Capítulo 12: Hey Mal, Creo Que Nos Hemos Dejado la Puerta del Armario Abierta ¡No Te Vuelvas a Meter! (No me dejaba poner el título entero)
La verdad era que aunque con sus antecedentes de chicas duras y de que no les importa nada de lo que los otros dicen de ellas, en la realidad era otro caso completamente diferente. Es decir, no les era indiferente. La mayoría de las veces ignoraban los comentarios estúpidos, el típico dicho de: me entra por una oreja y me sale por la otra.
Pero era un tema diferente con lo que respetaba de su sexualidad, ya que nunca habían oído hablar de personas homosexuales, bisexuales, transexuales, pansexuales... Llámalo x o llámalo y, el caso es que nunca habían oído sobre eso y claro, eso las preocupaba.
Y el que normalmente era no me importa un rábano se convertía en ¿qué es lo que pensaran? Porque suficiente tenían con ser de la Isla de los Perdidos, la gente ya los prejuzgaba de algo sin antes hablar con ellos, aunque no fuese del todo erróneo uno actúa tal y como lo han criado, así que ese era el problema.
Y lo que realmente tenía una muy fácil solución se convertía en una ecuación de segundo grado de la cual tú te quedas pensando: ¿A quién diablos de le ocurrió mezclar letras y números?
Pero lo que no veían ellas era que Auradon era un sitio "libre", ya que bueno ningún sitio es totalmente libre, y allí era todo aceptado. Claro es que como en todas partes había personas que creían que eso es algo del diablo... Pero ¿todo el mundo tiene su opinión, no? Aunque esta sea fruto del rechazo o de la humillación cada uno la tiene.
De hecho lo que tendrían que haber hecho era investigar ir a la biblioteca y mirar esos libros que contienen esa información, pero vamos, ¿para qué ir a la biblioteca si prefieres preocuparte por el que dirán? O ¿Para qué estar atento en clase de humanístico si todo lo que dicen son cosas aburridas?
Pues si se hubiesen centrado en eso sabrían que es totalmente legal andar con una persona de tu mismo sexo en Auradon y por si falta algo ¡hasta te puedes casar con esa persona!
Pero claro, ¿quién va a escuchar a la dulce Hada Madrina a las 7 de la mañana? Para entonces hasta Mal está más concentrada en que no le salgan ojeras que otra cosa.
Así dejándonos de cháchara simplemente vamos a decir que estas dos chicas no tenían dos dedos de frente y que vaya... Mejor nos lo callamos.
Lo que nos lleva al punto de una Mal y una Evie agitadas en su habitación. Y no por cosas placenteras, más bien dicho por la carrerilla que han tenido que pegar para no ser pilladas en medio beso en el vestuario. Porque obviamente ante tal shock Mal ni pensó en usar algo de magia.
- Tenemos que salir del closet, estar en secreto es un dolor de cabeza además de que idiota.- Deja ir Evie cuando recupera la suficiente respiración para hablar, seguido se quita los tacones. No sin recordar mentalmente que mientras esté en el armario con Mal es mejor no llevar tacones tan altos, a no ser que quiera hacerse un esquince de tobillo. Y claro esta que no quiere pasar por eso, quiere sentirse invencible durante unos años.
- ¿Qué propones?- Le pregunta Mal, obviamente dándose cuenta de la situación.
- No sé, es decir lo nuestro no es tan raro. Seguro no es el primer caso, así que no hace falta que lo digamos a lo grande. Pienso que podemos simplemente besarnos en público y si alguien pregunta pues... confirmar.- Propone Evie, Mal asiente pensativa y accede a eso. Se ve muy fácil, aunque bueno dicen que en el examen siempre es más difícil.
Y pues claro, acostumbradas a esconderse... cuando alguien entra a donde están se separan por instinto por lo cual las cosas se complican. Pero alguien decidió de regalarles un boleto de oro.
Obviamente fue el enojado hijo de Tontín, a Doug. Acertaron, les dimos la pista hace unos capítulos.
Y bueno, en toda historia hay un antagonista y en esta parecía ser Doug. Pero como siempre pasa el malo no se sale con las suya, por muy buen intencionados que sean sus actos. Si a uno se le cataloga como malo no lo podrá conseguir por mucho que lo intente y eso no se puede hacer a no ser que se vuelva bueno en ese caso... Ok, me desvié del tema.
Pero digamos que lo que Doug planeo no era lo más inteligente. Porque a ver, ¿por qué pedirle matrimonio a Evie? Si es que lo que parecía era que, no le había quedado claro que habían cortado. Y bueno sufrir una humillación en público cuando te digan que no ya es suficiente, pero que encima te digan que están enamorados de otra persona.
Vamos que no pudo sentirse más rechazado. ¿O si?
Doug fue al escenario y allí subió, tomo el micrófono y dijo:
- ¿Evie quieres casarte conmigo?- Haciendo que todos se giraran hasta Evie mientras murmuraban.
- Doug.- Dice ella sorprendida y a la vez confundida, nada de emoción.- No, claro que no. Tú y yo cortamos y además yo estoy saliendo con otra persona.-
- P-p-pero.- Dice Doug totalmente avergonzado.- ¿Con quién?-
- Conmigo.- Dice Mal saliendo adelante segura, Evie le toma la mano.
- Lo siento Doug.- Dice Evie con una mueca.- Creo que a partir de ahora nos distanciemos.-
- ¡Pero ella estaba saliendo con Ben!- Grita él.
- Exacto, estaba. – Dice Mal.- Tal vez no te enteraste, pero él y yo rompimos la semana pasada.-
- ¡Evie es mía!- Grita el hijo de Tontín.
- Evie no es tuya Doug, ven aquí vas a hablar conmigo.- Dice Ben apareciendo al rescate y llevándose a Doug.- No se preocupen, vuelvan a lo que estaban haciendo.-
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Si El Principe Puede... (Mevie) ©
FanfictionSi el príncipe Ben le puede ser infiel a Mal, ¿por qué ella no debería serlo? Si el príncipe es un idiota, ella también puede... Más te vale no serlo Mal. ¡Ve a por tu chica! Inició: 05/02/2019 Finalizó: 17/07/2019 Revisión: 19/03/2021