Capítulo 33|Comprensión.

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Respiré profundamente con el frasco apretado contra mi pecho. Estábamos nuevamente en el hospital, caminando a través de los pasillos cautelosamente para ir a la habitación de mi hermano.

Era de noche.

Sentía muchos nervios, demasiados. Él despertaría si esto funcionaba después de tanto tiempo.

Tragué saliva en cuanto llegamos a su habitación.

Shawn es mi hermano, lo amo con todo mi corazón, es un momento serio e importante el que pueda despertar pero... sinceramente tenía miedo de lo que seguía después.

Ver a mis padres después de tanto tiempo era algo que me hacía temblar, de tan solo imaginar que me estuvieron buscando por mucho sin alguna esperanza, me hace parecer mala hija.

Solo por el hecho de que estaba viva, algo diferente pero ahora era libre, y no fui para avisarles que estaba bien, que no se preocuparan.

Camille tenía la puerta en la perilla de la puerta, me estaba viendo para que le confirmara en abrirla.

Pero cuando abrió la puerta, por un segundo, mi corazón se detuvo.

Allen abrió la puerta de golpe expulsando aire violentamente.

Shawn...

—Se lo llevaron —susurré queriendo llorar—. Se fue...

—Camille, baja e investiga con la recepcionista —ordenó Allen y ella comenzó a caminar.

No podía creerlo, de todas las cosas que temía una de ellas estaba pasando.

Se podían meter conmigo, intentar capturarme, hacerme sufrir e incluso encerrarme de nuevo, pero no debían de meterse con mi hermano.

—Lo vamos a encontrar April —dictó Allen y solo pude asentir.

—¿Puedo ayudarles en algo?

Ambos giramos hacia una enfermera, tenía una carpeta contra su pecho, estaba observándonos fijamente, más porque empezaba a querer llorar. Sonrió y giré a Allen.

Reí ligeramente porque le sonreía y estaba un poco sonrojada bajó su atenta mirada.

—Buscamos a Shawn White.

—¿Son familia? —preguntó.

—Soy su herm...

—¡Hannah! —gritó Allen y lo cuestioné—. Quiere decir que pues si, primos lejanos.

—Oh, bueno los padres decidieron trasladarlo de habitación a una más cómoda, está en el último piso.

Pidió que la siguiéramos con la mano y es lo que comenzamos a hacer.

Sentí un alivio dentro de mi. Pain no se había ni molestado en venir por mi hermano, estaba a salvo.

Llegamos a la habitación y la enfermera abrió la puerta. Ahí estaba Shawn, inconsciente, dormido y totalmente adorable. Nunca pude resistirme, o decirle que no cuando quería algo, no era chiflado en sí, él daba demasiado amor a alguien que quiera demasiado.

—Cualquier ayuda que necesiten... háganmelo saber.

Dijo antes de irse, no sin antes mirar a Allen con anhelo.

—Vamos, saca el frasco y viértelo en tu hermano.

Dijo y lo miré atentamente.

—¿Qué?

—Allen por Dios. Eres inteligente en tácticas, peleas bien y sabes muuuchas habilidades con tu poder, pero de todo, ¿no puedes darte cuenta que la chica estaba loquita por ti?

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