el viento de otoño era frío, tan frío que el pobre park jimin estaba arrepentido de haberse dejado la gabardina más gruesa y cálida, y en su lugar, traerse una simple chaqueta azul.
caminaba rápido, esperando sudar un poco y calentarse, y también porque debía llegar a tiempo a su trabajo en la pequeña cafetería que encontró varios años atrás.
no fue buena idea dormirse tarde por ver un maratón de su anime favorito.
sus manos estaban blancas por el frío, ya que su chaqueta no tenía bolsillos y no podía resguardarlas, su nariz estaba roja y sus mejillas también, su cabello rubio caía ocultando su rostro, pues iba cabizbajo mirando sus pasos y tratando de resguardarse del frío. tan cabizbajo que no vio la bicicleta que iba a pasar por el pequeño callejón que le separaba de su trabajo, y tan cabizbajo que no pudo moverse y simplemente fue chocado con una bicicleta. park jimin, hoy no era tu día. o quizás sí.
algunas piedrillas pequeñas se habían clavado en las palmas de sus manos y notó su pantalón un poco roto, pues se había raspado en la calle, su cabeza le dolió un poco, recibió un impacto pequeño, pero nada comparado a quien manejaba la bicicleta.
el sí tenía un poco de sangre, pues la cadena de su transporte se había safado y de alguna manera cortado el pantalón y lastimando un poco la pierna, el ciclista había caído de una manera extraña y dolorosa, por lo que también tenía lastimada su frente y de su nariz salía un poco de sangre, estaba tirado en el piso junto a su biciclieta y hacía pequeños gestos de molestia/dolor.
—mierda, ¿estás bien? — fue lo primero que salió de la boca de jimin.
—mierda, no. — fue la escueta respuesta del ciclista, quien era portador de un cabello menta muy llamativo.
—¿te ayudo? ¿qué hago?
park se atragantaba con sus palabras, no sabía qué hacer y la culpa lo carcomía. quizás no debía venir tan cabizbajo.
—ayúdame a levantarme, por favor — la voz ronca y adolorida del de cabello menta, lo sacó de sus cavilaciones donde se recordaba que era un idiota por no fijarse.
rápidamente, se levantó él y limpió sus manos para después tendérsela al ciclista y con cuidado ayudarle a pararse.
— ¿te acerco a alguna parte? lo siento enserio, dime en qué puedo ayudarte.
el de cabello color menta lo miró unos momentos, y él no pudo evitar hacer lo mismo. era de su estatura, sí , o quizás unos centímetros más alto que él. su rostro se veía serio y relajado, apesar de tener una herida en la frente y la nariz sangrante. sus ojos tenían una atractiva y llamativa forma gatuna y sus labios eran rosados y delgados. sus pómulos un poco marcados y una mandíbula muy varonil. repasó sus manos, las cuales lucían muy grandes, venudas y pálidas. eso le hico dar un tirón a su estómago. a él le gustaban ese tipo de manos.
—... entonces, agradecería que me lleves a esa cafetería — tanto fue su escrutinio al de cabello menta, que ni le escuchó cuando empezó a hablar. avergonzado le respondió.
—disculpa, ¿qué dijiste? — sus mejillas sonrojadas por el frío, sirvieron de camuflaje para sus mejillas sonrojadas por la vergüenza.
—si podías llevarme a la cafetería "Nuez y café", no soy de aquí y me encuentro un poco perdido.
jimin abrió sus ojos con sorpresa; ¡el trabajo!.
pero no todo estaba perdido.
—¡claro! justo hacia allá me dirigía, trabajo ahí. park jimin a tu servicio. —sus ojos se convirtieron en dos medias lunas, al sonreír, que dejaron un poco embobado al peli-menta. síp, ese era el efecto park jimin.
— min yoongi, un gusto. o bueno, no tando — soltò una pequeña risa que contagió al rubio.
y enseguida, jimin sacó de su mochila un pequeño paño para tendérselo a yoongi y que éste limpie su nariz, mientras él levantaba la bicicleta empezando a caminar hacia su trabajo siendo seguido por min yoongi.
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no tiene título, pero algún día lo tendrá xd🌠yoonmin🌠
Fanfictionsabía cual era mi tipo ideal, pero me negaba a aceptar que él era mi tipo ideal. -p.j. -minúsculas intencionales.