Friend Please (Aristemo)

Bebé lloron.

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Todo el resto del día fue bastante normal...me la pasé solo, pero me divertí con mis muñecas.

Quería acercarme a mi amigo Ari, pero me daba penita el interrumpirlo, se veía tan concentrado en su peluche que no quería romper esa emoción de verlo.

Llego la hora final y todos estaban feliz de que terminaran las clases, pero mientras guardaba mis cosas podía ver qué Aristóteles no estaba alegre de irse. No hablaba, ni decía nada, pero lograba ver que quería llorar a través de sus ojos los cuales se ponía rojitos.

Me puse mi mochila y me acerque a él, me causo curiosidad el verlo así.

-¿Qué pasa? - le pregunté lo más tranquilo que pude.

-No me quiero ir - figuro un puchero y sus ojos se empezaron a cerrar intentando no llorar.

-¿Por qué no? Podrás estar en tu casa...con tus juguetes, tú mami, tú cuarto, tú papi. Eso es genial - intentaba animarlo más pero al parecer solo hice lo contrario.

Aris no contesto, sólo abrazo a su peluche y empezó a llorar descontroladamente. Yo me asusté y me aleje de él.

Todos los demás niños lo veían mientras salían, la maestra vino corriendo y lo cargo.

-No llores, ya llego tu mamá por ti - le apreto su cachete y lo llevo a la salida.

Después de unos minutos de que se fue, la profesora me llamó por mi nombre y salí. Estaba mi papá a lo que me lancé a sus brazos.

Al día siguiente Ari también llegó llorando al salón por lo que se ganó su primer apodo, todos lo llamaron "Bebé llorón". Pero ese no sería el único, y poco a poco ambos recibiríamos apodos que nos llevarían a lo que ahora somos.