Tenías Que Ser Tú

Un Día Como Cualquier Otro

Era casi diciembre cuando todo empezó con mis planes de andanza. Llevaba casi 7 meses desde que me dejé con mi novia. La última por cierto. Sí, es cierto. Se puede decir que yo soy un hombre que coquetea con quien se le pase por delante hasta envolverme con esa persona en un dos por tres. Pero ya las cosas deberían cambiar sí o sí.

Debía poner mis estudios ante todo y dejar a un lado el mundo loco que llevaba en la cabeza. Fueron 7 meses tranquilos para mi. Fueron 7 meses que no estaba con nadie. Fueron 7 meses los cuales seguí con la misma actitud de siempre pero sin pasarme de los límites establecidos por mi propia persona.

Hasta ese día, pensaba que lo mejor para seguir una vida sana y fuera de problemas era no estar con nadie y estar con todos. Si, suena algo complicado. Pero asi era como tenía todo planeado, hasta que llegó ella a mi loca vida.

Todo inició cuando un día como cualquier otro, me encontraba sentado en la sala de mi apartamento en Villevas, un edificio justo al sur de Costa Perry; y no tenía nada bueno que hacer y lo primero que pensé fue...
"Voy a ver que tiene esta gente en sus estados".

Mala idea, pero fue una que cambió mi manera de ser y de pensar. Observando los diferentes estados de los contactos en mi celular, me puse específicamente a ver quienes aparecían en las actualizaciones de María Camila. (Una de mis amigas muy cercanas de la infancia).

María Camila tenía en cada una de sus fotos una chica diferente. Ella sabe como soy yo de HP y estaba seguro que no me pasaría nada de información sobre las chicas de las que le preguntaba.

Le rogué y le rogué para que me diera información de dos de sus amigas, hasta que la convencí y me pasó algo.
Ella estaba clara cuando le dije que iba a tratar de ser un chico más sano y que no quería más nada de solo horas.

María Camila me dijo...
"¡No te voy a decir quienes son! Ellas son mis amigas y no quiero escuchar que te las comiste y que después las pusiste a un lado".

Pero en realidad no era así. Mi plan era sólido y muy frío. Todo estaba calculado. Iba a estar con ambas al mismo tiempo y la que ganara mi corazón por completo me quedaría con esa y la otra puess... Mala suerte, mejor suerte la próxima.

Como dije anteriormente soy un hijo de perra y las personas me valen muy poco. No me importaría los sentimientos de la chica que dejaría a un lado.

María Camila por el otro lado, ya sabía lo que tenía planeado, pero ella estaba en lo incorrecto. No sabía en sí lo que tenía en mente, pero sabía que alguien saldría herido.

Mi amiga me mandó el número de teléfono de ambas y me contó algo sobre las dos.
Me dijo...
"El primer contacto que te envíe es de Manuela Smith. Ella es Colombiana y es super hermosa, super inteligente y super carismática. Manuela siempre te quiso conocer. Le pareces guapísimo según los comentarios de ella desde que le mostré una foto tuya. Ella es bien pervertida y dice que quiere chuparte todo. Habló de tus abs y mucho más. Ella está loca por ti.
El segundo contacto es de una amiga que conocí más o menos 5 años atrás y bueno es una super amiga. Se llama Nicollette Guardado. Es guapa de igual manera. Pero no es igual a la primera. Esta es más seria, más responsable, carismática e inteligente. La verdad creo que la primera te puede hacer más caso que la segunda. Ahh... Y algo más, las dos tienen nuestra misma edad."

Me gané la lotería. Pensaba que la primera iba a ser un blanco fácil, y en efecto si lo fue. Es una loquita en la cama. Más no sentía nada por mi. Solo sentía atracción por mi cuerpo y ella me lo confesó... "Alessandro, me encanta tu cuerpo. Desde hace mucho tiempo quería tocarte y tenerte entre mis brazos. Pero no creo que lo nuestro pueda funcionar. Contigo solo quiero estar para tener sexo cada vez que nos veamos. Eres un profesional en la cama. Nadie me eleva como tu lo haces."

Al escuchar sus palabras, pensé... "Esta no es la indicada y es mejor dejarla. Nunca he tenido algo con alguien que haya pasado mas de dos veces. Va en contra de mis criterios".

Suelo acostarme con alguien solo una vez y mas nunca hacerlo de nuevo. Podíamos hablar y todo lo demás pero con ella era diferente. Era como una necesidad que ambos teníamos que satisfacer y bueno... no mentiré, ella es una fiera en la cama. Es tan excitante tenerla entre mis piernas y hacerlo incontable veces. Pero como ella me dijo 'no creo que lo nuestro pueda funcionar' Pero era obvio, pues ambos desde un principio lo que sentíamos era una atracción sexual más no establecer una relación formal.

La otra chica...