De cigüeñas y copas Syppi

Almuerzos y hora de dormir

El camino a la cafetería es hilarante, Eliza se une a ellos mientras los otros agentes, que suplen a sus compañeros incapacitados por el momento, a veces miran boquiabiertos a los niños o se quejan de lo adorables que son sus compañeros de trabajo en miniatura ya que son niños. Winn y Kara se divierten ante la atención, sonríen y saludan a todos los que pasan, incluso sonríen tímidamente cuando las personas se detienen a hablar con ellos o les desean lo mejor, sin embargo Lena está contenta de llevar a su nueva compañera, la muñeca, mientras evita tímidamente las conversaciones con extraños.Maggie tuvo que cargar a Drew después de prometerle que los libros estarían allí después del almuerzo y la hora de la siesta y que los libros no querría tener comida por todos lados.

Alex organiza a todos a través de la línea de la cafetería del DEO, tomando botellas de jugo y leche después de preguntar a los niños cuales son sus preferencias. Winn pide leche con chocolate y pronto todos los niños quieren leche con chocolate y Alex no protesta porque tiene que admitir que ella también va a tomar leche con chocolate.

El personal de la cafetería ha preparado varias opciones como de costumbre, pero el menú de hoy incluye una variedad de tazas de frutas y otros alimentos apropiados para niños que requerirían un poco de corte para limitar los líos.

"Agente Danvers, veo que tiene las manos llenas hoy", Kaplan, el hombre amistoso que dirige la cafetería, los saluda; era uno de los pocos empleados del DEO que no habían comprado la fría personalidad de Alex. Lo cual era algo que ella había llegado a apreciar.

"Bastante lleno, nadie dijo que trabajar para el DEO sería aburrido y esto no decepciona", le dice Alex mientras ayuda a Winn a elegir un sándwich de pavo, una taza de gelatina y algo de fruta. Dejándolo de lado y dejándolo sostener su caja de leche, ella ayuda a Kara a elegir su comida, agradecida de que su hermana haya cooperado un poco para elegir algunas opciones relativamente saludables.

"Déjenme ayudarles a instalarse", asegura Kaplan, empacando uno de los almuerzos favoritos de Alex, el filete de queso Philly y las papas fritas, antes de ayudarla a recoger las bandejas.

"Gracias, Kaplan", dice Alex con una sonrisa, "tratar de mantenerse al día con todos los niños pequeños es solo un poco más fácil que tratar de manejar a todos los nuevos reclutas".

Kaplan solo se ríe mientras ayuda a Alex a cargar un par de bandejas de comida, "También son mucho más adorables".

"De acuerdo", Alex se ríe entre dientes mientras levanta a Kara y la pone en el banco antes de ayudar a Winn. Maggie los sigue con Lena y Drew, ambas niñas optaron por un queso a la parrilla y un poco de sopa de tomate. La pelirroja inmediatamente se pregunta si trajo suficientes toallitas y ropa limpia para hacer frente a la hora del desastre, su madre se acerca con su bandeja ayudando a Alex a abrir los cartones de leche antes de sentarse también. Los niños prácticamente devoran la comida, y el desorden es mucho peor de lo que Alex esperaba, agradecida de que su madre pensara empacar algunos juegos de ropa extra ya que Lena está usando más sopa de la que probablemente comió.

Después de una rápida limpieza en el vestuario, Alex y Eliza ayudan a Maggie a llevar a las niñas a la litera para una siesta, aunque Kara insiste en que no necesita una siesta, lo que hace que Winn se queje de que no quiere perder el tiempo durmiendo .

"Amigo, es solo una hora y te sentirás mucho mejor después de una siesta", le dice Alex, sonriendo un poco cuando bosteza cansadamente por un gemido de protesta. "¿Qué te parece esto? Te meteré y te pondré cómodo y si no puedes quedarte dormido en los próximos cinco minutos, puedes levantarte y seguir jugando. Lo mismo para ti, Kara."

"¿Lo prometes?" Kara pregunta un poco indignada con una pequeña mueca en su rostro.

"Lo prometo", le dice Alex mientras levanta a Winn sobre la cama y le cubre con las mantas, observando cómo él se acurruca en la almohada y suspira un poco feliz. Frotándole la espalda, ella sonríe mientras susurra: "Dulces sueños, Winn".

