Afuera todo era un poco más calmado, vamos aun estaba el ruido de la música pero ya no era tan estruendoso, intente buscar a mis amigas pero la verdad es que no podía verlas por ningún lado, estaba muy obscuro y a donde quiera que volteaba solo había chicos besando a sus novias o lo que fueran ellas para ellos.
Seguí caminando mientras intentaba encontrar a alguien conocido llegue hasta una pequeña banca en donde no había absolutamente nadie, me senté y pensé “Si no puedo encontrarlas yo, entonces que me encuentren a mi”. No habían pasado ni cinco minutos de que había tomado asiento cuando se acercaron un par de chicos eso hizo que me sintiera más incomoda, reían tanto que ni siquiera se habían percatado de mi presencia.
Uno de ellos a los pocos segundos se retiro con la frase de “iré a buscar carne fresca”. ¿qué acaso estaban dando comida y no solo botana? ¿o es que se refería a niñas de una edad menor a la de él? Fuese lo que fuese yo ya estaba muy incomoda pero no sabía como retirarme del lugar sin que pareciera que estaba huyendo.
En lo que planeaba algo así como un plan de escape el chico que se había quedado volteo su cara hacía mi e hizo una especie de gesto que yo tomaría como una sonrisa, seguido de eso con una voz un tanto varonil y gruesa dijo
-Hola ¿es que tú novio te a dejado sola un momento?
Algo nerviosa voltee hacía el y conteste a su pregunta con un simple no.
-¿Entonces que es lo que haces aquí sola? ¿Esperas a alguien más?
- Prefiero el aire fresco y si gracias espero a mis amigas.
-¿Es por todo el humo y ese olor a marihuana que hay ahí dentro?. Seguro ellas no volverán
-Disculpa, ¿cómo dices?
-Siempre es así van, se divierten, encuentran a alguien y después se olvidan con quien es que llegaron a esta fiesta. Pero si gustas podemos ir a dar una vuelta ya que al parecer detestas este ambiente.
-Oh no descuida ellas no son así.
-Bien como gustes.
Le sonreí de una manera un tanto molesta y seguí concentrada en mis asuntos. A los pocos segundos sin decir nada el simplemente se retiro del lugar. En ese momento no sabía si era mejor que el se hubiera quedado para que nadie pensara que soy la inadaptada o que se hubiera ido con sus malos comentarios a otro lugar. En lo que pensaba que hacer y a donde escabullirme el mismo chico volvió a acercarse a mi pero esta vez tenía un vaso de refresco en su mano.
-Disculpa si eh dicho un mal comentario no es la primera impresión que tengas de mi así que eh traído un refresco para la señorita y la mejor disposición así que espero quieras acompañarme a dar una vuelta a un lugar más tranquilo.
-Descuida estoy acostumbrada a tratar con personas como tú. Pero en vista de que esta fiesta es patética vamos.
-¿Y a dónde es que quieres ir?
-Dónde sea esta bien.
Caminamos un poco por la acera hasta llegar a estacionamiento, lo cual me sorprendía, digo no creo que un estacionamiento fuera mejor lugar que aquella aburrida fiesta.
