Yo soy la estrella [yoonkook] (WATTYS 2019)

Capítulo 2 (amor)

Salgo de la habitación con mi suéter ya puesto, me he quitado los pantalones y mi camisa, me quedo solo con el suéter que me llega a los muslos, incluso no tengo ropa interior. Camino descalzo hasta la sala y antes de que el me vea me percato de que se está devorando la segunda copa con el postre sin dejarme nada. Típico de él, no puedo irme dos minutos por qué se termina cualquier postre que le haga. Sonrío negando con la cabeza, alcanzo el interruptor y apago la luz sobresaltándolo por la repentina oscuridad, todo lo que nos permite ver son los foquitos encendidos del árbol y el fuego de la chimenea, pues he apagado también la luz de la cocina. El me mira a medida que me acerco y el brillo de los focos que se refleja en sus ojos parece más como un ardiente fuego que se prende cuando recaen en mí. Sus ojos van de mi cabeza hasta mis pies y terminan directamente en los míos, yo camino a paso lento y me siento a horcajadas sobre él, mis rodillas a cada lado de su cintura presionando sus muslos y mis pies colgando fuera del sillón. El posiciona sus manos en mis caderas y mira mis labios como un león hambriento.

-Oh, Jungkook –susurra aunque no haya nadie más, excepto por nuestro perrito Holly que se encuentra en las habitaciones de arriba.

-Dime, Yoongi –mi voz sale de una manera sensual mientras mis manos se posan en sus mejillas acariciando estas con total suavidad.

- Eres tan hermoso. –me dice para después girar un poco su rostro y depositar un tierno y sonoro beso en mi mano derecha.

- Me encanta que de ser un lindo gatito pases a ser un león cuando me tienes así. –mis labios se guían hasta los suyos y los besan lentamente, poseyendo su labio inferior con los míos, haciendo que el de él se inflame a medida que continuo.

-¿No es una falta de respeto que hagamos esto en navidad?

-Yoongi, no seas tan fiel creyente, dios no se molestará porque hagamos lo que el mismo creó. –beso sus mejillas y lamo la comisura de sus labios

-¿el sexo entre hombres? –pregunta divertido y aguantándose la risa. Me separo de él y lo miro expectante. –lo siento, solo bromeaba. –Me acerco a él de nuevo y pego mi nariz con la suya.

-No me arruines el momento. –Mis labios vuelven a juntarse con los suyos y el calor de su cuerpo me abraza y me quema. Siento sus manos acariciar mis muslos y entrar poco a poco en el suéter, yo muerdo instintivamente su labio inferior por la electricidad que recorre mi pelvis a medida que sus manos suben y se quedan quietas en mi cadera. Él se separa y me mira con lujuria, con deseo y fervor.

- ¿No tienes ropa interior Kookie?

Sin responderle sonrío ladinamente y me acomodo más sobre él, rozando su entrepierna con la mía, lo cual me permite escuchar un delicioso ronroneo de su garganta.

-Haz esos sonidos de nuevo para mí Yoongi. Me encanta escucharte –vuelvo a mover mi cadera sobre él y de nuevo escucho ese sonido excitante, que me hace cerrar los ojos y poner mis manos en sus hombros, recorrerlos por encima de su camisa blanca y llegar hasta su cuello, beso una vez más esos labios, esta vez con más profundidad y más movimientos, su lengua hace que abra más mi boca para dejarle entrar y crear olas por movimientos con nuestras lenguas.

Sus manos recorren aún mi espalda, cintura y muslos enviando una oleada de ardor delicioso por todo mi cuerpo. Pasan hasta mis glúteos y los presiona haciéndome ir más enfrente y soltar un leve jadeo. Me separo de sus labios cuando el aire requiere entrar de nuevo a mis pulmones y lo miro con una sonrisa tierna. Pero él no deja de jugar traviesamente con esas pálidas manos y ahora suben mi suéter dejándole ver mi hombría en su estado natural. Yo me deleito con su mirada profunda puesta en mí.

-Me encanta como se ve este suéter en ti. Pero lamento decirte que no lo necesitamos más. –Con eso dicho, el me quita el suéter dejándome completamente desnudo y a su disposición, un leve frío me recorre el cuerpo y un puchero se forma en mi rostro haciéndole reír.