Elemental

Capítulo 4 - Reunión

Después de una ducha rápida, me puse uno de los conjuntos nuevos que Jin me ayudó a elegir. Mi sentido de la ropa era peor que el suyo, y eso ya era difícil, así que si iba hecho un espanto al menos no sería culpa mía.

Vestido y arreglado, me dirigí al vestíbulo dónde había quedado con Namjoon que nos encontraríamos. Cuando llegué a la gran sala principal le vi junto a Jin y más gente. "¡Jade! ¡Jade! ¿Te has decidido a venir?". Jimin vino hacia mí contento como si alguien le hubiera cumplido un deseo. Tae vino corriendo a darme un abrazo, parecía que incluso estaba agradecido de haber accedido a ir. Sin embargo, yo no tenía ni idea de que ellos iban a venir con nosotros.

"Acaso... ¿vosotros sois los amigos de Namjoon y Jin?" confuso ante la situación, ambos se quedaron perplejos. "¿Namjoon no te lo dijo? este chico para ser profesor es un completo despistado. ¡Namjoon!" Jimin parecía algo molesto cuando negué con la cabeza sorprendido. Parecía que ellos si sabían que iría.

Jimin fue directo a él, Tae y yo le seguimos detrás y cuando llegamos allí Namjoon directamente ignoró al chico bajito para dirigirse a mí. "Perdona Jade, se me olvidó decírtelo. Aunque como podrás comprobar ya conoces a casi todos. Ya conoces a Jimin, Tae y Jungkook que son los más jóvenes; y a Jin, que hasta ahora era el mayor del grupo; el pelirrojo de aquí con cara de tontaina es Jung Hoseok, puedes llamarle Hobi; Y este chico sentado en el sillón con cara de dormido y de apaleado es Min Yoongi. Llámale Yoongi". El chico tenía el pelo negro puro, unos ojos algo cansados y se podían observar ciertas marcas de quemaduras en el cuello.

"Eso lo decidiré yo Namjoon. Encantado chico, bienvenido al grupo de locos. Huye mientras puedas..." ¿estaba de broma? Por un momento me dejó helado el comentario, pero al ver las risas de Tae y Jimin me di cuenta de que simplemente estaba siendo arisco.

"Cuidado, que el gatito saca sus garras... ¡Miau!". Jimin comenzó a reírse mientras se burlaba de él. Debían tener mucha confianza porque con esa cara de pocos amigos, en la vida me atrevería a bromear con Yoongi. "Cómo sigas bromeando, voy a raparte ese pelo amarillo pollo que tienes". El que se reía hacía unos segundos le había cambiado la cara completamente, tragó saliva y agachó la cabeza. Los demás nos reímos un poco por la vuelta de tuerca.

Salimos de la academia y nos dirigimos hacía un restaurante que, según Jin, era de los mejores de la ciudad. Al parecer a Jin le consideraban un auténtico sibarita de la comida y si todos se fiaban de sus papilas gustativas sin pensárselo dos veces. Una vez llegamos, el restaurante no era muy lujoso pero transmitía esa sensación agradable de local familiar.

El camarero que nos atendió nos llevó a una mesa en el rincón del local. Tae y Jimin se reían de forma cómplice mientras nos sentábamos. "Tae, creo que ese camarero te ha echado ojitos". Jimin se mofó con una voz cantarina, medio susurrando, mientras el chico se ponía rojo como un tomate e intentaba esconderse. Algunos se reían de la reacción del Morphis, sin embargo cierto chico de pelo rojizo no parecía muy contento. "Jimin, ya sabes que no...", pero este le dio una palmada en la espalda volviendo a reírse, guiñándole un ojo.

"Tae... llevas ya un tiempo soltero. ¿Por qué no lo intentas?". Jin trataba de comprender a su amigo, que se veía interesado en el camarero y sin embargo, por alguna razón, se delimitaba a negar con la cabeza. La dirección de los ojos de Jimin pasó de Tae a mi dirección, con una mirada sospechosa que mi sexto sentido gritaba peligro porque algo tramaba. "¿Qué hay de ti Jade? ¿Tienes a alguien o estás interesado en alguien?".

La pregunta me pilló completamente por sorpresa y las caras de Namjoon y Jin parecían un cuadro. Definitivamente, esto indicaba que solo ellos dos sabían la forma en la que había llegado aquí. "¡Jimin! ¿a qué viene esa pregunta?". Jin le recriminó, en ese momento las caras del mayor y el pequeño parecían las de un padre riñendo a su hijo. El chico de pelo rubio se disculpó conmigo por si era un tema delicado para mí.