El chico de la biblioteca

cuatro

-No es verdad- dije mientras comía una papita frita de mi plato

-Es enserio te lo juro- dijo Alex mientras bebía de su soda

-No te creo, es imposible que a tus 19 años no te haya gustado alguien ni un poco- replique

-Nunca dije que no me haya gustado alguien, solo dije que no he sentido amor- me señalo con una de sus papitas mientras sonreía

-Alex eso no puede ser posible cuando alguien te atrae sientes un cariño lo que se deriva de amor- contrataque

-No lo creo, pero si así lo crees allá tú- bajo su cabeza mientras jugaba con su comida

Llevábamos más de 2 horas en el restaurante de hamburguesas, era 24h así que no nos preocupábamos que cerraran. Después de que Alex pidiera el trabajo y se lo dieran nos quedamos a cenar ahí a platicar y conocernos más a pesar de que no volveríamos a vernos, mañana comenzaría su jornada de 5 horas ya que al ser estudiante no trabajaría tiempo completo.

-Oye Vee, ¿te puedo preguntar algo?- levante mi rostro y me topé con la mirada de Alex

-Si dime

-¿Qué hacías tú en el parque?, ¿Por qué estabas ahí?

-Hay muchas cosas que no sabes de mi Alex- su rostro se tornó un tanto preocupado- nada malo o ilegal por lo que te debas preocupar- solté una risa nerviosa para aligerar el momento- yo también tengo mis problemas y bueno tenia que salir de casa y desde que tengo memoria he ido a ese parque

-¿Desde siempre haz ido? No te creo, yo toda mi vida he ido a ese parque- me sorprendió lo que dijo porque nunca había visto esos ojos tan lindos en ningún niño del parque o a alguno con esa pequeña cicatriz en su ceja

-Pues créelo y creo que el mentiroso aquí eres tú, podría recordar esos ojos donde fuera- su mirada chocó con la mía y sentía como mi rostro se tornaba rojizo poco a poco, no se que es lo que está causando esa mirada de este chico que hace poco era un completo desconocido- ¿Qué me miras?

-Nada, solo que tu rostro tampoco lo podría olvidar en caso de que ya te hubiera visto- y con esas pequeñas palabras hizo que algo en mi interior se moviera, algo que nunca había sentido antes, pero rápidamente tuve que alejar esos sentimientos ya que el no tenía ningún propósito en volverme a ver porque habíamos pactado en solo vernos el tiempo de esta madrugada que el destino nos permitiera

-Bueno Alex fue muy lindo conocerte solo que ya me tengo que ir antes de que mi padre haga un escándalo si se da cuenta que no estoy en casa- note como su rostro se formó una mezcla de tristeza y alegría

-Tambien fue lindo conocerte Vee y espero que en algún momento de la vida el destino nos quiera volver a juntar- otra vez mi rostro se convirtió en un tomate

Decidí solo acentir y darme la media vuelta para así poder salir, "ojalá" pensé en mi mente, en verdad quería volver a verlo, cuando menos lo veo venir me jalan del brazo y choco con el pecho de alguien
Vaya la sorpresa que me lleve al darme cuenta que era Alex, al inicio si me quede congelada sin saber que hacer pero al poco tiempo le correspondí el abrazo

-Gracias Vee por tratar de ayudarme, que ha pesar de no conocerme y verme en mi peor momento decidiste ayudarme- dijo pegado a mi cabeza mientras me abrazaba

Me aleje un poco y lo vi directo a los ojos
-No tienes nada que agradecer Alex, se lo que se siente estar en esa situación y si te podía ayudar lo haría con mucho gusto- nuestras miradas se conectaban de una manera que me producía una sensación bastante agradable

No se si era el momento pero veía como nos acercábamos de poco a poco, lo tenia a escasos centímetros, un movimiento y nuestros labios chocaban

-Ya te tienes que ir, cuídate y espero volver a encontrarte linda extraña- dijo y se fue alejando y soltando nuestro abrazo de poco a poco
Cuando se iba alejando sentía como esa tranquilidad y calidez que me daba se iba con el y volvía el frío y la soledad de la noche

-Si, será mejor que me vaya- tome mi skate y empecé el camino de regreso a casa
Esta madrugada fue demasiado intensa, me la pase con un chico que ni conocía, HASTA CENE CON EL, en verdad estoy demente
Cuando llegue a mi casa aún seguían todas las luces apagadas señal de que mi padre aún no se levantaba, entre con mucho cuidado y me metí directo a mi cuarto, me acosté en mi cama y me quede pensando en Alex