ONE PLAY ✦•|| ＫＴＨ ||•✦ |×Pausada×|

•|7|• Castigo 3

Dió unos pasos a mí, me levanto de aquella mesa, me desató y me volteó dándole así la espalda.

Palmeo una de mis nalgas, levanté mi cabeza y lo vi por sobre mis hombros, bajo la cabeza mirando a su miembro, levantó un poco la cabeza y me miró malicioso con sus ojos totalmente oscuros por el placer. Llevó una mano al elástico que sujetaba aquella prenda a su cintura y lo estiró hacía abajo.

Mis ojos volvieron a contemplar aquella reliquia por segunda vez, mi feminidad palpitaba aún más con solo ver a su miembro; todo venoso, grueso, con la punta más roja que en la noche anterior.

- Voltea y mírame -Le hice caso, pero mis ojos no pudieron evitar mirar aquel falo cubierto en piel y venas marcadas, deseosa me mordí el labio, levanté mi mirada y vi sus ojos, aquellos cristales oscuros que me miraban con lujuria- ponte de rodillas y juega con él -Ordenó apuntando aquel objeto que había mirado hace segundos atrás-

Me arrodillé, me entrego el pequeño pote con lubricante.

- Cómetelo, dije que te daría una paleta si te portabas bien, vamos disfruta del dulce pequeña, Daddy quiere complacer a su bebé, así como su babby complace a su papi.

Tomé el lubricante entre mis dedos y los pase por su falo, él con solo sentir mi tacto soltaba gruñidos, mi feminidad seguía reclamando su placer.

Cuando ya había colocado aquel gel cubriendo prácticamente todo su falo, lo tome entré mis manos y lo comencé a masturbar.

- Con esas lindas manos me encanta que me masturbes corazón, pero lo que más necesito ahora es tu bella boquita. ¿No que tenías hambre?, es el momento de que uses tu deliciosa lengua y tú hermosa boca.

Sin pensarlo dos veces, deseosa rodeé su pene con mi boca, soltó un suspiro cuando mis dientes rozaron sus venas.

- Me encanta tu boca, es cálida, es algo pequeña pero eso se soluciona, pero más me encanta como juegas con él con tu lengua de gatito.

No hacía falta saber que deseaba que utilizara mi lengua, saque su miembro de mi boca causando un pequeño sonido al obtener la separación, me volví a acercar y mi lengua fue a aquella punta roja, tal como él había dicho, lo lamí como si fuera una paleta.

Sus manos fueron a mi cabeza enredando sus dedos en mi pelo, hizo que dejara de lamer para mandar mi cabeza hacia atrás, cerré mis ojos y sentí su miembro en mi cuello, recorriendo y tocando la piel de ésta.

Dejó mi cuello en paz para poder penetrar mi boca, lo hizo de una manera tan brusca, mi garganta se sintió atacada, sus gruñidos llenaban mis oídos, esos gruñidos que salían de lo más profundo de su garganta eran muy embriagantes para mis oídos, movía sus caderas más rápido, sentí un pequeño líquido salir se la punta de su miembro.

-Oh... Mierda, no -Salió rápidamente de mi boca-

Con sus largos dedos sujetó mi cintura y me llevó al baño, yo estaba confundida, pero mi confusión se fue al momento en el que me sentó en el lavatorio y de una estocada invadió mi feminidad.

Me agarré fuertemente de su cuello y él comenzó con el trabajo de moverse.

(…)

Él seguía con sus movimientos delirantes, mi cuerpo iba a colapsar en cuestión de segundos, ya íbamos más de treinta minutos y mi vagina no quería ceder el paso a mi orgasmo, mi feminidad queria seguir siendo torturada por aquel grueso y marcado miembro.

- ¿Por qué cuando lo hacemos nos corremos tan tarde? -Preguntó con el ceño fruncido, miraba sus penetraciones muy concentrado, sujetaba mi cadera con mucha firmeza, mi espalda estaba descansando por la pared fría del baño- me encanta que tardemos, pero me tortura bastante que aún no llegue lo que ambos ansiamos.