26 enero de 2019
Vuelvo a sufrir por las noches, a no poder dormir por tu culpa, por aparecer en mis sueños creando pesadillas para despertarme.
Tu eres la causa de mi baja autoestima, de mis constantes pesadillas, de el frio de mi sensible piel y del vacío de mi interior, el causante de la presión en mi pecho, mi pésima concentración cuando quiero hacer algo.
Ocupas todo el espacio de mi cabeza, mi tiempo limitado para hacer una vida normal como todo adolescente. Ocupas mis horas de estudio e incluso ocupas el poco tiempo que me podría permitir descansar.
Arrasas con todo, es como si te hubieras en enganchado a mi piel, a mi mente y ahora fueras imposible de olvidar. Soy consciente de que he vivido contigo y aun sin tener tu presencia física siento que lo sigo haciendo.
Años de desesperación, soledad que ahora intentas reparar sin ser consciente de que duele aun mas, ahora no te quiero cerca, no necesito que me ayudes. He vivido por los años suficientes para sobrevivir sin tus consejos o abrazos.
Ahora no vengas a decirme que me quieres, que se que somos iguales, no necesito verte y recordármelo a mi mismo, no necesito verte en persona cuando cada mañana al despertar te veo en el reflejo de mi cara en el espejo del baño.
Que la rabia me come por dentro y si fuera por mi rompería el espejo como en las películas, con toda mi ira acumulada.
ESTÁS LEYENDO
Corazón famélico.
PoetryCuando la pesadumbre rutinaria no pueda aguantar el pesar de tu corazón, será un buen momento para acudir al mío.