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Angel Eyes

Conocer a tantas personas en un solo día era un poco agotador.

Hablé más con Jisoo y me di cuenta que era un ángel en la tierra, ayudaba a los niños del pueblo a estudiar en la iglesia, parecía que aquí de faltaba colegios y les enseñaba a tocar guitarra; decía de que los niños eran lo más puro que puede tener este lugar y son la razón de aún tener esperanzas en que el pueblo sea un lugar cálido y de confianza.

Me despedí de él y empecé mi plan en marcha aunque sabía en el fondo de que no me iba a ir muy bien.

Di mi mejor sonrisa ofreciéndole a a las personas que pasaban por allí pero sólo me quedan mirando extraño o solo me estaban ignorando, sentí ganas de rendirme y quedarme en casa a deprimirme pero nadie se tiene que rendir a la primera, debo mantener la esperanza y el optimismo en alto.

Me senté en la fuente y empecé a analizar a las personas a mi alrededor para ver quien me necesitaba, mis ojos se posaron en un chico bastante alto y parecía preocupado, estaba parado en frente de la florería que me había señalado Chan.

Sin pensarlo, ya me estaba acercando a él.

—No quiero ser entrometido pero ¿Estas indeciso en comprar algunas flores? No es tan dificil, las rosas siempre son la respuesta. — Dije divertido así no formar una atmósfera incómoda.

El chico me miró como si hubiera visto un fantasma y sólo negó rápidamente con su cabeza.

—Sólo estoy esperando a alguien pero sé que no querrá verme, esta enojado conmigo y yo no sé qué hacer.

Volteé mi cabeza y miré dentro de la florería y encontré a Chan riendo junto a dos chicos, parecían ser empleados de ese lugar, uno de ellos dio un rápido vistazo hacia afuera y siguió con su misma expresión que era bastante fría.

—Así que te gustan los chicos y ¿Quien es tu pareja de allí?

Me habría puesto a reír bastante fuerte en medio de la calle al ver la expresión que tenía el desconocido ante mis palabras.
Puedo confiar en mi intuición, él estaba en una relación con alguien de allí pero sus ojos no me dejaban en claro si sentía algo verdadero, igual era mi momento para ejercer mi especialidad.

—Soy un experto en ese tipo de cosas, si quieres resolver todos tus problemas solo debes darle esto y se dará cuenta que eres su alma gemela, esta mandarina es perfecta para tu situación.

Si me pagaran por ver la incredibilidad en el rostro de las personas de hoy cuando digo esto podría comprar todo este pueblo.

Aún así veía que él estaba curioso por intentar y dijo nervioso—¿Dices que con esto se dara cuenta que soy el amor de su vida? ¿Aún así si no siente algo por mí?

Amor unilateral, que triste.

Si pudiera adivinar es uno de los dos chicos que está adentro, yo no creo que Chan sea de su tipo.

Espera ¿Qué acabo de pensar?

—Por favor, puedes dármela ahora, quiero comprobar si es verdad lo que dices.

—Tengo que advertirte que esto no le hará enamorarse de ti, sólo hará efecto a la persona que realmente te merece. Si le das solo tendrás un lazo que se puede romper muy fácilmente cuando él conozca su verdadero amor o tú lo hagas.

Tenia que ser directo, esto solo se da una vez en la vida.

Le entregue la mandarina en su mano y se dirigía a la puerta pero un mal movimiento enredando sus pies hizo que se tropezará y empezará a rodar la mandarina en el suelo.

Esto parecía bastante surrealista, no sabía si ayudarlo o dejar que esto fluyera porque parecía que la fruta quería ir a otro lugar, eso es lo que hizo ya que empezó a rodar hacia el otro lado de la calle y el pobre chico tuvo que ir tras ella.

Pensándolo bien no me fue tan mal hoy.

Me preguntó si podía entrar a la floreria ahora pero estaba curioso de conocer a las personas que estaban adentro.

Abrí la puerta y todo paso muy rapido, Chan volteó a verme con una sonrisa y no supe en que momento me había resbalado y me encontraba en el suelo.

—Oh mis lentes de contacto.

｡｡｡

—A la proxima mira donde caminas, Seokmin.—Dijo Chan.

Estaba siendo regañado por una persona menor a mí, que deshonra.

Podría culparlo a él pero no diría algo como "Es tu culpa por tener una sonrisa adorable" sin que sonara como una frase que diría para ligar.

Uno de sus compañeros había sido amable conmigo en recoger mi canasta y ordenar mis mandarinas en esta mientras el otro me miraba aún con la misma expresión que habia visto afuera ¿No se cansa de irradiar felicidad?

Estaba sentado en la silla del mostrador, ya que me habian levantado y dejado aquí, y podía tener una vista de todo el lugar, era bastante artística la decoración y era un detalle que tenia todo el pueblo, podían mezclar lo tradicional con algunos elementos de la ciudad y este era entretenido de ver por lo inusual.

—Cambiemos de tema, presentame a tus amigos.— Otra vez fui directo al grano, quería más información sobre quien de los dos era el que rechazo al pobre chico de antes.

—Yo me puedo presentar solo, soy el príncipe de China y de las flores, Wen Junhui pero puedes decirme El apuesto Jun.— Habia hablando el chico de cabello gris agarrando una rosa en su mano con una expresión dramatica en su rostro.

—Y yo solo soy Jeon Wonwoo.

Fueron las primeras palabras del "sin expresión" y casi me caigo de mi silla, él tenia una voz bastante gruesa hasta podria decir intimidante pero no parecía afectarles a los otros dos, tal vez por dentro era un ser adorable.

Empecé a estudiar su comportamiento a medida que seguía la conversacion y estaba casi seguro que el chico llamado Wonwoo era quien no correspondia al joven desconocido, tenía una aura que daba a entender su incomodidad con algo relacionado al corazón.

Y la razón era bastante obvia, su compañero, Jun.

Creo que estaba presenciando lo que uno llamaría "Triángulo amoroso". Esto pense sin saber que otra persona estaría involucrada.