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c u a r e n t a y c u a t r o

-Cantar la parte de Demi Lovato en la canción Luis Fonsi no te hace latino, Namjoon.- Regañó Yoongi a su amigo que alardeaba cantando dos palabras en español.

-Tu no sabes nada, cállate.

Habían estado haciendo tonterías desde que los siete se habían presentado en la casa del mediador del grupo. Hasta Hoseok se había mostrado despreocupado y feliz, uniéndose a la estupidez de los otros. El estaba relajado porque ya había aclarado las cosas con su empresa.

Pero en una esquina del salón estaba Taehyung usando su teléfono con cara de pocos amigos mientras tomaba una cerveza. Y del otro lado, Jungkook tenía la misma bebida, pero miraba sus zapatos, aburrido y de mal humor.

Taehyung ya tenía todo resuelto con su empresa (o eso esperaba), se había encargado de hablar con su mánager, Sangdo, así se ahorraría el miedo de hablar con el CEO. Pero a pesar de esa buena noticia, seguía de mal humor.

-¡Taehyung! Vamos a bailar.- Gritó Jimin tomándole la mano e intentando levantarlo. El menor se liberó de su agarre y se acomodó en el sofá.

-No, después.- Respondió secamente para luego volver a su teléfono.

-Aburridooooo.- Le gritó yéndose a bailarle a Yoongi que estaba contra una pared riéndose de todo el escándalo.

Taehyung levantó su vista un poco, encontrándose con la de Jungkook, y no tardó en sacarle amablemente el dedo del medio y sobrarlo con la mirada, para dirigir su mirada nuevamente al teléfono.

Jungkook golpeó el brazo del sofá y apretó la mandíbula ante el acto que había tenido el mayor. Cuándo giro su cabeza para buscar su cerveza, notó que Seokjin se había sentado junto a el.

-¿Está tan mal?- Le preguntó.

-Me bloqueó de Instagram, así que intenté hablarle por Whatsapp.- Contó.

-Y te bloqueó ahí también.- Confirmó Jin mirándolo con gracia.

-Me acaba de dar una mírada que le daría miedo hasta a Jimin, creo que me odia.- Dijo desganado, lanzándose hacia atrás.

-Bueno, debes haberle dicho algo muy feo entonces. Nunca debes herir los sentimientos de alguien a quién le gustas.- Aconsejó.- Para que luego, si algún día te supera, tendrá esa etapa de enamoramiento por ti como un bonito recuerdo. Si lo lastimas, te recordará de manera dolorosa. Y te lo digo por experiencia.- Pasó un brazo por los hombros de Jungkook atrayendolo para darle un beso en la sien.

-Yo no quiero que me supere.- Susurró.

-Entonces ve por el.- Le revolvió el cabello y se dirigió al pequeño tumulto de cuatro personas para bailar con Hoseok.

Del otro lado de la habitación, Namjoon había ido en rescate de su bebé. (su bebé que no es Jimin, por supuesto. Jimin es el bebé.)

Jungkook sólo debía rezarle a todos los dioses en los que no creía, para que Namjoon hiciera algo bien por primera vez en su vida, y convenciera a Taehyung de arreglar las cosas.

Después de todo, la noche es joven.

esto se está
terminando,
lloremos

YA SON 2K
LOS AMO