El dios Griego es Papá (Destino #1)

Capitulo 6

Voy a llorar chicos!!!!!

Ya son 300 leídas!!!! Ahshdhhdvdvdjd
No se imaginan que tan feliz soy, no pensé que tantas personas fueran a leer la historia, y por eso les doy mil y un Gracias preciosos.

Los dejo con la historia ; )

Athena POV

Ya pasó una semana desde que Alex, Christian y las gemelas se fueron, aún no se qué pasó para que Alex y yo nos enrolláramos pero no me arrepiento.

Charlie y Madeline ya saben lo qué pasó, y aunque al principio se molestaron un poco conmigo les dije que no había nada de que preocuparse, al fin y al cabo solo somos adultos divirtiéndonos un poco.

–Ya está hecho el desayuno – grita Charlie desde el primer piso– ¡Si no bajan en este instante iré a arrástralas a ambas desde su habitación hasta la cocina, y créanme que les dolerá!

–Será mejor que bajemos antes de que Charlie nos mate–le digo a Madeline riéndome– Aún quiero vivir.

Madeline comienza a bajar los escalones, voy bajando poco a poco, estoy a punto de llegar al penúltimo cuando me mareo.

Todo me está dando vueltas, no entiendo que está pasando, me sujeto de la barandilla fuertemente, veo como Madeline corre hacia mi y me atrapa antes de impactar con el suelo.

–¿Estás bien?– Pregunta mientras me ayuda a sentarme en una de las sillas.

–Si Mads, creo que estoy algo hambrienta, nada más.

–Y que bueno que lo dices porque cocine mucho– dice Charlie.

Madeline se acerca a el y le pregunta si lo puede ayudar en algo. Al cabo de unos minutos los dos se dirigen a la mesa con cinco platos distintos, uno con pancakes, otro con brownies, otro con huevo y los otros dos con sustancias algo extrañas pero que huelen bien.

Comienzo a servirme un poco de cada cosa, no se porque pero el hambre me consume, solamente quiero tragarme toda la comida qué hay en la mesa.

Charlie y Madeline me miran extrañados, pero cuando ven que me di cuenta los dos voltean rápidamente la cara y continúan sirviéndose. Comemos rápidamente -más bien YO como rápidamente- me levanto y vuelvo a sentir mareos, me siento en la silla de nuevo.

–Creo que tendremos que ir al doctor– me dice Charlie- puedes empeorar, aparte estás demasiado Pálida Athe.

Hago un movimiento con mi mano, quiero que entienda que estoy bien, lo más probable es que solo sea una enfermedad momentánea.

–Charlie tiene razón Athe, déjanos llevarte por favor.

–No Madeline, estoy bien– me pongo de pie y comienzo a caminar– ves estoy caminando normal.

O eso creía, mis piernas comienzan a tambalearse, Charlie y Mads se levantan rápidamente de sus asientos, luego de eso todo se vuelve negro, solamente escucho a Madeline gritarle a Charlie.

•••

Abro mis ojos lentamente, me siento algo incómoda, me asusto al ver una aguja dentro de mi, veo como drena mi sangre a un tubo pequeño, una señora de unos cuarenta años entra a la habitación .

–Veo que ya despertó señorita Dugés– quita con cuidado la aguja se mi brazo y me coloca una tirita– tus amigos ya vienen, me llevaré este poco de sangre y te haremos unas cuantas pruebas.

Sin más que decir sale de la habitación, Charlie entra con Madeline y saludan a la enfermera.

–¿Me pueden explicar que está sucediendo?