Lady Killer II .- Perfeccionando a la Asesina

Problemas

Bueno, todavía no podía creer lo que estábamos a punto de hacer, pero ahora podía entender el porqué estaba vestida con solo un bikini, en lugar de llevar mi traje completo.

.- Explícame de nuevo, ¿Dónde pasarán por nosotros?-.

Bástian sonrió el ver mi expresión de incredulidad.

.- A mitad de camino, entre la isla y la playa de la ciudad-.

Eso estaba exactamente a mitad del mar.

.- ¿En el océano? ¿Cómo van a recogernos ahí?-.

Esto no tenía pies ni cabeza, Owen sonrió, bueno, todos lo hicieron.

.- En un jet, pero no cualquiera, este pequeño avión está tan bien equipado que puede ser realmente silencioso y además, puede hacerse invisible a los ojos humanos, es un avance tecnológico sorprendente-.

Fruncí el ceño.

.- ¿Eso realmente existe? ¿Cómo puede siquiera hacerse invisible?-.

La sonrisa de Owen se hizo aún más amplia y me explicó con fascinación.

.- No es invisibilidad tipo magia barata, el material que reviste el jet tiene la propiedad de poder desviar la luz, y camuflajearse con el entorno, como las iguanas, eso lo hace práctico en cualquier lugar, pasa desapercibido-.

Bueno, viéndolo de esa manera, la idea no sonaba tan descabellada. Pero el hecho de ser recogidos a la mitad del océano, sin nada más que nuestras cosas era realmente ilógico.

.- ¿Pero si no utilizamos la lancha, como llegaremos?-. Insistí.

.- Nadando-. Damon respondió, intentando captar mi atención, no lo miré.

Suspiré audiblemente mientras salía por la puerta con mi maleta al hombro, era hora, y tenía un enorme camino por recorrer.

.- ¿Te ayudo con tu maleta?-. Preguntó Jaziel saliendo justo detrás, de mí, y por delante de Damon.

.- Puedo llevarla, gracias-. Sonreí mientras caminaba hacia la playa.

Escuché como caminaban detrás de mí, pero no me giré ni una sola vez.

Una vez que todos estuvimos al borde de la playa me detuve en seco. Un vago recuerdo viajo a mi mente.

.- ¿Mark?-. Voltee a mirarlo mientras me fruncía el ceño y se acercaba a donde estaba; podía ver un rastro de preocupación fijo en sus ojos.

.- ¿Qué pasa?-. Se acercó y delineó mi entrecejo.

.- ¿Estás bien con ir nadando hasta el punto de encuentro?-. Mi voz casi fue un susurro, pero estaba segura que todos habían escuchado mi pregunta.

Mark frunció aun más el ceño, como si eso fuera posible, y se veía desconcertado.

.- ¿No te sentiste extraño cuando viajaban del pueblo hacia la isla, rodeado de pura agua?-. La comprensión inundó sus facciones.

.- Si lo pienso ahora, sí, me sentí con ganas de vomitar todo el camino, y pensé que me desmayaría dentro de la lancha-. Se sonrojó de vergüenza-. Pero supongo que es por el hecho de no estar acostumbrado al ajetreo de las olas-.

Pero, por su tono de voz, sabía que no creía una sola cosa de lo que había dicho.

.- ¿Por qué es eso tan importante, Audrey?-. Preguntó Peter, él casi nunca hablaba, lo que lo hacía extraño e incómodo.

.- Porque el agua lo debilita, y se siente de esa manera estando resguardado en una lancha, no puedo pensar en cómo lo hará sentir al tener que sumergirse en toneladas de agua-. Susurré.