Joel resopla cuando ve que llegan al club donde es la fiesta.
No está de buen humor porque en la tarde se peleó con su novio, y Zabdiel lo llevo casi a rastras para no verlo triste por un viejo.
-Vamos, te presentaré a alguien más guapo que ese tipo- casi gritó en su oído por la fuerte música, mientras se adentraban al gran club.
El guardia de seguridad ya los conocía y si le das algunos billetes a cambio, deja pasar a menores.
-Zabdi, no es necesario. Aún salgo con Nicolás, no quiero serle infiel-hablo tratando de parar de caminar pero su mejor amigo es más fuerte y lo jala del brazo para seguir.
-Eso no es ser infiel, bebito. Sólo lo conocerás y después veremos qué pasa-se encoje de hombros y sonríe-. Además, es mayor, como a ti te gustan- guiñó su ojo y siguieron caminando.
Joel rueda los ojos divertido y se repite en la cabeza que sólo lo conocerá y ya.
Llegan a una mesa un poco alejada de la pista de baile y de la música donde se encuentran sentados Erick, el novio de su mejor amigo, y un tipo castaño a su lado, bastante guapo.
Zabdiel lo suelta y va hasta Erick para sentarse a su lado y juntan sus labios cortamente.
El menor siente la mirada penetrante del castaño sobre él, que logra ponerlo un poco incómodo. Carraspea un poco y logra llamar la atención de Zabdiel, quién sonríe pícaro y mira al castaño.
-Christopher él es Joel, Joel él es Christopher- los presenta y ve como Joel se acerca nervioso hasta el mayor y lo saluda, sentándose a su lado.
Es raro verlo nervioso y un tanto tímido ante un hombre, porque anteriormente le había presentado a más chicos y no se mostraba así, justo como está ahora.
Deja de prestarle atención a la no-pareja que establecieron una conversación, cuando su novio empieza a susurrarle cosas al oído.
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Joel había creído que hablar con Christopher sería imposible, ya que verlo tan serio cuando apenas cruzaron mirada por primera vez, se le hizo que no era de agradarle mucho a la gente.
Pero no, porque ambos ya se están besando salvajemente en una de las paredes de un cubículo del baño.
No saben cómo han llegado hasta ahí, pero están disfrutando del beso.
Ambos borrachos. Hacia pocas horas que Zabdiel había pedido bebidas para los cuatro y todos terminaron en ese estado, menos él, porque él era el que conducía.
Christopher lleva sus manos bajo la camiseta de Joel y acaricia su cintura, sin separarse.
El menor jadea cuando los labios del mayor bajan a su cuello, donde lame y succiona un poco, dejando leves marcas rojizas.
Baja sus manos hasta el pecho del castaño y sigue bajando hasta su abdomen, acariciándolo bajo su camisa, sintiendo su abdomen algo marcado.
Chis está apunto de quitarle su camiseta, pero una voz conocida los interrumpe.
-¿Joel, estás aquí?- pregunta Zabdiel entrando al baño, se distrajo un poco con su Erick y ya había perdido de vista a su mejor amigo y a Christopher.
El rizado se separa del castaño suspirando y se acomoda la ropa antes de salir, no sin antes guiñarle un ojo a su acompañante.
-¿Has visto a Chris?- pregunta apenas lo ve salir del cubículo- Ya son las cuatro y tenemos que irnos, Erick se está durmiendo y tú ya estás borracho, al igual que Chris.
-No, no lo he visto- miente mientras ríe y golpea despacio repetidas veces la mejilla del rubio- voy con Erick, tu búscalo.
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Jsbskshqijsiwbs ahre, estoy emocionada c:
