𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐆𝐋𝐀 𝐍𝐎 𝐄𝐒𝐂𝐑𝐈𝐓𝐀

Capítulo 10

Estoy sola con Matt, y estoy tocando su cubrecama con una mano y rápido la dejo ir, tratando de no notar sus cosas. O a él.

Es difícil porque el aún está sentado junto a mí, en silencio, pero ahí esta tan tranquilo ahora. Está tan tranquilo que puedo oírlo, y él no se está moviendo. Yo no me estoy moviendo, estamos solo sentados.

Es tan tranquilo, tan silencioso. Esa clase de silencio que hemos compartido antes, si alguno de los dos se mueve, algo pasara.

—¡Casi listo! —Anna nos gritó, su voz débil, pero alegre, y yo muevo nerviosamente, sintiéndome culpable y atrapada, queriendo estar aquí, pero queriendo estar lejos, en casa, segura de mis pensamientos que cruzan por mi cabeza. Matt está aquí sentado junto a Matt, pensando en mí, ¿Querrá hablarme? ¿Querrá mirarme? Debería irme, y eso exactamente es lo que le digo.

—Debería irme, Anna y tu debe querer estar solos y...

—No —Matt dice y pone una mano en mi brazo. Sus dedos son cálidos temblando suavemente, lo veo, lo siento—. Quiero decir, puedes... Quiero hablarte sobre el viernes —el baja su voz—. Traté de llamarte el domingo, pero colgué porque yo... Yo no… —suspira—. No fue mi intención que esto pasara.

Primer pensamiento: Él no recuerda el “beso” o “cuando nos besamos” él no dijo exactamente qué había pasado, lo que hicimos, y sé que eso no puede significar nada bueno. "Sobre el viernes” xno fue mi intención” Bueno eso suena como un “error” más, el corto cuando llamo.

Dos pensamientos se cruzaron en mi cabeza, una vertiginosa subida para luego caer chocando violentamente. Ojalá hubiera solo hubiera sido la subida.

—No le dije nada a Anna —sé que debería mirarlo y sonreír para mostrarle que estoy bien, que todo estará bien, pero no pudo. Todavía no, solo diré lo que necesito y me iré.

—Tampoco se lo voy a decir. Se que no fue tu intención, eso dijiste.

—Pero, no quise decir eso —hablo pasando su mano por su cabello—. Quiero decir, no fue mi intención besarte, pero no me arrepiento de hacerlo. Se que debería, lo sé, pero no lo hago.

Se hizo un silencio en el ambiente, por un largo rato hasta que él volvió a abrir su boca para hablar.

—No me arrepiento —él susurra—. Quizás lo más razonable es que debería, pero sé que no lo hago.

Él quiso besarme, él quería besarme, él realmente quiso besarme.

Hay un pequeño rubor en su cara, cubriendo sus pómulos y su frente, el luce nervioso, pero entonces lo miro un poco y nos estamos mirando fijamente. Solo existíamos nosotros dos en ese momento.

—¡Ya pueden bajar! —Anna gritó.

Anna había terminado de preparar la comida, ella quiere estar con Matt me hizo ir con él porque está preocupada y se siente culpable.

Estoy aquí con su novio, hablando de un beso que la destruiría.

—Yo... —ambos decimos al mismo tiempo, parece que caímos en cuenta de donde realmente nos encontrábamos y la situación en la que estábamos.

Pero la cosa es, y es horrible, lo sé, que eso no es suficiente. Todo lo que sé y aún no es suficiente para hacerme parar de pensar en Matt. No es suficiente para mantenerme pensando en el Matt de Anna, como el novio de mi mejor amiga.

Él recuerda el beso y yo también, ambos nos preparamos al mismo tiempo, me pregunto si todo dentro de él está tarareando, esperando como yo. Luego aquí estamos de pie junto a la puerta, y no podemos pasar por esta juntos, pero tenemos que hacerlo porque Anna esta escaleras abajo esperándonos.