Capítulo 6.

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Podía escuchar pasos a su alrededor, eran constantes y lentos, como si fueran de un lugar a otro a su alrededor, y eso lo llevó a abrir los ojos, así como también el sentirse incómodo, que le hizo suponer que se quedó dormido en el sillón mientras veía las noticias por la televisión, aunque cuando quiso llevar sus manos a su rostro para apartar cualquier rastro de sueño, se dio cuenta que estaba atadas detrás en su espalda.

Los estantes llenos de cajas a su alrededor le hicieron pensar en una escena cliché de película en donde fue secuestrado y llevado a una bodega abandonada, aunque el lugar se encontraba bastante limpio para ser eso, y cuando los pasos volvieron a sonar a su alrededor, vio la delgada figura envuelta en cuero negro que hizo sentir su boca secarse.

—Despertaste, Choi Min Ho —dijo el hombre sonriendo de lado.

—Taem...

—Sh... —un dedo fue colocado sobre sus labios —no me conoces, Choi —se inclinó hasta dejar sus rostros cerca —no arruines esto, y si te empeñas en hablar, voy a amordazarte —sus labios se rozaron —y no quiero hacer eso.

Guardó silencio viendo los ojos de su esposo, que parecieron iluminarse y resaltar en la máscara de Catwoman que cubría la mitad de su rostro, y cuando se giró, notó como la ropa no se veía igual a como él la imaginaba, porque las piernas estaban completamente rasgadas en la parte posterior, abrazando aquellas delgadas piernas que tanto le gustaban, así como en la zona del abdomen se mostraba mucho de éste, cubriendo casi solamente sus pezones, unidos por delgadas bandas negras del mismo traje.

Taemin sonrió cuando notó la mirada de su esposo recorriéndolo de la cabeza a los pies, porque eso había sido algo que quería provocar en él, no por nada se había tomado el tiempo de modificar el traje que compró, que sólo era cuero sin gracia, al menos eso le pareció cuando se lo coló probándose luego de llevar a Min Ho al sótano de la casa, aunque sabía que eso era innecesario, porque pudo encerrarlos en la habitación, pero su hijo estaba durmiendo, lo que menos que quería era terminarlo despertando.

Con las palabras de Taemin y la manera tan cautelosa con la que se movía, entendió que su esposo estaba interpretado alguna clase de papel en la que él era la víctima, al menos su posición era clara al estar atado a una silla nada cómoda, aunque no se quejaba demasiado, sólo que la cuerda estaba un poco apretada alrededor de sus muñecas.

Taemin se acercó a una pequeña mesa y sonrió algo nervioso cuando tomó el látigo de cuerpo negro, porque no estaba seguro de poder usarlo sin lastimar a su esposo, pero su plan había sido llevar a Min Ho hasta ahí, incluso le dio unas gotas para dormirlo y poder arrastrarlo al sótano sin que se despertara, y nada iba a arruinar su plan de esa noche, porque si bien su esposo quería verlo en el traje de Catwoman, las cosas serían en esa ocasión como él las quería, y si Choi se ilusionó con tener el control, lamentaba que tuviera que decepcionarse, porque no lo haría, esa noche sería él quien tuviera el control de toda esa situación.

—Vamos a usar a éste amiguito, Choi.

Le mostró el látigo, y los ojos ampliándose por la sorpresa de su esposo, fue algo que Taemin esperó, porque ellos siempre habían sido un matrimonio "sano", por decirlo de esa manera, tal vez tenían uno que otro juguete sexual, pero no usaban, ni cuerdas, esposas, látigos, ni nada que pudiera llegar a lastimar al otro, nada hasta ahora.

—He oído que puedes llegar a sentir placer al ser azotado, ¿quieres comprobarlo?

—Sabes usar eso, ¿verdad?

—Uh —sonrió —¿quieres que sea sincero? —rió nervioso —no, pero vamos a aprender juntos.

Taemin se acercó a su esposo, pasando el látigo por su rostro, bajándolo por su pecho, y en ese momento llegó a preguntarse si tal vez debió de haberle quitado la ropa antes de atarlo, recordando cuando iniciaron eso y Min Ho rompió sus pantalones preferidos, y tal vez él podría desquitarse rompiendo su camisa y el pantalón de uno de sus costosos trajes, pero sentía que si lo hacía en ese momento rompería con lo que estaba haciendo.

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