¿En cuánto llegas?

5 0 0
                                    

Desde aquel mensaje,
aquella despedida sin un adiós,
Pero tampoco con un hasta pronto,
Te esperé.

Aquella ultima vez que hablamos,
Mejor dicho que hablaste,
Porque yo no pude decir nada
La decisión ya la habias tomado tu solo,
Desde ese día nada fue igual,
Aunque hayas dicho
"Pero, podemos ser siendo amigos"
Al sentir lástima por mi,
Desde ese día no hablamos más.

Nunca me hiciste saber,
Si por casualidad,
Algún día me cruce por tu mente,
Si algo te hizo recordarme
Recordarnos,
Juntos,
Tú y yo,
Como solíamos ser.

Tampoco te interesaste
Por como estoy,
Después de ese dia donde
Con esa mirada que me hacía sentir en casa,
Me hizo sentir desnuda en pleno invierno,
Sin techo en un día de mucho viento,
Pidiéndome espacio,
Pidiéndome tiempo.

Tampoco te preocupaste por
Si pude cumplir alguno de mis sueños,
O si arregle la pelea con mi amiga,
Si pude volver a hablarle a mis padres,
Si encontré un hogar,
Después de que me echaras del nuestro.

A pesar de todo lo que pasó,
Aun después de ese día,
Cuando volví a casa con el corazón a pedazos,
Y el alma atravesada por tu frialdad,
Te esperé.

Cambie el sonido de tu notificación
Y esperé tu mensaje,
Esperé un llamado a la puerta,
Un día,
Dos dias,
Una semana,
Tres semanas,
Luego pasó un mes,
Siete meses,
Y se hizo un año,
Y yo seguía esperando(te).

Al día de hoy
Todavía no reconozco el sonido de esa notificación especial,
Porque nunca sonó,
La imaginé,
La confundí con muchos otros sonidos,
Mas de una vez salté de la cama porque creí que eras vos,
Pero no eras.

Te esperé con café recién hecho,
Con dos de azúcar
Y un chorrito de leche,
Como te gustaba.

También te esperé con té de frutilla,
Un chorrito de edulcorante
Y mis medialunas caseras que tanto decías que te gustaban.

Te esperé con una cerveza,
Bien fría,
Casi helada,
Escarchada por fuera
Y algo salado para picar.

Te esperé en primavera,
Con tus flores favoritas
En el florero de la entrada,
Perfumando la casa.

Te esperé en verano,
Con limonada,
Hielo,
Y la pileta
Con el inflable donde jugabamos.

Y te esperé en otoño,
Cuando ya las hojas de los árboles acompañaba a mi corazón,
Que se iba secando, a punto de caer a pedazos,
Me puse la bufanda azul que me regalaste para mi cumpleaños
Y me paré en la puerta
Esperando a que llegaras,
Con un abrazo guardado en el bolsillo.

También te esperé en lo mas frío del invierno,
Con el corazón hecho trizas,
Y casi tan helado como la estación

Preparé el sillón, con algunas frazadas,

De esas suaves y con pelitos de la que eres fan,
Con un chocolate caliente,
Y las mejores comedias que encontré.

Pero tampoco llegaste,
Y yo seguía esperándote,
Con la misma ilusión de siempre,
Como la primera vez,
Con los ojos brillosos
Y fascinados
Por poder admirar al mismísimo universo,
Por tenerlo a mi lado
Y sonreír juntos.

Y todavía espero conocer ese sonido de tu notificación,
Esa musiquita especial que me trae tu mensaje
Diciendo, en cinco minutos llego amor,
En cinco minutos
Amor.

Memorias del intento de tu olvidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora