«3» Editado

1.5K 98 10
                                    

-Hola- me dijo y me sorprendí al recibir tal inesperada visita.

-Hola- le dije con vergüenza por mi ropa y mi rostro que seguramente era un desastre.

-Te traje un regalo de disculpas, no debí retirarme de esa manera la otra noche- dijo mirando el suelo y entregándome una bolsita de cartón y la abrí.

-¿John Green?- le pregunté sonriéndo.

-Es un buen escritor- asentí estornudando- ¿te sentís bien?- me preguntó el rubio.

-Si, no es nada- dije estornudando de nuevo.

Me sonrió y la yuta madre, que precioso es.

-¿Querés tomar algo?-

-No, muchas gracias, tengo que ir a la casa de una amiga- me dijo y asentí.

-Vamos, te abro la puerta- caminamos en silencio y le abrí la puerta, me sonrió y besó mi mejilla para salir de nuevo de mi casa, esta vez despidiéndose.

Una vez que volví a la cama el timbre volvió a sonar haciendo que suelte un grito de frustración.

-¡Ya voy!- grité un poco enojada.

-Hola- me sonrió y me puse helada.

-Mau- le dije devolviéndole la sonrisa- ¿Qué hacés aquí?- pregunté sorprendida - pasá- me abrí paso y lo dejé entrar.

-Veo que te vinieron a visitar- habló con gracia.

-Si, un compañero de la facu, me trajo un regalo- señalé la bolsa de cartón que estaba en el sillón.

-¿Compañero?- preguntó sentándose en el mismo.

-Si, es un nerd total- lo miré y me senté a su lado tapándome con una manta. -¿por qué?- el negó.

-Mirá- me reí, recién llegaba y ya estaba celoso - flayé que era tu wacho, justito ayer lo ví salir de la casa de mi vecina- comentó y rodé los ojos.

-¿Al rubio?- le pregunté sin creerle y asintió.

-Si- me dijo y abrió los ojos mirando los papeles con mocos por toda la mesita -¿Te sentís bien vos?- me preguntó

-Me hace un poco frío, pero estoy bien- hablé mirando sus ojos.

Dios, lo extrañaba mucho.

-Estás caliente- me dijo tocando despacio mi frente -vamos a un médico- hice puchero y negué.

La verdad me sentía mal, pero tenía mucha pereza como para ir a un médico.

-No tengo ganas- le dije tapandome más con la mantita.

-Vamos, te vas a enfermar peor- suspiré- mirá si tenés covid- habló poniendose un barbijo que tenía en el bolsillo de su campera y se rió.

-Basta, no tengo nada- le dije sacandole su barbijo.

-Entonces vamos así te dan algo para tomar- me dijo guardando el barbijo y riendo -te vas a sentir mejor y encima te va llevar el más lindo- habló con confianza y lo miré como sticker de Shrek.

Al final decidí ir, no perdía nada, y si era covid, debía avisar a mis contactos. Aunque solo pensé en Tiara y Paulo.

Cuando nos fuimos del médico lo peor no fué que me pusieron una inyección, lo peor fué ver a Paulo besarse con Maira, pero me dió algo de gracia al ver que Maira casi lo tragaba y no sabía besar.

Mauro se quedó en mi casa para "ayudarme", pero terminamos cogiendo.

-Sos re linda- me dijo Mauro cuando se despertó y le sonreí- me tengo que ir- me dijo parándose para cambiarse.

Polos opuestos《PAULO LONDRA Y TU》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora