Hasta que el efecto de las mentiras acabe #OPW19

Le Radeau de la Méduse

KataLu

—"La Vierge du chancelier Rolin"  como verán, esta obra fue echa por Jan van Eyck, es una pintura religiosa realizada en 1435 — las voces de turistas y personas que vivían en el país se alzaron ante la explicación del muchacho, el sonido de las cámaras de fotografía se hizo presente haciendo casi ensordecer al chico —, pero según el donante también puede ser considerado un retrato. La pintura fue encargada por Nicolás Rolin, canciller de Felipe el Bueno, un importante funcionario de la corte de Borgoña.​ Van Eyck no sólo plasmó su apariencia física, sino también su temperamento. Se trataba de un político muy arrogante, lo que explica, por ejemplo, que se atreva a estar frente a frente a la Virgen y mirarla fijamente y también el hecho de que tenga el mismo tamaño que ella — mientras unos tomaban fotos y veían detalladamente la obra y otros apuntaban en pequeñas libretas con plumas gastadas agregó — y de este lado tenemos a "La encajera", o en neérlandes De Kantwerkster del pintor holandés Johannes Vermeer, su composición no tiene una fecha exacta, realmente no se sabe pero se especula que fue entre 1669 y 1670. El tema de la encajera es frecuente en la literatura y la pintura holandesas, como representación de las virtudes femeninas domésticas — las personas parecieron repetir las acciones e incluso los gestos que habían estado haciendo por la mitad del recorrido —. Con mi compañero verán la otra mitad del mitad del museo, espero les haya gustado este recorrido.
—Bueno damas y caballeros por este lado veremos a la famosa Gioconda — el chico de cabello rosado se despidió de su compañero y se fue alejando con el grupo, sonrió complacido por su trabajo y fue a los alrededores del museo buscando a las personas que quisieran alguna explicación de alguna pintura o escultura.

A lo lejos observó a un chico tal vez de 2 metros si es que su ojo no fallaba, era impresionante, quien pasara por ahí no podía evitar mirar sin discreción alguna a aquél chico con un cubrebocas negro, con chaqueta de cuero negro y botas grandes, y es que parecía que él mismo quería llamar la atención de todos, como si fuese parte de ese museo. Se acercó hasta el chico, su interés por él iba subiendo de nivel a cada paso más cerca.

—¿Puedo ayudarlo en algo? — el chico, que efectivamente medía 2 metros y algo, lo miró con desprecio, era obvio, ni si quiera Luffy siendo tan distraído pudo evitar interpretar esa mirada como un "muérete", incluso, si no hubiera notado su mirada, su aura le hubiera advertido. Su cuerpo se tensó bastante pero se quedó ahí, al lado de aquel chico con apariencia de maleante, a contemplar la pintura al frente — Le Radeau de la Méduse — de pronto pareció captar la atención del chico y sonrió con total orgullo —. ¿Quieres... que te explique de esta pintura?
—¿Vas a cobrarme? — el chico lo miró con molestia, le causaba un poco de pánico su semblante pero negó para sí mismo y para el chico de 2 metros.
—Para nada, es gratis — recibió un movimiento afirmativo y siguió con lo que ya sabía, ¿qué no sabía de ese museo y sus rincones? —. Bueno, fue hecho por el pintor y litógrafo francés del romanticismo Téhodore Géricault entre 1818 y 1819, se convirtió en un ícono del Romanticismo Francés y en la obra plasmó una escena del naufragio de la fragata de la marina francesa, Medusa, encallada en la costa de Mauritania — aquel muchacho no dejaba de ver la pintura con toda su atención, a veces el chico de la cicatriz bajo su ojo se preguntaba si realmente le estaba escuchando pues normalmente las personas lo veían de reojo para prestarle atención a su explicación o simular que lo hacían —, el autor quería ser reconocido así que pensó por mucho tiempo el trabajo que iba a plasmar hasta que la noticia  de esta embarcación le llegó a los oídos, 147 personas quedaron a la deriva de esa balsa construida apresuradamente, y todas ellas, salvo 15, murieron durante los 13 días que se tardó en rescatarlos. Los supervivientes debieron soportar el hambre, la deshidratación, el canibalismo y la locura, fue un completo escándalo mundial en esa época pero no sólo se le atribuye la pérdida a la balsa, también era al capitán que actuaba bajo la autoridad de la reciente y restaurada monarquía francesa, para mí era un incompetente pero ¿quién soy yo para decir eso? — pausó un momento y continuó —. Para hacer esta pintura tuvo qué entrevistar a dos sobrevivientes — el chico rió suavemente y los ojos del grandulón bajaron a ver esas mejillas rosadas —, disculpa es que este pintor me da... algo de curiosidad e inspiración pues para saber cómo pintar su cuadro tuvo qué ir a ver a los cadáveres para saber el color de paleta que iba a usar. Debió ser alguien de grandes agallas y con alma de callo y sin sentido del olfato.
—Ya veo — el chico suspiró como si de algo se hubiera acordado o como si una revelación hubiera surgido ante sus ojos —. Gracias — "al menos no es tan maleducado", pensó.
—¿Quieres saber algo más?
—¿Trabajas aquí? — la pregunta le sacó de lugar, ¿es que no se veía que trabajara ahí o es que acaso un turista le diría algo como eso?
—Sí, llevo ya un tiempo trabajando aquí.
—¿Podrías...
—Ajá...
—Las esculturas, quiero saber su historia — Luffy pareció impresionado con su voz, con el tono de vergüenza que el chico desprendía de su garganta, el chico parecía más accesible de lo que aparentaba.
—Claro, sigueme por aquí — los dos caminaron por las afueras del gran museo hasta llegar a un área repleta de lo que el mayor quería ver —. ¿Por dónde empezaré? — habló en voz alta, echando un vistazo a las esculturas —... Oh, mi querida Victoria, ven, ven, mira — arrastró al chico hasta la escultura de la figura de una mujer con alas, envuelta en chifón y un manto traslúcido que daba la apariencia de estar mojado —, ella es Victoria alada de Samotracia también es conocida como Niké Samotracia, hecha de mármol blanco.
—Tiene una linda figura — echó un vistazo al chico y vió que él y Victoria medían casi lo mismo, sólo con una diferencia de 35 cm por parte de Victoria.
—Era de esperar, ella es la Diosa de la victoria, fue descubierta en 1863 por el arqueólogo francés Charles Champoiseau en la isla Samotracia, se cree que se labró para celebrar las victorias sobre Antíoco III Megas. Ella posa sobre la proa de un navío que actúa de pedestal. Una de sus alas no es la original, bueno, en parte ya que fue una reparación.
—Una diosa, ¿de dónde era?
—Samotracia, Grecia, es una de mis favoritas — el recorrido siguió entre las esculturas y las historias llenaban el alma del mayor.