2/ Capitulo 1

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Elena estaba desanimada y aburrida. Pero... ¿Por qué?

Ella había sido encargada, junto a su equipo, encontrar a un bandido que ha estado causando estragos en el este del reino. Preguntó porque una misión así estaba en el gremio del norte del país, y cuando le dijeron que los aventureros bajo clase B no podían hacerle frente, ahí se dio cuenta de la gravedad de la situación. Sin más, ella y su grupo partieron al este, a un pueblo que estaba a la frontera del reino. Aunque el viaje no era demasiado largo, si tomaría una semana llegar, aunque fueran con los caballos más rápidos del reino.

Ahora, en pleno camino, faltando un día de viaje, encontraron una posada por el camino. Cansada de acampar al aire libre, decidió que hoy dormirían allí, a pesar de que sus compañeros dijeron que era mejor seguir para ahorrar tiempo y dinero, pero no podían pelear contra su temperamento cuando estaba aburrida, ya que una sola mirada basto para "convencerlos".

Su grupo, de 4 personas contando a Elena, estaba conformado por la maga Sirys, encargada del apoyo con su magia de tierra. Tenía el pelo color castaño largo, amarrado en una cola de caballo baja, su rostro aunque no exageradamente hermosa podía atraer a la gente, un cuerpo algo pequeño para su edad (18). Llevaba la típica capa que todo mago tiene (blanca), aunque con mangas cortas y sin capucha. Una camiseta blanca con unos pantalones cortos azul.

Robert el cazador, con una habilidad notable con el arco y un buen manejo de la daga, también una buena habilidad en detectar trampas y cosas ocultas. Pelo corto de color negro, un buen rostro que era algo arruinado por una cicatriz en su mejilla izquierda.

Ysha el caballero, su habilidad con la espada de una mano y un escudo está muy por encima del promedio, aunque no puede usar magia, si ha fortalecido su cuerpo practicando arte marciales a lo largo de su vida. Tiene el pelo negro, su cara ya madura hace notar que el paso del tiempo en él ha hecho su trabajo (40). Con un gran físico y una buena estatura (1,80) es prácticamente el mejor de su clase.

Y por último Elena, no solo tiene una gran habilidad con la espada, sino que tiene la rara habilidad de poseer dos naturalezas mágicas, estas siendo fuego y viento. Su pelo, rojo con unos pocos tintes blancos, largo hasta la cintura. Un cuerpo de diosa y una cara que sería la envidia de muchas mujeres y la lujuria de muchos hombres.

Entrando a la posada, vieron que no estaba muy ocupada, solo unas cuantas personas sentadas comiendo. Estaba por caminar hacia la encargada, cuando vio sentada a una persona, más concretamente una vieja amiga, dándole la espalda.

"Sophia"- llamo Elena con alegría, captando la atención de la nombrada, que al verla, se puso igual de contenta.

"Elena"- dijo Sophia mientras saludaba con el brazo, haciendo señas para que viniera hacia ella.

"ustedes alquilen cuartos por mientras, yo hablare con una vieja amiga"- le decía a su equipo mientras caminaba hacia Sophia. El resto del grupo se miró entre sí, solo soltando un suspiro mientras se dirigían para hablar con la encargada.

"no esperaba encontrarte por estos lares Elena, ¿Qué haces por aquí?"- pregunto luego de un corto abrazo como saludo. No todos los días te encuentras con una amiga cuando estas de viaje.

"pues de misión, unos bandidos están haciendo desmanes aquí en la frontera, que son tan peligrosos como para que llamen a aventureros de rango A"- dijo mientras ambas se acomodaban en las sillas, con un gesto de la mano aparentando de que la misión no era la gran cosa. "¿y que me cuentas tú?, ¿no estabas trabajando de recepcionista en el gremio de aventureros de Luxia?"- pregunto esta vez.

"sucedieron un par de cosas, necesito regresar a cierto "lugar"... tú me entiendes"- dijo crípticamente.

"Ah"- susurro, mirando a todos lados para bajar la voz, acercándose un poco más hacia Sophia. "vuelves a la base... ¿cierto?"- preguntó solo recibiendo un asentimiento de parte de esta.

"pero dejemos esto de lado, tengo cierta información que te puede ser útil contra lo que te vienes a hacer cargo"- dijo Sophia cambiando de tema. "según escuche, son diez personas lo que conforman este grupo de bandidos, algunos con afinidades mágicas y otros con buen entrenamiento físico. Lo que roban va de variadas cosas, como joyas, oro, etc. Algo peculiar que recalcar en asaltos es que no matan a nadie y solo asaltan a gente rica."- relató.

Esto sí que no se lo esperaba Elena. Ella creía que serían al menos 20 bandidos pero sin entrenamiento, no este grupo de 10 personas bien organizados. Ahora entendía mejor porque no mandaban grupo de aventureros de rango B. "¿sabes dónde fue su último asalto?"- preguntó poniéndose más seria de lo normal.

"fue en el pueblo fronterizo de Guinea, allí asaltaron a un noble que estaba de visita"- dijo recordando lo último que había escuchado. "le robaron todo lo que llevaba encima y además... secuestraron a una chica"-

"¿tienen una rehén?"- preguntó sorprendida. "espera... ¿Por qué secuestrarían a una chica?, ¿era hija del noble?"-

"según escuche, no era hija del noble, pero si alguien importante para él"- señalo Sophia.

"ya veo"- dijo pensando en la mejor forma de actuar ahora con la nueva información que tenía. "muchas gracias por tu ayuda Sophi, cuando reciba mi parte de la paga de esta misión, te invitare a comer algo como agradecimiento"- dijo mientras sonreía.

"está bien, somos amigas después de todo, ayudarnos es normal"- dijo tratando de quitarle importancia al tema.

"hablare esto con mi equipo, nos vemos Sophi"- se despidió Elena mientras se levantaba y se dirigía hacia los cuartos del segundo piso de la posada.

Sophia solo la despedía con la mano mientras la veía alejarse, y al ver que desaparecía en la escalera, una sonrisa repentina apareció en su cara, susurrando "cayo".

Hija de la naturalezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora