Future Spirit

Tu alma

Ella la miraba y supo que nunca dejó de amarla, desde el primer momento en que cruzaron miradas, que esos ojos azules eran su salvación, su único amor, por quien esperó desde que era una niña, al verla por primera vez cuando era una niña en su planeta, cayendo bajo el embrujo de aquella sonrisa radiante como el mismo sol, y juró convertirse algún día en un héroe para combatir a su lado, en su niñez no lo sabía pero fue amor a primera vista, aunque solo de su parte.

Al crecer, conoció la historia de su ídolo y le entristecía saber que la sonrisa del sol, era radiante externamente pero internamente ya no había luz, demostraba su gallardía e imponencia al caminar, mostrándose como el héroe que es, pero ocultando su más grande dolor, su alma ya no existía, y por esa razón se negó a casarse con ella la primera vez que su padre lo sugirió, no pretendía ganarse el afecto de su ídolo de esa manera tan repulsiva, como un convenio interplanetario, y todos sus principios y valores sabían que estaba haciendo lo correcto, hasta que el sol tocó a su puerta. Temía su desprecio por solo considerar aquel matrimonio arreglado, sin embargo no fue así, ella, solo le hizo una pregunta que jamás olvidará.

¿Por qué no quieres casarte conmigo?

En ese momento hizo lo correcto, le fue sincera, que no podía casarse con ella, pues sentía incorrecto verse suplantar para todos, el lugar que le perteneció a su alma, y le prometió que buscaría otra manera de evitar la guerra, sin embargo, el sol simplemente le sonrió con calidez y ternura, acariciándole las mejillas, para después tomar sus manos con delicadeza, hipnotizándola con esa mirada azul eléctrico, y de una manera sabia pero cariñosa la convenció.

A veces lo correcto no nos parece adecuado, sin embargo debemos hacerlo por el bien de los demás, si tú quieres la paz de tu gente como yo con la mía, te pido formalmente casarte conmigo, te aseguro que ella estaría feliz de saber que te elegí a ti, tu alma es noble y contigo me siento bien.

Era un inicio, y entonces aceptó casarse con ella, fue tan feliz el día de su boda, portando con orgullo el símbolo del sol en su pecho, disfrutando de las atenciones en la fiesta, en ningún momento dejó de sonreírle, tal vez lo hacían por su gente pero también, por la paz de ambas, volviéndose un sólido matrimonio, que no pudo consumarse hasta dos años después, cuando el sol por primera vez le dijo, "Te amo", creyó estar soñando pero no, era real, y nunca buscó arrebatar el lugar que ocupaba el alma del sol, al contrario alimentaba su recuerdo, cada aniversario, confortándola en la nostalgia, y se volvió una con ambas, todo marchaba a la perfección.

Así lo fue hasta que el sol comenzaba a apagarse, una extraña enfermedad atacó el cuerpo de su héroe, impidiéndole usar aquellos inmensos poderes, pues cada que los utilizaba, ese fuerte cuerpo iba deteriorándose, una muerte lenta y dolorosa, sobre todo para sí, no soportaba verla decaída, pues incluso en su tiempo no tenían oportunidad de crear una cura, y el corazón del sol se vio afectado, llevándola a la cama, pues una noche se durmió pero ya no despertó, seguía con vida, pero todos sabían que le quedaba poco tiempo.

Y entonces tomó una decisión, al enterarse del origen de aquella extraña enfermedad, decidió viajar al pasado, interfiriendo en los designios del destino, usando su poder para desviar la nave del sol y forzándola a aterrizar por primera vez en la Tierra. Conocerla de joven fue asombroso y su amor incrementó, no obstante sabía de su misión, y con la sangre obtenida alimentada del sol amarillo, tuvo que dejarla, volviendo a su tiempo, dónde pudo crear un suero capaz de mantenerla más tiempo con vida, pero no curarla; en su tiempo habían pasado solo dos meses, y al no ver mejora, decidió viajar al devastado Krypton, hallando una manera de por fin salvarle la vida, pero tenía que hacerlo de nuevo, viajar por segunda vez, al pasado, arriesgándose a cambiar o empeorar su futuro.

-Princesa, ella no aceptaría esta decisión-

-La amo, y no pienso dejarla morir-

-¿Y sí eso es lo que ella busca?, ¿morir para reencontrarse con su alma?-

-Claro que no, ella le prometió a su alma nunca desear la muerte, la prueba de eso es que ha luchado por mantenerse con vida, y yo le ayudaré a cumplir esa promesa-

-Su majestad se enfadará cuando se entere de sus planes, alteza-

-Entonces tú deberás protegerla, cuida de ella, Brainiac-

El simplemente asintió poco convencido, pero se encargaría de cumplir su nueva misión. Acercándose a la amplia cama bajo las luces solares, se arrodilla al lado de su esposa, tomando su mano y besándola con lágrimas en los ojos, no iba a permitirle a esa enfermedad apagar a su sol, no cuando el alma de esta, jamás se lo perdonaría.

-En la salud y enfermedad—solloza—Te amo, por favor resiste hasta que regrese, ella es la única que puede curarte, tu alma-

Besa los labios de su esposa inconsciente, colocándose la túnica negra con capucha para salir del palacio, y así comenzar su viaje, rogaba a los dioses y a Rao, que todo saliera bien, el alma de su sol, era su única esperanza, lo que significa el símbolo que porta en su pecho.

-Lena Kieran Luthor, su alma y salvación-