Capítulo 8 - A la segunda...

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Cuando la alarma sonó me desperté de un salto asustado. Por unos segundos estaba desorientado y no sabía dónde estaba, pero mi mente comenzó a recordar paso a paso todo lo sucedido hasta el momento de esta mañana. Ya no estaba solo, estaba compartiendo apartamento con Jungkook e íbamos a tener que convivir el uno con el otro lo mejor posible.

Iba a ser difícil, pero esperaba que no fuera imposible por el bien de ambos. Cuando me incorporé en la cama, no se oía ningún ruido en el interior, era como si estuviera vacío el lugar. El reloj marcaba las cuatro y media de la tarde, era imposible que Jungkook se hubiera ido tan pronto ¿no?

Salí al pasillo y me dirigí a la zona común, todo estaba vacío e igual de desastre que antes. La mochila, el abrigo, todas sus pertenencias estaban allí así que no se había ido. Debía seguir durmiendo... pero se empezaba a hacer tarde y teníamos que arreglarnos e irnos a la entrada de la academia dónde nos esperaba Yoongi. Me acerqué a la puerta de su habitación y toqué un par veces, no hubo ningún ruido ni algún tipo de respuesta. ¿Me iba a tocar entrar a despertarle? ¿de verdad?

Era una mala idea, malísima, pero peor sería llegar tarde con Yoongi. Me daba más miedo el elemental de fuego que el otro definitivamente, aun así no me gustaba nada la idea de irrumpir en su habitación para despertarlo y desde luego a él tampoco le iba a hacer gracia.

"Jung—Jungkook... ¿estás despierto?". Menuda pregunta más estúpida, era evidente que no. Las luces estaban pagadas y las cortinas a medio poner, lo cual hacía que la habitación se viera bastante más oscura de lo normal sin llegar a la oscuridad absoluta. "Jungkook... despierta, debemos irnos". Nada... el chico estaba prácticamente muerto debajo de las sábanas, de espaldas a mí, tumbado de lado.

Me tocó acercarme más y cuando le toqué el hombro el chico del susto pegó un salto y una descarga brotó de su cuerpo haciéndome echar hacia atrás. "¿Q—qué pasa? ¡¿Qué haces aquí?!", seguía confuso y asustado en vez de enfadado, no me lo esperaba así.

"P—perdona Jungkook, no quería molestarte... pero es la hora de irnos y..." finalmente comprendió y se levantó de la cama al instante. Estaba prácticamente desnudo llevando solo la ropa interior, lo cual que me hizo que sonrojara instantáneamente y me tapara los ojos. "Mejor... te espero fuera... sí".

Intentando salir con los ojos tapados, casi me golpeo con la pared... menos mal que iba poniendo la mano restante para palpar las superficies como seguro. Un par de minutos fuera esperando, finalmente salió de su cuarto y nos dirigimos hacia el vestíbulo. El camino hasta allí fue horriblemente silencioso, ninguno de los dos articuló una palabra hasta el punto de ser algo incómodo... pero no era momento de pensar en tonterías, llegábamos tarde y con Yoongi eso significaba alguna represalia seguramente.

"¡Ya era hora! Casi lográis que me duerma". Yoongi estaba prácticamente furioso, sin embargo Tae y Jimin se alegraban de vernos. Mientras Tae nos abrazaba, pude escuchar como Jungkook balbuceaba algo cómo que era imposible que Yoongi no se durmiera, pero antes de que el elemental de fuego se diera cuenta cambié de tema. "Perdona la tardanza, no volverá a ocurrir".

"Por supuesto que no, si es que esperáis cenar la próxima vez... claro". ¿La próxima vez? ¿y hoy? No podía hablar en serio... "Sabía que iba a haber represalias... ¿acaso no nos vas a dejar cenar?". El resto se quedó mudo, esperaban que estuviera delirando... "No soy tan cruel como para dejaros sin cenar... podréis hacerlo. Pero tendréis que cazar la cena... todos". Algo en la mente de Tae y Jimin hizo clic que el bajito de pelo platino no pudo evitar abrir la boca. "¡No te atreverás Yoongs! ¡No puedes hacernos esto! ¡A mí!".

"¿Cómo que a ti? ¡Nos está castigando a todos!" Jimin quiso librarse astutamente, pero Jungkook no se lo iba a permitir. "Miradlo por el lado positivo... si os vais a morir de hambre, podéis hacer que Taehyung se transforme en algún animal y coméroslo". Se había pasado de la raya con ese comentario, podía creer que quisiera mosquearnos de entrada porque le gustaba pincharnos, pero había un límite. "Eso ha sido cruel hasta para ti Yoongi... así lo único que logras es que la gente que intente conocerte te deteste".

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