Capitulo 25

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Empece a darme cuenta que las marcas en cualquier parte de mí cuerpo me hacían salir de ese dolor que sentía mí alma. Cualquier mínima discusión con mis abuelos o con quien sea me hacía buscar desesperada aquel pedazo de vidrio que escondía debajo de mí cama.

Ese simple artefacto ayudaba en mí día a día. Los dolores emocionales se borraban cuando el dolor físico tomaba el control. Y eso me hacía bien.

Aveces pensaba que exageraba más de lo normal pero al recordar cada cosa que vivi o seguía viviendo sabía que no era así.

La ilusión de que nadie me aria daño en mí nuevo hogar se esfumó en el tiempo que mí cuerpo creció..

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Eran pasadas las once de la noche cuando mí celular vibro , me encontraba acostada en mí cama .
Compartía habitación con mí tío , dormíamos en cama cucheta el arriba y yo abajo.

La ilusión de que mí novio me contestará el mensaje me invadió pero al abrir el mensaje me lleve una gran sorpresa. Mí cuerpo se tenso y miles de imágenes ocuparon lugar en mí cabeza.

Jamás pensé que eso iba a pasar. Tenía miedo , asco y muchas emociones más.

Era un mensaje de mí tío pidiéndome que le practique sexo oral , pero no estaban escritas en estas palabras.

Yo solo pude contestar " Estás loco sos mí tío" a lo que el nunca respondió. Pensé en levantarme y decirle a mí abuela pero sabía que ella no me iba a creer ya que él era su bebé y yo una más de sus nietas . Nunca dije nada.

Solo pude contarle a mí hermana , pero a decir verdad en este momento no recuerdo cuales fueron sus palabras.

Se me hacía horrible tener que ir a dormir pero que más daba . Solo esperaba que eso no se volviera a repetir. Los días pasaron y gracias a Dios no me había vuelto  a mandar mensajes ni nada.

Hasta que llegó una noche en donde el se había ido con los amigos y había llegado en la madrugada drogado y demaciado tomado. Sentía que alguien me llamaba y me tocaba el hombro imaginandome que sería mí abuela me di la vuelta para ver qué quería . Cuando lo único que veo al girarme es su miembro y el tocándose . Un asco me invadió completamente y me gire al instante tapandome hasta la cabeza . Apretaba los ojos fuertes tan fuertes que al pasar los segundos ardía , dolía.

Escuchaba su respiración demaciada agitada y mis náuseas aumentaban.
Movimientos , pasos , la puerta del baño se abría y se cerraba a los minutos  , nuevamente pasos y el ruido insoportable que hacía cuando subía a su cama.

Suplique a Dios  que esa noche terminará lo más rápido posible . Quería hablar pero sabía que era mí palabra contra la suya y lo lamento Julieta pero su palabra pesaba más.

Solo verlo me daba asco y ver que todos le tenían tanto amor , que mí hermana se llevará tan bien con el después de que le había contado lo del mensaje me dolía. Era como que ella no me habia creído. Entonces si ella no había creído en mí , sabía bien que mí abuela tampoco lo haría.

Y así nuevamente Julieta pasaba por otro asqueroso hombre. Qué en ves de cuidarla como debía de ser la lastimaba.

Me daban asco los hombres , todos eran iguales o algo andaba mal conmigo. Todos me veían débil y se aprovechaban de eso. De eso y de que jamás tuve el valor de poder hablar.

Los cortes ya no me calmaba tanto como antes después de eso y más días de acoso por su parte cada ves que venía drogado. Ahora necesitaba algo que me ayudara con eso y lo encontré . Había encontrado la forma de salir de eso. Mis sábanas envueltas en mí cuello unos segundos con un poco de fuerza hacia que mí cerebro olvidará por unos minutos.

Cicatrices En El AlmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora