Silky - Gakuen Alice (PAUSADA)

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Despierto de golpe, asaltada por la pesadilla que tuve, un recuerdo del pasado, noto la almohada donde reposa mi cabeza y lo confortable que se siente mi cuerpo, lleno de lesiones, por el cálido colchón, una fuerte luz alumbra la habitación mostrando que aún es de día, seguramente de mañana, al entender donde me encuentro, lo primero que aprecio es mi pegajosos y oloroso sudor, mi segundo Alice detonó un estado febril. Este tipo de situaciones empezaron a ocurrir con más frecuencia, lo que sin duda es culpa mía, estuve cumpliendo más de esas misiones especiales por lo que estuve ausente de las clases de nuevo, sin duda he preocupado a Ran de nuevo, una vez más  me encuentro en una habitación de hospital, se está volviendo una costumbre terrible.

—¡Oh! Has despertado Aina-chan.—una voz cantarina me llama, miro al frente avistando una cabellera rubia con un atuendo peculiar similar a un duende.

—Naru.—pronuncio con sequedad, mi voz está raspada, seguramente por la necesidad de beber algo, comienzo a recostarme mientras él se acerca a mí, sentándose a mi vera en la cama blanca.

—Te veo mejor que antes, sudar te ha venido de maravilla.—sonrió ampliamente.

—Si sudar te refieres a parecer que me han hecho un cubo de agua fría encima, sí.

—Tienes sentido del humor ¡vaya!—le miro mal, él ríe nervioso.

—¿Tú me has encontrado?—él asiente, yo comienzo a salir de la cama por el otro lado escuchando sus reclamaciones.

—¡Señorita! ¡No puedes levantarte!—me indica la cama.

—¿Por qué no? Ya estoy bien.

—Tenemos que hablar Aina-chan.—miro al lado contrario con molestia.

—¿De qué?

—¿Estás haciendo muchas misiones?—no contesto sintiendo su preocupación—dime Aina-chan ¿qué piensas acerca de Mikan-chan?—¿por qué pregunta por ella tan de repente?

—Es rara.—él comienza a reír, su risa siempre es refinada, pero en algunas ocasiones es tan estridente que parece estúpido.

—Bueno, ella es un tanto especial, sí—su rostro denota seriedad—¿has notado algo diferente en ella?—este tipo realmente buscan una respuesta útil para investigarme.

—¿Ella es un objetivo, verdad?—no siento su sorpresa, este tipo es un gran actor pero conmigo no funcionan las mentiras—he oído que las has puesto de pareja con Natsume, por si no fuera poco todos los estudiantes están haciendo de su vida un infierno por ser su pareja, sabiendo como es ese chico hará lo imposible por mostrarle su lugar, y además también está en la clase de Tsubasa.

—Siempre has sido muy astuta, tienes buen criterio.—sonríe falsamente.

—Naru, no quiero meterme en líos por culpa de esa chica, no ahora que estoy tan cerca de mi objetivo.

—¿Cerca?—la tristeza en su interior llegó a mí, creando una molestia en mí, no necesito la pena de otros, sin duda él no tiene fe en mí.

—De todas formas no es de mi incumbencia lo que pase con ella.

—Sin embargo, escuché que la ayudaste, todo el mundo sabe acerca de ello.

—Todo el mundo...—camino hacia la salida de la habitación.

—Sakura Mikan, ella seguramente será capaz de enseñarte el camino que tanto buscas Aina-chan.

—No sé de que me hablas, profesor pervertido.