Corazon Gótico

Capítulo 5.5

*Un día, dos días, una semana, un maldito año... ¿cuando terminara mi vida?*

Es temporada de invierno en south park, Firkle está a dos años de terminar sus estudios e ir a la universidad, hace algunos meses el tenía un grupo. Podría llamarles "amigos" pero eso sería muy ridículo, el no tiene amigos, no tiene a nadie.

Sus días se resumen en ir a la escuela, hacer los deberes que le obligan a hacer, escuchar música y evadir cualquier cosa que le cause alegría.

Seria alegría falsa, falsa como quienes fingen ser felices.

( Sonidos de colegio )

-- Bien chicos, espero mañana entreguen sus trabajos a tiempo -- decía la profesora guardando su material

Una chica levanto su mano -- disculpe profesora, los equipos del proyecto serán libres? --

-- que bien que me recuerdas, gracias -- la profesora saco de su maleta un frasco con papelitos -- la primera mitad de la lista sacará un papel, y el nombre que salga será su compañero, de acuerdo --

-- aaaaah! -- se escuchó a la par

*Ugh, que molestia*
Firkle era de la segunda mitad por lo que le parecía molesto esperar, además que no se recordaba nada de ningún proyecto.

Al fin todos sacaron sus papeles y la campana sonó, y el fue el primero en salir.

La brisa helada es algo que disfruta mucho, para alguien que siempre viste de negro. El trayecto hacia su casa lo veía como un escape a la realidad, caminar escuchando su música favorita, sin molestarse en escuchar a nadie.
Hasta llegar a casa y seguir la costumbre.

( Timbre de casa )

-- Hola!! -- saludaba muy sonriente un chico en la entrada del gótico

-- Tú.. ¿que quieres? --

-- pues..-- saco un papel de su bolsillo -- Soy tu compañero para el proyecto de biología--

*Pro-yecto de biología?* Pensó tratando de recordar

-- Soy Ike broflovski -- se presento con una sonrisa

Firkle cerro la puerta, sinceramente no le interesaba tal proyecto, dió media vuelta y pretendía seguir con sus asuntos pero volvió a sonar el timbre.

-- creo que se cerró la puerta, jaja --

Firkle lo miro con disgusto -- escucha -- dió un paso hacia adelante -- puedes conseguir otro compañero, puedes hacerlo tú solo, o cualquier cosa. Cualquier cosa menos molestarme a mi ¡CHEERLEADER NAZI! --

Entro satisfecho, pensando que ya no volvería a molestar debido a que no respondió de ningún modo, unos minutos se asomó por una ventana y ya no había nadie.

Entro en su habitación y encendió su laptop ya eran de noche y podía hablar con Henrrieta por vídeo llamada.
Una llamada entro, era ella.

-- Ey! ¿que tal enano? --

-- tsk --

-- Que mierda de día has tenido hoy eh? --

-- La maldita profesora y un maldito niño me molestan, quisiera matarlos --

-- Eso sería una salida fácil --

-- Mm? --

-- piénsalo - Henrrieta fumaba mientras hablaba -- puedes hacerlos sufrir, enseñarles la vida de un gotico --

-- Aterrador, Excelente, Fascinante --

**********

A la mañana siguiente era sábado. Por lo que no tenía clases, sus padres, como siempre solo trabajaban y firkle en el pasado iba con su grupo a alguna cafetería o a la casa de Henrrieta a pasar el día. Pero, ahora no le quedaba más que estar solo.

Bajo a la sala de estar y encendió el televisor

*Sólo estupideces y programas basura para gente conformista y falsos*

Después de unos minutos llamaron a la puerta.

-- Mierda!!! --

trato de ignorar a quien llamaba esperando que se fueran pensando que no había nadie, sin embargo, llamaron otras dos veces más.

-- ¡Me cago en ti! --

No quedó de otra y fue a ver quien era, era el mismo chico de ayer, aún así, no le sorprendió.

-- H-hola, lo siento, pensé que ayer llegué en mal momento y, bueno, lo siento --

Firkle sólo lo miro sin expresión alguno dispuesto a entrar y cerrar la puerta nuevamente, pero antes de lograrlo Ike dió unos pasos poniendo al frente una pequeña bolsa de regalo color azul.

-- Esto e-es para disculparme --

-- Mierda aléjate --

-- ¡POR FAVOR, ACEPTALO! y-yo no quería ser una molestia --

Firkle recordó lo que había dicho Henrrieta.
Tomó la bolsa y entro dejando la puerta abierta tras el y a un chico mirándolo fijamente.

Colocó la bolsita sobre una encimera y la abrió, dentro había dos panquesitos. Esto le produjo una incomodidad pues recordó que a pesar de ser góticos Pete y el disfrutaban mucho comer panquesitos, siendo el de Mora favorito de ambos.

Miro hacia la entrada donde Ike seguía parada mirando sus pies.

-- ¿vas a quedarte ahí? --

Ike levanto la mirada muy feliz y entro cerrando la puerta.

-- ¿Te gusto? --

-- Tsk -- firkle encendió un cigarro mientras lo miraba seriamente -- Escucha niño, no quiero que pienses que somos amigos, ni quiera que me caes bien, pero te ayudaré con el proyecto. Sólo eso --

Ike con la sonrisa de un niño asintió alegremente.