Capítulo O1.

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- ¡Shawn, para! No hay tiempo. 

- Vamos nena, sera solo un ratito.

- Oye, hemos quedado para hacer el trabajo, no para tonterías. Son las siete de la tarde, es para mañana, tiene que tener al menos veinte páginas, y aún no hemos empezado vale? Así que no me vengas con estupideces. - Dije enfadada.

- Vale, vale... Pero, ¿estás segura? - se acercó y me besó tiernamente.

- Shawn, PA-RA. No hay tiempo. - Me puse a teclear en el ordenador. Al ver que me ponía a trabajar, él se puso también.

Esa noche cenamos muy poco, unas galletas, no teníamos tiempo. Era un trabajo que tenia que salir bastante bien y era el último momento para hacerlo. Al final Shawn, mi novio, se quedó a dormir, ya que no lo acabamos hasta muy tarde. Mis padres ya estaban acostumbrados, así que no fue un problema. 

Acabamos hacia las 3 de la madrugada y fuimos a dormir inmediatamente, muertos del cansancio. 

- ¡Emily, Shawn, levantaos, llegaréis tarde, son las 8:30! - gritó mi madre desde abajo.

Salté de la cama, ya que empezamos las clases a las 9. Levanté a Shawn, tirando de él, me vestí corriendo y le tiré su ropa para que se vistiera. Fui a buscar algo para comer, unos zumos y unos bizcochitos, los  comimos deprisa. Tengo que decir que me atraganté mas de una vez. Acabamos rápido y salimos puntuales de casa. Los dos cogimos nuestras motos y nos dirigimos al aburrido instituto. Legamos justo a tiempo, así que nadie nos dijo nada, a parte de mi amiga, Giulia, una italiana preciosa, que me guiñó el ojo mientas se dirigía hacia mí.

- Venís otra vez juntos, ¿Eh, pillina? - Se rió.

- Hemos hecho el trabajo y lo hemos acabado tarde, solo se ha quedado a dormir, nada más.

- ¿Nada más? ¿Tu eres tonta? ¿Has visto bien a Shawn? ¿Pero... has visto lo bueno que está, hija mía? - Nos volvimos a reír y le dí un pequeño empujón en broma.

- Que sí... Pero el trabajo era importante, ya lo sabes, el curso depende de él y además, no me apetecía... ¿Sabes ese chico de la tele que...

- Chicas, ¿Qué tal si os sentáis y os calláis? La clase va a empezar. - Nos reclamó el profesor.

Nos interrumpió justo a tiempo, porque la clase nos estaba mirando, y yo iba a contarle a Giulia que últimamente no paro de pensar en ese actor de la tele, Evan Peters. No puedo pensar en otra cosa, y la verdad es que era un motivo por el cual ayer no me apeteció hacer nada. Me hubiera sentido culpable, como si lo hubiera engañado de alguna manera, y preferí no hacer nada.

A la hora del descanso Shawn vino hacia mí, me dio un beso y me pregunto qué le pasa a ese chico de la tele. Le contesté que es un actor que le gusta mucho a Giulia, y le iba a comentar que a lo mejor viene por aquí unos días, de vacaciones. Mentí, pero se lo creyó. No era plan de contarle que estoy todo el día pensando en otro chico, ¿sabéis

Interrumpiendo mis pensamiento, Giulia vino gritando emocionada.

- ¡Ems, Evan viene a España de vacaciones! ¡Viene aquí, cerca! ¡Emily tía no puede ser! ¡Te vas a morir!

- Ves como le gusta mucho... - Le dije a Shawn - Sí, porque a TÍ, Giulia, te gusta mucho Evan Peters, ¿no? -  Le dije haciéndole una indirecta, queriendo que pillase mi mensaje oculto.

- Eh, esto... ¡Sí! A mi me encanta Evan Peters, des del primer momento en que le ví. - Nos sonreímos mutuamente.

- ¿Ah sí, Giulia? Eso no lo sabia yo... - Nos empezamos a reír todos por el comentario de Ethan, el novio de Giulia. - Eh, a mi no me hace gracia... - Él le hizo pucheros a ella, y no tuvo mas remedio que acercarse y besarle. Pero ahora a ver quién los.

- ¡OOOOOH! La gran reconciliación - Grito Bryan, otro amigo de nuestro grupo, y nos volvimos a reír todos. Seguían sin parar. - Eh, ya vale, que nos incomodáis.

- Habla por ti Byran - dijo Shawn, que me cogió, me dirigió hacia él y me empezó a besar también. Joder, Evan, sal de mi cabeza. Déjame estar en paz con mi novio.

- Eh tíos, no nos hagáis esto al resto de la panda, por favor, es incómodo... - Lo decía porque entre nuestro grupo se encontraba también Cindy, con la cual tuvo un intento fallido de relación. Entonces paramos todos e intentamos retomar el hilo de la conversación, sin que haya momentos incómodos hasta que volvimos a clase.

The Gap Of My Life - Evan PetersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora