★Short Fic. -CUALQUIER COPIA O ADAPTACION SIN PERMISO QUEDA TOTALMENTE PROHIBIDA- -SEGUNDA PARTE DE: "DOOFUS".- "Oh, si el cielo se viene abajo, por ti, no hay nada en el...