Mi tía no mentía cuando dijo que aquellas personas podían hacer todo tipo de ropa...
Les contaré, al lugar que me llevo no era simplemente una tienda común y corriente era una estudio de moda donde a mi tía le fabricaban la ropa a medida.
Ella realmente tiene dinero para que toda su ropa sea de diseñador, cuando entramos nos recibió una joven chica vestida de lo más elegante, después de saludarnos nos llevó a un cuarto donde habían unos hermosos vestidos, se que no lucirían en mí pero debo de admitir que son hermosos.
-Buenas tardes, Monica ¿como has estado?-
-Muy bien Francesca ¿y tú?¿qué tal va todo para el desfile?- escucho preguntar a mi tía.
No supe en qué momento apareció aquella muchacha(señora, realmente no sé) alta, con facciones delicadas y que no aparentaba más de 25 ella vestía un hermoso traje blanco que la hacía ver como un ser superior a todos.
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-Va todo perfecto, no falta mucho para que termine mis últimos diseños- escucho que dije Francesca mientras toma un libro y lo abre- mira, estos son los que tengo en mente pero no estoy del todo segura-
-son realmente geniales los cuatro pero el segundo con un lazo amarillo en la cintura hará que se defina mejor- veo tomar un lapicero y trazar en la libreta a mi tía- mira ¿qué te parece?- dice esto último ofreciéndole de regreso la libreta a Francesca.
- Es perfecto, sabía que tú podrías solucionarlo pero dime ¿qué te trae por acá?
