Destinó, Me Odias ¿Verdad? -MuraKiyo- (Finalizado)

Destinó #17

Murmullos lejanos atraían a su inconsciente mente a la realidad y con ello un terrible dolor de igual manera se acrecentaba de a poco en su cuerpo.

Algo lento abrió sus ahora opacos ojos cafés, encontrándose enseguida con un rubio de ojos verdes que le sonreía de manera malévola mientras se lamia la sangre que caía por la comisura de sus labios.

-N-No.. N-No.. N-No -murmuraba repetidamente preso del terror-

-Estamos unidos para siempre Teppei~ -sonrió-

-¡¡NO!! -grito-

-¡Teppei! -grito un peli-negro de lentes corriendo enseguida hacia él Omega-

-¡¡NO!! ¡Dejame, No Me Toques! -forcejeaba-

-¡Dile Que Venga! ¡Rapido Riko! -grito al ver que su omega no se movía presa del shock-

Salió a toda prisa del pequeño departamento, bajando con el mayor cuidado posible las escaleras, con los nervios a flor de piel sin medirse empujo con mas fuerza de la necesaria aquella puerta de vidrio logrando con aquel moviento brusco que caiga el pequeño letrero con la palabra Abierto, asustando a más de uno y logrando poner en alerta al alfa, que desde hace varios segundos siente que algo no va bien y la agitada como asustada presencia de la castaña se lo confirma.

-Ki-Kiyoshi -tartamudeo- n-no... no se que le -

Sin dejarla formular completamente la oración él gigante peli-morado no se lo piensa dos veces y salió corriendo cual alma lleva el diablo en busca de su Omega.

No tuvo que ir muy lejos pues su destinado se encontraba en su departamento, hecho una bala sube rápidamente las escaleras escuchando a medida que llega los incontrolables gritos de su castaño.

-¡¡NO POR FAVOR, NO!! -

Respirando agitadamente en la puerta de su habitación, viendo como aquel usual castaño de boba sonrisa se retorcia en agonía y sufrimiento entre los brazos de su mejor amigo supo que no podría vivir sin él y que de ser necesario mataría por y para él, solo por asegurarse de que no pasará por lo mismo.

Dejó aún lado su silenciosa promesa y se concentro en esparcir sus feromonas de manera lenta y suave, relajando poco a poco el ambiente para su Omega.

El peli-negro de lentes se trago el gruñido que quiso escapar de su garganta al sentir las feromonas de aquel Alfa pues después de todo estaba en su territorio y..... le debía mucho, demasiado.

-¿Hy-Hyuga? -murmuro el Omega con sus ojos entre abiertos-

-¡Kiyoshi! -grito abrazando enseguida a su amigo-

-¿Q-Que haces a-aqui? Oh mejor dicho ¿que hacemos aquí? ¿donde estamos? -miro a todos lados hasta dar con una violeta mirada- A-Atsushi -murmuro-

El gigante solo lo miro intensamente sin decir ni una palabra.

-Kiyoshi -llamó el de lentes- hay algo que debo decirte -tomó sus manos-

Él castaño apenas y lo volteo a ver pues más que nunca se le hacia difícil ignorar la presencia del antiguo As de Yosen.

-¿De-Decirme? -lo miro al sentir un apretón en sus manos-

-¿Recuerdas ... Recuerdas lo que pasó? -

Él castaño iba a negar más a su memoria llegó una burlesca sonrisa y muchos golpes.

-Hy-Hyuga -temblo- n-no.. n-no por fa-favor dime... dime q-que no me ma-marco -lo tomó de los hombros mientras lo miraba desesperado-

-Kiyoshi yo-

-Hyuga-chi~ es mejor que vayas con Riko-chi~ esta algo alterada -

Él nombrada quizo gruñirle más sabía que era él indicado para aquella plática.