My Number • Jikook AU

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Hablando personalmente por primera vez.

Jimin se sentía muy feliz, estuvo inquieto durante todas las primeras clases que había tenido porque la idea de poder ver a Jungkook personalmente y hablar con él, le ponía muy nervioso y un poco angustiado.

Era cierto que no conocía la voz de Jungkook ni mucho menos como se veía su sonrisa cuando reía, su melodía o su forma de hablar. Quería verlo sonreír, así como Jimin imaginaba que Jungkook sonreía cuando se escribían por KakaoTalk. Y hablarse con esa confianza también.

Se despidió de Taehyung diciéndole que se quedaría a hablar con Jungkook un rato antes de volver a casa y emprendió viaje subiendo las escaleras, sin embargo antes de subir se encontró con una muy y poca conocida silueta sentada en uno de los bancos del jardín de la primera planta. Caminó hasta quedar en frente de aquella figura y se congeló cuando los ojos cafés de Jungkook se encontraron con los suyos, tragó en seco y nervioso.

Jungkook se estremeció al ver a su amigo parado en frente suyo y tembló.

-¿Eres Jungkook? - Jimin le preguntó, con una sonrisa y evitando que su corazón saliese corriendo de su pecho. El pelinegro solo asintió, atónito ante aquella presencia.

Jungkook debió haberlo sabido, debió haber sabido que Jimin intentaría buscarlo y hablar con él personalmente. Después de todo, no podrían estar siempre escribiéndose por un simple chat. Ellos necesitan, no, Jungkook no lo necesitaba; Jimin necesitaba tener contacto con el pelinegro.

El rubio sonriente tomó asiento a su lado y le sonrió, con toda la confianza que deberían tener por estar hablando todos los días en estos tres últimos meses. Jungkook tragó en seco y se alejó un poco, Jimin frunció una de sus cejas un poco extrañado por la reacción de su amigo pero no le tomó importancia y volvió a sonreír.

-¿Como ha estado tu primer día de clases? - Jimin comenzó a sacar una manzana de su mochila y antes de dar el primer mordisco le ofreció al pelinegro pero éste negó inmediatamente. Jimin asintió.- ¿Sabes? Al final de todo no me tocó con la profesora de Gestión, esa que te conté...

Jungkook no podía salir de su estado de inmovilización, Jimin hablaba y hablaba pero el hacia oídos sordos. No podía concentrarse. El cabello rubio y claro que tenía el muchacho a su lado brillaba con el sol, al igual que sus oscuros ojos dándole un pequeño brillo en ellos, esa boca que se movía y movía, esos gruesos y rojos labios como si fueran almohadas o algodones de azúcar, y esa piel tan blanca, ¿Enserio había estado hablando con esta persona por tres largos meses como si fueran los mejores amigos de toda la vida? No podía creerlo, por Dios ¡Era Park Jimin! ¡El más popular de la ciudad de Busan, estaba en competencia con la belleza de los ldols en todo el país!

Jungkook era un idiota que era tímido y tenía problemas a la hora de relacionarse con los demás, ese pánico innecesario de pensar que todos los iban a herir.

-¿Jungkook?- Esa voz tan conocida para sus oídos le sacó de su ensoñación.

-Lo...lo siento. -Jungkook miró sus manos juntas en su regazo, mordiéndose los labios, nervioso.

Jimin sintió su corazón haciéndose añicos ante aquel gesto, sin embargo...había escuchado la voz de Jungkook por primera vez, gruesa y profunda. Le sonrió tranquilo, tratando de no seguir incomodándolo.

-¿Eres de poco hablar, no?

"Hasta que se dio cuenta, que vergüenza” pensó Jungkook.

-Sí. - Respondió, seco y con la voz temblándole. Iba a ocurrir, no podía mirar a su amigo en este momento.

Jimin soltó una risita nervioso.

-Vaya, si que eres diferente a como te muestras en chat.

Jungkook apretó sus manos y dolido, asintió.

Jimin borró su sonrisa, un poco triste por la situación.

-Bueno ¿Te fue bien hoy entonces?-Jungkook asintió.- ¿Te dieron trabajos prácticos ya? A mi como dos.

-Nada.

El rubio, un poco cansando por la actitud de desconfianza de Jungkook, decidió intervenir.

-Escucha, Jungkook...

-Debo, debo irme. -Rápidamente el pelinegro se puso de pie, dejando a Jimin a medio hablar y caminó hacia la salida como si estuviera escapando de algo, de alguien, de Jimin.

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