Capítulo 22

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Narra Flash:

Habían pasado poco más de un mes, y a pesar de todo me había asegurado de acompañar a Twilight a cada una de sus sesiones de fotos y promociones, mi madre ya no era problema, puesto que ella ya no era responsable de nada del resto de trabajos.

Pronto vería a niñas con alas de plumas, orejas de poni y extensiones de cabello con brillantina. Parecía un tema popular entre niñas y adolescentes, una princesa tan llamativa como lo era Twilight había sido un éxito entre la publicidad.

Siendo miércoles ambos habíamos asistido a una sesión de fotos para una revista de ropa bastante popular entre adolescentes y niñas, las clases habían acabado ya y nos había ido bien, pero ahora mismo la apretada agenda que intentabamos seguir no nos ayudaba a sentir las "vacaciones".

"Quizás estoy exagerando con eso de ir a cada una de las sesiones"

Pensaba seguido, sin embargo cada vez que acabábamos Twilight parecía feliz de verme, así que no parecía tan exagerado como lo haría en mi cabeza.

- Ya quiero irme de aquí - dijo riendo levemente mientras le pintaban la cara con brillantina y unas estrellas de colores - Parezco un payaso.

- No - reí - te ves como un bello arcoiris.

- Qué cursi eres, Flash - dijo el estilista de Twilight, él la seguía a muchos de sus trabajos.

Los tres reímos para dejar a Twilight irse al set.

- ¿Recuerdas cuando eras modelo? - me preguntó él mientras la mirabamos posar.

- Si - dije dirigiendo mi mirada hacia él.

- Debe haber sido genial.

- ¿Porqué todos creen que es genial?

- ¿Qué tiene de malo? - dijo sonriendo de lado.

- Bueno... Los fotógrafos son muy exigentes, Twilight ya no come lo que quiere por seguir su dieta de vegetales, tampoco se puede hacer de todo, no puedes tener raspones o heridas de ningún tipo, además a veces las agendas se hacen demasiado apretadas...

- Yo creo - me miró - Que te estás preocupando de más por ella.

- ¿Es muy evidente? - sonreí nervioso - Sólo quiero verla feliz...

- Hay que admitir que no le encanta todo esto, y a veces parece algo cansada.

- ¿Cansada? - pregunté con mi mirada aún en él, levantando una ceja.

- Supongo que... No te ha comentado al respecto.

- Dime.

- No se si deba pero... - dijo alargando ese "pero" - Siempre que vas al baño o te ausentas un par de minutos deja caer la cabeza o cierra los ojos por unos segundos, se está quedando dormida de pie.

- ¿De pie?

Me molesté, ¿Porqué no me dijo nada de esto? A penas llevabamos unas semanas en esto y ya estaba yendo mal.

- Creo que por hoy acabamos - dijo la fotógrafa de turno - Mañana te quiero aquí a la misma hora, Twilight.

- Claro - dijo ella saliendo de ahí.

- De hecho... - volvió a decir la fotógrafa - ¿Te molestaría venir hoy a la madrugada?

- ¿A-a la madrugada...?

- Claro que es un tema personal, pero hablaré con el editor para que te de una paga mejor por ello.

- Bueno... Supongo que...

- De hecho - interrumpí yo, medio imitando a la fotógrafa - Tenemos planes para hoy - tomé a Twi de los hombros.

- ¿Qué? - murmuró Twilight confundida, mirándome.

- ¿De madrugada? - cuestionó la tipa.

- Si, asuntos de... ¿Pareja?

Twilight me miró nuevamente, pero no dijo nada.

- Bien, entonces será mañana - se hundió de hombros.

Twi fue a quitarse el maquillaje y se cambió la ropa, luego de eso nos fuimos a mi auto hasta casa de Sunset.

Estando ahí recién fue cuando me habló, cruzando los brazos.

- No tenías que hacer eso.

- Si tenía, supe que has estado cayendo dormida cuando no estoy cerca.

Desvió su mirada para evitarme, yo tomé su mentón, ignorando la pena que me daba hacerlo.

- Deja de intentar ayudarme Flash - dijo mirándome a los ojos.

- ¿Porqué lo haría?

- Porque no soy una niña, no necesito tu ayuda... Puedo cuidarme sola.

Sabía que no le agradaba este tipo de cosas, ella quería hacer sus cosas por si misma y... Aún así no planeaba dejarla con todo eso sobre sus hombros.

- No pienso dejar de hacerlo.

Soltó su mentón de mi mano bruscamente, quitándome la mirada y abrió la puerta del auto con la intención de bajarse, sin embargo paró justo antes de ponerse de pie.

- No quiero discutir contigo, Flash - volvió a mirarme, triste.

Miré mis pies suspirando y me bajé del auto, di la vuelta y tomé la mano de Twilight para hacer que me abrazara, podía sentir su rostro acomodarse en mi pecho mientras yo ponía mi barbilla encima de su cabeza.

- No quiero que vuelvas a quedarte dormida de pie ¿Qué es lo que siquiera hacías para quedar así? - le pregunté separándola mientras la tomaba de los hombros para verla.

- Yo... Ya que en el día voy a las sesiones y... A juntas de contratos, usaba las noches para estudiar, para ayudarte, y para hacer ejercicio... Los fotógrafos suelen decirme que me veo algo... Sosa.

- Bueno, ahora... Es muy extraño que te diga este tipo de cosas pero, debes dejar de hacer eso.

- Lo sé.

- Bien...

- No pensé que estuviera tan mal, cuando era alumna de la princesa Celestia solía pasar días sin dormir...

- ¡Por dios Twilight...! - exclamé molesto - Deja eso...

- ¿Qué cosa?

- Deja de pensar que sigues siendo una poni, deja de pensar que sigues pudiendo... Hacer ese tipo de cosas...

- Yo soy una poni - dijo mirando el piso.

- No, ya no lo eres... No le exijas a tu cuerpo humano, lo que el poni podía.

Twilight comenzó a llorar, y fue entonces que me di cuenta de lo que le estaba diciendo.

- No llores - dije abrazandola - Perdóname... Simplemente no quiero que... No quiero que acabes enferma.

- Eres un imbécil - dijo ahogada por mi pecho y sus lágrimas.

- Lo sé... - acaricié su cabello.

Pasamos unos 5 minutos así, hasta que Twilight se separó de mi pasando su antebrazo por sus ojos.

- Prometo no volver a desvelarme.

Le sonreí y ella me sonrió de vuelta.

- Me preguntaba... - dije inclinándome hacia ella - Hace un tiempo que no salimos nosotros dos.

- Oh...

- Quizás no será una cita pero tengo agendada una hora al peluquero hoy... ¿Recuerdas que tenía pensado cortarme el cabello?

- ¿En serio? - preguntó ella emocionada - ¿Quieres que te acompañe? - asentí con la cabeza - ¡Me encantaría ir!

Apunté al auto de vuelta y volvimos a irnos.

Enamorándome de TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora