desde que te vi; tom holland

Capítulo 2

—¿Entonces no tiene ningún problema?

—No, no, solo... Obvio que no, he estado esperando esta oportunidad por bastante tiempo— Apreté mis labios conjunto a los puños a mis costados por la emoción. Espero que esto no sea una broma, digo, ¿Cómo podría ser esto una broma? Se ve bastante profesional, pero T/N, tienes que estar alerta igual, ¿Ok? ok.

—Perfecto. El vuelo a nuestras oficinas en Culver City, California; saldrá mañana exactamente a las cuatro veinte, si no llega a tiempo o no podrá estar disponible por ese período de tiempo, tendremos que darle la oportunidad a otra persona.

—¡Por supuesto! mañana estaré en el aeropuerto sin falta— Sonreí cómo estúpida después de hablar.

Ok, guapa, conten toda tu felicidad que no queremos parecer locas.

—Ok, estaremos esperando su llegada, que tenga muy buenas tardes.

Se terminó la llamada tranquilamente.

En ese mismo instante me desplome, colapse, lloré, me espanté, y bueno, todo lo que termina en "e". Pero de igual forma, estaba confundida por lo que acababa de suceder, pero rápidamente tomé la confianza y ahogué un gritito de felicidad.

Cuidado no te vayas a mear, Chihuahua.

Cállate, no arruines mi momento.

—¡No puede ser tanto esfuerzo obtuvo frutos!— Respiré profundamente porque estaba segura que moriría por un paro cardíaco por tanta felicidad— Ok, ok, T/N no te alteres, me puede dar algo y mi oportunidad hará pof— Repentinamente me quedé muy quieta, mirando a un punto fijo.

¿Por qué de repente pareces vegetal?

No lo sé, que situación tan rara.

Tú eres la rara.

El sonido de mi puerta abriéndose me hizo reaccionar, pero aún así estaba en estado de shock.

—Te vengo a traer la merienda cariño, desde abajo te escuche gritar, ¿Paso algo?— Preguntó mi madre, alzando una ceja.

—!Mamaa!— Me acerqué a ella, saltandole encima y enganchandome cómo mono— Una persona me llamó para que yo fuera a hacer una entrevista— Mi mamá me miró con la misma cara dudosa, no tan emocionada cómo yo— una entrevista con...— Mordí mi labio inferior aguantando toda la emoción—!TOM HOLLAND!— Moví mis manos en sorpresa, para agregarle dramatismo, je.

—Ooh, T/N, es la oportunidad por la cual estuviste trabajando, estoy orgullosa— Correspondió a mi extraño abrazo.

Rápidamente solté a mi madre, la guíe dando saltitos a mi cama, luego palmeé un lado de mi cama para que se sentará.

Ella se sentó, poniendo sus manos en su regazo, hablé apenas lo hizo, le conté al derecho y al revés como había sido todo, y lo feliz que estaba, ella sólo oía atentamente, asintiendo a todo, debo de admitir que me trave mil veces al hablar, ¿Pero y qué? Era mi jodida oportunidad, y podía hablar en el dialecto que se me diera la gana, estuvimos pláticando toda la tarde, hasta que en un momento me quedé dormida.

No me dí cuenta cuando sonó mi alarma, ¿En qué momento la puse?

Me levanté cómo cohete, obviamente, para ir a clases no me levantaba tan rápido, por dios, iba a conocer a Tom Holland bebé, ésto era más magnífico que verle la cara a los idiotas de mi salón.

Apagué la alarma, y al instante una notificación apareció en mi barra.

Buenos días señorita, T/N Lebrown

Su vuelo fue adelantado a las 3:40 am, debido a problemas de horario, esperamos que esto no sea un inconveniente para su llegada. Gracias.

Omaigad, no podían hacer eso, ¿O si?

Al darme cuenta de la situación salté de mi cama, corrí a mi baño para medio arreglarme.

Si, medio arreglarme, porque solo estuve ahí como por 3 minutos.

Salí cómo flash a mi closet, agarré todo lo que pude y metí todo lo necesario en mi maleta.

No te voy a mentir, duré 25 minutos en eso, je, te terminé de arreglarla.

Muy bien, algo faltaba, que todos hacen antes de tener una experiencia, una foto.

Busqué el filtro más bonito en mi Instagram, y me tomé una foto.

—Listo, quedé bien... o eso creo, para ser improvisada...—Ladeé mis labios, mirando algún defecto en la foto.

Que veas la foto así no arreglará tu fea cara.

Gracias por tu buen cumplido.

Tengo pensando quedarme ahí cuatro días y después me pondre rumbo a Inglaterra con el poco dinero que ahorré, ¿Mis padres sabían? No, vivir sola después de eso era algo que no aceptarían por obvias razones, pero ya se les pasaría, ¿Y por qué a Inglaterra? Quien sabe, tal vez conociera a mis suegros, je, je. Bajé a la entrada de mi casa, mi familia me miró extrañada.

—¿Qué pasa? ¿Tu vuelo no era a las cuatro veinte?— Se acercó mi madre.

—Lo adelantaron por razones que desconozco, pero no importa, tengo que irme ya.

Me miraron con tristeza... Bueno, era algo que me hubiera gustado, o sea, sólo mi mamá y papá, porqué mi odioso hermano menor solo tenía una sonrisa ganadora en sus labios.

Avancé a ellos y los abracé cómo nunca, los iba a extrañar, obvio, pero era lo que siempre deseé, ¿Era yo una exagerada? Tal vez. Me separé del abrazo con las lágrimas tratando de salir mis ojos.

—Nena, ¿Por qué vas a llorar? Sólo te irás cuatro días— Mi padre apretó mi mano.

Creés, dije dentro de mi.

—Es que...— no podía confesarles, no iban a aceptar— es la felicidad, sólo es eso—Me límite a decir.

—A nadie le importa tu felicidad acosadora, T/N— Me miró Ethan, con fastidio.

—¿Y quién te está preguntando a tí?

Le dí un golpe pequeño en la parte de atrás de su cabeza, suave... En serio, insignificante, ni le dolió, digo la verdad.

Salí disparada al auto de mi papá, ya que el me llevaría al aeropuerto, no tengo auto aún, soy pobre.

Nos mantuvimos en silencio todo el camino, pero no fue incómodo para ninguno.

Al llegar, bajé con rapidez, lo abrace y le dí un gran beso en la mejilla, me adentré a las instalaciones, corrí hacia el avión puesto que saldría en treinta minutos.

Pareci loca corriendo, todos ahí me vieron mal, chismosos... entregué mi boleta y entré en el extenso pasillo hasta entrar al avión, me sente en mi respectivo asiento y dí un largo respiro.

Ese iba a ser un largo viaje, y no porque estuviera lejos la ciudad, sino por mi, realmente estaba emocionada, je, je, presentía que mi vida iba a dar un vuelco inimaginable después de ahí, mis sueños dejarían de serlo, para cumplirse.