Ahogarse

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Me ahogo por no admitir que te quiero, es que justo cuando decides irte descubro cómo mi corazón se enredó con el tuyo, en cada latido escuchado. Justo cuando quiero quedarme, haces que tome mis cosas y me marche.
No es graciosa esta forma de karma, porque me duelen hechos que no estoy lista para soportar, me ahogo.
Nuestros dedos enredados como si no quisieran separarse, todo el magnetismo entre los dos convertido en juego para ocultar la verdad.

Ahora sólo nos queda consolarnos con alguien más, que jamás será capaz de llenarnos, ni será suficiente por lo vacío que nos sentimos. Es que yo tengo algo de ti y tu de mi, no fueron únicamente caricias, dime quién te sonríe como cuando tomaba tu rostro entre mis manos para compartir todo sin decir nada al mirarnos a los ojos. ¿Piensas en mi? ¿Me ves en diferentes personas? Porque te recuerdo al despertar, al caminar, en risas y lágrimas, eres mi sueño preferido y mi mal pesar en la madrugada.
Me duermo imaginandote y a mi me estalla el pecho de amor de tanto extrañarte. Pero ya es tarde.
Tenemos a alguien más que jamás nos hará tanto daño como el que nos hicimos nosotros mismos. Ni tendrá el poder de llamarnos en recuerdos como nosotros lo hacemos.

Y ahora prefiero quedarme sola, no por esperarte si no porque estoy cansada de fingir que me siento bien con alguien más, cuando a mi boca se le escapa tu nombre en susurros.
Prefiero quedarme sola y llenarme de mi misma, porque sé que si vuelves, me vaciaras de nuevo tomando todo como si lo mío fuera tuyo, tal vez no serias así si yo pudiera decirte no, pero tienes mi "si" tan fácil, que no quiero aprender a decir "no" ni decírtelo, cuando te quiero siempre tan cerca mío. 
Y espero la próxima vez, decirte lo que siento pero si pasa mucho tiempo, seguro muchas bocas robaran los recuerdos que le dejé a tus labios. Seguro muchas caricias borrarán mis huellas.

Pero ahora estoy obligada a quedar en silencio, no pienses que no me importaste, si no que me importas demasiado para arruinar nuestra distancia que tanto tiempo nos costó forzar. Pero mi lengua siempre llevará el te amo guardado y tal vez con el tiempo me lo termine tragando, tal vez por eso ahora me estoy ahogando.

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