El Club Suicida

Nosotros Cuatro

Frotó sus manos entre sí antes de soplar en ellas su aliento cálido en sus dedos  para descongelar los, hacia frío pero era lo menos de esperar siendo las 5 de la mañana.

Aveces creía que el mismo se estaba complicando su plan pero también tenía fe en que valía la pena, incluso el camino en taxi le fue eterno debido a la anciedad de llegar, reviso la dirección una vez más para asegurarse de que estaba en el lugar correcto.

Era una gasolinera la cual destacaba por las luces al ser el único negocio abierto a esa hora, aún así tenía uno o dos autos que recogían gasolina, el rubio se encogió un poco en si mismo en aquel abrigo suyo para no congelarse del puñetero frio.

Entró a la gasolinera viendo que la tienda de la misma estaba casi vacía solo estaba el vendedor que era un chico joven quien lo volteo a ver cuando lo escucho entrar.

-am... Buenos días - saludo al muchacho mientras veía alrededor - "se supone que ya estarían aquí" -pensó rascando su nuca estaba ancioso por conocer a sus compañeros, las dos personas que estaban escogiendo bebidas llamaron su atención sin embargo dudaba que fueran ellas debido a que era una mujer y un hombre que se notaba había manejado durante horas.

No sabía con quien se encontraría pero estaba completamente seguro de que no era una mujer con quien debía acercarse así que fue con el hombre quien traía un traje negro y el cabello corto.

-am... Disculpe- el hombre se volteo a verle con seriedad detrás de los cristales de sus gafas - eres Sher221?

-No, lo siento - respondió el hombre antes de tomar su maletin e irse a la caja para poder pagar.
Sintió bastante vergüenza al aver preguntado a alguien desconocido por un nombre tanabsordo, aún se preguntaba que clase de inbecil se hacía llamar 'Sher'.

No había nadie más en la tiendita así que compro un café y se sentó a esperar a sus compañeros mientras sacaba su teléfono y dejando su bastón a un lado mientras lo hacia, no podía evitar revisar las conversaciones de grupo que había tenido con aquellas dos personas, había entrado a él grupo de "Por un mañana" Un sitio donde la gente hablaba y publicaba Blogs sobre su vida como una especie de terapia para superar sus traumas o una depresión.

Estuvo escribiendo por más de 6 meses en aquel blog una vez había regresado de su servicio pero eso nunca le ayudó a sentirse mejor, decho comenzaba a sentirse más y más decaído, la mudanza a un departamento donde la recamara y la cocina compartían el cuarto, apenas entraba su cama, no ayudó tampoco... Fue en ese momento que la idea del suicidio se colo en su cabeza y se plantó con profundidad.

Lo imprecionante es que a su vez termino contactando con Sher221 quien lo metió a un grupo de suicidas, la mayoría eran niñatos de 14 a 18 años que estaba seguro no querían matarse solo llamar la atención y lo demostraban publicando cortadas o pintando se los párpados de negro, estuvo por abandonar ese grupo hasta que Sher221 lo ingreso en una conversación grupal del mismo grupo donde también metió a GrL88, ahora le costaba recordar como habían comenzado a planear un suicidio en grupo o como habían planeado viajar a Blowston para cumplir con ese propósito, ni siquiera por que carajos aceptó!.

Quizás el desinterés hacia su propia vida no le dejaba interesarse si sería asesinado o se Suicidaba.
Algunas personas deberían estar asustadas, nerviosas o por lo menos anciosas de pensar en sus muertes... El no.

No sentia nada.

Estaba bloqueado, era como esperar el autobús o estar sentado en tu cama al despertar solo viéndote los pies.
Solo esperar a unos hombres que nunca había visto en su vida pero solo había hablado con ellos por Internet.

-buenos días... Cap555? -

Una voz detrás de él logró sorprenderle y más al escuchar el nombre de usuario que había usado en la página.
Se giro solo para toparse con dos hombres jóvenes, uno mayor a otro pero en realidad no era exactamente lo que esperaba, ambos eran de tez muy blanca, ambos con una postura firme y algo imponentes.
El que lucía mayor de ellos llevaba un paraguas que convinaba con su traje negro con rayas delgadas blancas junto a un abrigo que llegaba a desentonar un poco con ese aspecto de empresario o de alta alcurnia ya que el abrigo era algo así como un chandal unas dos o tres tallas más grandes que la de ese hombre.