Silky - Gakuen Alice (PAUSADA)

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  En galeria Aina con el atuendo navideño.】  

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—Aina puedes entenderlo ¿cierto?—la voz de ese hombre resonaba en mis tímpanos, como un dolor de cabeza, bajé mi rostro recibiendo el olor a flores en el conejo de felpa—cumple con las misiones que te encomiende y entonces cumpliré tu deseo—mi deseo, ¿él realmente cumplirá su palabra? ¿puedo confiar en el director?—hasta entonces sé una buena niña—una buena niña no debería hacer esas misiones—procura no mantener amistades superficiales, ¿no querrás que acaben heridos por tu Alice, cierto?

—No, señor director.—contesto mientras sostengo el peluche en forma de conejo, abrazarlo me entrega la seguridad que necesito para seguir de pie sin temblar ante el adulto con aspecto de niño.

—Oh, también librate de ese peluche, no eres una niña pequeña ¿cierto?—él mostró una leve sonrisa, asentí mientras agarraba con fuerza al conejo. Creceré para convertirme en una adulta, de esa forma podré obtener la fuerza necesaria para rescatar a esa persona, haré todo lo que esté en mi mano para ver su sonrisa de nuevo.

Solo espera por mí, por favor, sé paciente.

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Comienzo a escuchar una voz conocida, un suave palmeo en mi cabeza, ¿me quedé dormida nuevo?

—Aina iré a vender tus fotos estando dormida.—alzo mi cabeza al instante de escuchar a Hotaru, tomó su hombro antes de que se marche levantando mi cuerpo en el proceso, me observa, juraría ver reflejado el símbolo del dinero en sus ojos.

—No te he dado permiso.—muestro mi peor cara mientras le recrimino.

—Recuerda que somos socias—ella une sus manos con las mías— las amigas están para apoyarse.—entonces me suelta y empieza a flotar en su ¿cisne robótico? ¡¿qué diablos es esa cosa?!  No puedo evitar musitar un gruñido por la frustración producida.

—Aina-chan, tranquilizate por favor—me encuentro con la mano de Tobita en mi hombro, me ofende que permita el comportamiento de Hotaru, suelta su agarre tras ver que intento salir de la esquina donde se encontraba mi asiento, de igual forma, él continua hablando—todos están entusiasmados por la fiesta de navidad, ¿porqué no colaboramos todos juntos?—me dice, seguramente intentando que me olvide del tema.

—¿Ayudar?—musito mirando de reojo, a lo que él asiente—no iré a la fiesta así que...

—¡¿Eh?!—cierro los ojos al escuchar el chillido de Mikan, miro al frente encontrándome la chica mandarina me mira en estado de shock—¡¡No puede ser!! ¡¡Debes venir!!

—¿Desde cuándo es una obligación?—pregunto suspirando, la miro mientras apoyó las manos en mi cadera—llevo años sin asistir a alguna.—al decir eso su expresión cambió a una de horror, su cara expresaba claramente un ''¿Cómo es posible?''.

—Entonces, este año tienes que asistir, ¿sí?—miro sus manos las cuales repentinamente han tomado las mías con entusiasmo—además, Natsume quiere que vayas.

Los dos emitimos al unísono un claro ''¿Eh?'', al parecer él continuaba todavía en el aula.

—¡¿De qué hablas, campo de fresas?!—oh-oh, él parece realmente molesto.

—¡Pero lo escuché de Koko!—replica intentando disipar las llamas de Natsume con su Alice, para su suerte con éxito.

—''Esa idiota tiene que entrometerse donde no debe''—pronuncia Koko, las llamas llegaron hasta el lector de mentes—¡ho, ho, ho!—Koko ríe mientras intenta evitar quemarse.