Deseaba que la tierra me tragara. Todos los pares de ojos estaban puestos en mi, espectantes.
-Verdad o reto.- repitió una chica en el fondo ya algo fastidiada.
Vamos habla. Aún con el maldito alcohol en tus venas eres una gallina. Me dije.
-Dejenla, no tuvimos que invitar una niñata al juego. - dijo Keysi y una ola de risas trajo consigo el comentario.
Él me miraba de manera retadora y la cólera hervía en mi.
-Reto- dije sin titubeos mirándolo directamente.
Toda la sala paró de reírse y ahora todos esperaban expectantes a Keysi.
Este se ríe por lo bajo, compartiendo seguramente una broma privada.
-Te reto a perder tu virginidad hoy.
Toda la sala estalló en risas y mi rostro era un manojo de colores.
-Yo no, yo... - pero era inútil, nadie prestaba atención a lo que decía.
Minutos después estaba sobre Keysi, manoteando su hermoso rostro.
Si, yo. Hannah Torres era una maldita niña compulsiva que se abalanzó sobre su compañero de habitación para proporcionarle una "paliza".
Keysi reía aún más fuerte bajo mis pierna y como si nada tomó presas mis dos manos en una de su mano y con la otro apretó fuerte mis caderas hacia él.
Todo pasó muy rápido y Keysi ya estaba en pie conmigo encima, cargandome sin el mayor de los problemas.
Salimos de la habitación y lo último que logré ver fue a la mayoría de chicos de la habitación riendo y una que otra chica que me miraban con fastidio.
Golpeé con toda mis fuerzas la espalda de Keysi para que me bajara pero nada pasó. Estábamos saliendo de la gran casa.
-Eres más revoltosa de lo que pensaba.
-Eres más imbécil de lo que pensaba.
Su ronca y hermosa risa se hizo oír sobre la música del lugar, que ya de por si se escuchaba lejana.
Por fin me bajó de su hombro.
El alcohol me quizo jugar una mala pasada y me tabalee tan solo en tocar el suelo.
Pero Keysi fue más rápido y me abrazó para no caerme.
Los duros músculos de sus brazos me aprestaban de una manera deliciosa.
Levante mi cabeza para observarle puesto este es muchísimo más grande que mi.
Demonios fue una mala idea haber hecho eso.
Sus ojos verdes estaban fijos en mi. Bajo la luz de la luna se veían espectaculares. Un verde profundo que me traía tranquilidad.
Su aroma delicioso a chocolate y menta inundaban mis fosas nasales.
-Azul rey, te queda bien - dije para luego darle una risita tonta.
Si, el alcohol me tenia loca.
Keysi río bajito por mi comentario.
-Vamos a casa pequeño saltamontes.
Mis ojos no podían despegarse de sus lindos y carnosos labios, desearía morderlos.
Cierro los ojos sin pensar muy bien en lo que haré. Pasan unos segundos y siento unos dedos en mis labios.
-Deja de leer tantos libros sobre amores de mierda.
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No Hables Bajito
RomansaHannah, una chica agobiada por la Universidad, en un momento de libertad entra a una red social para conocer amigos en todo el mundo. Nunca suele encontrar personas agradables pero ese día tuvo que ser el de la suerte. - "Demonios ¿cómo va esto? "...