Papá:
a ti si te vi. Fue un efímero momento. Abriste la puerta y la cerraste. Corrí tras tu sombra en la esquina de los pasillos, pero tu también corrias.
No lo entendí pero pasaron los años y dejé de ser inocente. Deje de creer en Papa Noel, los Reyes y aunque duela, también deje de creer en ti. En la escusa que me dieron las cuidadoras del orfanato sobre ti, y en el mundo de historias que me había creado para contarte.
Pero te entiendo, no te quiero, pero te entiendo.
Cada humano hace lo que le han enseñado.
Yo también huiré papá.
Coral.
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Quisimos ser sirenas
Teen FictionQuisimos ser sirenas pero no sabíamos nadar, y las leyendas de marineros acabaron quitandonos el aire de los pulmones. Quisimos ser sirenas y acabamos siéndolo.