Alex acomoda a Kara, encontrando divertido que Kara siga siendo gruñón a pesar de que claramente necesita una siesta, porque sabe, después de todos los exámenes que le realizo, que Kara no está muy saturada de luz solar y es probable que no esté completamente superpotente a esta edad, no es como si Alex hubiera llamado a Clark y le preguntara acerca de su infancia y de como era un un pequeño kryptoniano, claro que no.

Alex saca el juguete del golden retriever y se lo da a su hermana mientras tira de la manta hasta sus hombros y la arropa, inclinándose, presiona un beso en la frente de Kara y le dice: "Dulces sueños, te amo, Kara".

"También te quiero, Alex", Kara le dice con una sonrisa adormecida, bostezando mientras cierra los ojos y abraza al cachorro de peluche y se relaja en el sueño, disfrutando de la sensación relajante de los dedos de Alex acariciando su cabello.

Alex sonríe cuando descubre que casi todos los niños se han dormido, Lena acuna a la muñeca y duerme contenta, ya babeando en la almohada. Su madre está abrazando a Drew, la niña está molesta y se frota el yeso, por lo que Alex sospecha que es probable que la ruptura esté latiendo y doliendo. Maggie buscó una botella de Motrin para niños y se la dio a Eliza quien le está explicando todo con calma a Drew y la alienta a que tome la medicación. "Sé que te duele el brazo, pero esto te hará sentir mejor. Después de que tomes esto, pon tu brazo sobre una almohada y podrás descansar un poco "

Drew obedece con cansancio, a pesar de que su carita se contrae con amargura después de probar el medicamento. Eliza la acomoda, roba otra almohada de una litera que no se utiliza para que se coloque debajo del brazo adolorido antes de arropar al niño y frotar pacientemente su espalda mientras la pequeña finalmente sucumbe para dormir. El médico parece ser absolutamente natural con los niños y Maggie está bastante impresionada y absolutamente bien con que Eliza o Alex se ocupen de cualquier problema médico, ya que no esta tan segura de si misma con respecto a los primeros auxilios aunque ya los ha practicado antes pero nunca ha hecho primeros auxilios para un niño que requiere más que solo una bandita.

"Probablemente deberíamos regresar a los laboratorios", sugiere Eliza con cierta tristeza mientras los observa dormir, observando a Kara y Lena antes de pasar un brazo alrededor de la cintura de Alex y darle un beso en la mejilla a pesar de que su hija intenta bromear con un pequeño aléjate, "a veces echo de menos cuando tenías esta edad".

"Y a veces estoy segura de que no lo haces, después de que recuerdas todos los problemas que te di a ti y a papá", se burla Alex mientras abraza a su madre, agradecida de que esté con ella y con Maggie hasta que resuelvan la situación de la niñas

"A veces", le dice Eliza burlona, ​​pero abraza ferozmente a su hija, "pero no lo cambiaría por nada del mundo".

Maggie se siente un poco como una intrusa, escuchando el dulce momento madre-hija entre Alex y su madre. Por un segundo, se pregunta si su propia madre alguna vez habla de ella de vez en cuando, pero tan pronto como Eliza y Alex se separan, ella se ve envuelta en un fuerte abrazo que regresa con la misma desesperación. Ella casi llora y se ríe en los mismos momentos en que escucha lo que Eliza le dice: "¿Y cómo te sientes, cariño? Solo crié a una bebé y ella era un puñado, ahora solo puedo imaginar lo cansada que debes estar despues del día con los cuatro hoy ".

"Podría haber sido mucho peor", admite Maggie con una pequeña risa mientras se limpia las lágrimas de las esquinas de sus ojos mientras les dice: "pero no tengo idea de cómo mantenerlos ocupados esta tarde cuando se despierten completamente renovados y aburridos de colorear ".

Eliza se ríe mientras frota los hombros de Maggie, sintiendo lo tensos que están, ella sugiere: "¿Por qué no te tomas un café y te tomas un descanso por un momento? Puedo verlos un rato".

"Gracias", le dice Maggie con agradecimiento, tiene la sensación de que va a necesitar toda la cafeína que pueda conseguir para mantenerse al día con los niños al final de la hora de la siesta.