Esto es Yaoi hard. Mis queridos personajes serán los protagonistas de esta historia llena de amor, perversión y violaciones. Bienvenidos y bienvenidas, mis pequeños pecadores 7u7.
Yuki salió de la habitación con una sensación rara en el pecho. Era una opresión enorme, que no le dejaba apenas respirar. Repasó las palabras de Leen en su mente. "Y pensar que en algún momento me llegaste a gustar"...¿Acaso le gustaba? No podía ser. Solo habían estado juntos algunos minutos. Pero esas palabras y lo que hizo después de quitarle la ropa....Realmente se sentía muy bien. Si no hubiera hecho nada, quizás....
-NO!!! NO, NO, Y NO!!! ES IMPOSIBLE!!! NO SOY GAY!!!
Yuki espantó todos esos pensamientos de su cabeza. Quería pensar en cualquier cosa menos en eso. Yuki se disponía a salir para no volver pero algo lo detuvo en cuanto dio el primer paso. Justo giró la cabeza y vio como la chica que le había empujado antes coqueteaba con Leen y él no hacía nada en contra. Las lágrimas se acumularon en los ojos de Yuki y ni siquiera sabía porqué. Grandes sentimientos emergieron dentro de él. Confusión, tristeza, rabia...
-"Hace unos segundos decía que me quería y ahora está así? Creía que...un momento. QUE ES LO QUE CREÍA??!!! NO SOY GAY!! ME DA IGUAL LO QUE HAGA CON SU VIDA!!!"- pensó Yuki.
De pronto, un chico se chocó con él por accidente.
-Oh, lo siento muchísimo! Estás bien?.- preguntó.
-Si, si. Solo ha sido un empujoncito.- respondió Yuki, dejando de lado el hecho de que casi le tira al suelo.
El chico era bastante alto, no tanto como Leen, pero más alto que la mayoría de chicos del bar. Tenía el pelo largo y de un precioso marrón chocolate. Sus ojos oscuros miraban a Yuki tanto con preocupación como con deseo.
-Disculpa, puedo invitarte a una copa en compensación?
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Este nuevo individuo agarró a Yuki de la cintura y fue bajando la mano poco a poco hacia su trasero.
-N-No, gracias...
-Vamos, nos lo pasaremos bien.- siguió insistiendo el chico.
Su mano, su tacto...Todo se sentía tan mal. No como cuando lo hacía Leen. Yuki quería gritar por ayuda pero el volumen de la música le dio a entender que nadie podría oírle.
-"No...No me toques. No quiero que me toques."-pensó Yuki.- "No quiero que me toque nadie que no sea Leen!!".
Yuki abrió los ojos. Así que era cierto. Realmente sentía algo por Leen. De la vergüenza se quedó paralizado. El nuevo sujeto se inclinó para besar a Yuki pero entonces una mano lo apartó de un empujón, alejándolo de él. Esta mano pertenecía a Leen.
-No te atrevas a tocarle. Él es mío.
-Pero qué te pasa, puta?!! Sólo eres el producto de este bar!! Los clientes no son cosa vuestra!! No te metas donde no te incumbe!!
-Lo siento estimado cliente, pero son las normas. En el mismo cartel de la entrada lo pone. Nos guardamos el permiso para atender a la clientela deseada por los empleados. Así que ya estás sacando tu culo de aquí si no quieres que te saque el guardia de seguridad.
Leen guardó silencio tras soltar su frase de victoria mientras abrazaba el pecho de Yuki contra el suyo. Yuki se aferró a él como un salvavidas, casi a punto de llorar. El cliente misterioso se marchó soltando maldiciones, jurando que volvería. Leen suspiró, visiblemente aliviado. Yuki no pudo esconder su entusiasmo.
-Leen!!- gritó, echándose en sus brazos mientras sus mechones de pelo cubrían sus lágrimas.- Muchas gracias!! Me has salvado!!
-Vamos, vamos. Sólo ha sido una mala pasada. No es para ponerse así.
-Pero esque yo no quería hacerlo con él. No puedo hacerlo si no es contigo!!!
(Y con este tremendo final terminamos el capítulo!! Siento haber tardado tanto en publicar pero al menos hemos conseguido llegar a la parte 5. Estáis tan instigados como yo? Tengo ganas de saber cómo se lo tomará Leen...)
