Yo soy la estrella [yoonkook] (WATTYS 2019)

Capítulo 34 (Final)

Canción: "Muse - unintended"
(recomiendo mucho escucharla en todo el cap)

Pov Yoongi

- ¿Hy-hyung?

- ¿Jungkook? - bajo la mirada borrosa por las lágrimas y lo miro. - Jungkook -repito esta vez como afirmación. Mis gotas mojan su rostro y lo siento moverse, su mano se eleva hacia mi rostro y limpia mis lagrimas, ya no se siente frio, se siente cálido, suave, tal y como recordaba. 

- Yoongi, amor. - me dice con su tierna voz y lloro más.- me encontraste, lo haz hecho. Gracias. -me dice sonriendo y lo abrazo con más fuerza.

- Lo siento, perdóname. Jungkook lo siento. - el niega con la cabeza.

- Haz cumplido tu promesa. Me cuidaste y amaste hasta el final. Y me encontraste, ahora puedo irme en paz.

- No -niego a descontrol - no, no ,no, no te vayas. Quedate con migo. Quedate con migo para siempre.

- Te amo Yoongi.  - su cuerpo se siente caliente, el también llora, su mano recorre mi mejilla y después mi nuca. Me atrae hacia el. - te amo, y quiero que seas feliz.

- quedate por favor. - insisto más. - llévame con tigo. Llévame a tu lado mi amor.

- Cuida de Minhyu. - susurra y me pega más a él. - te amo. - me dice una última vez antes de pegar sus labios con los míos en un beso cálido y tierno. Extrañaba esos labios rosados, finos y húmedos. Nuestras bocas se mueven al compás deseado, la necesidad de tocarlos como hacia casi dos años no lo hacíamos. Tal como en aquella época donde todo lo que hacíamos y queríamos era besarnos con intensidad, con pasión y devoción.

Todo termina cuando vuelvo a sentir el frío de sus duros labios y me separo para volver a ver el inerte cuerpo de Jungkook y que inexplicablemente su mano sostiene la mía.

- También te amo - le digo para romper en llanto y sostener su delgado cuerpo entre el mío mientras nos meso de delante hacia atrás, mi mejilla pegada en su frente, gritando y pidiéndole regrese. Rogando que me bese de nuevo, que este con migo o me lleve con el. Es el, es mi Jungkook, mi esposo, novio y mejor amigo. Mi amante, mi todo. Es el, sin vida, frágil y sin movimiento entre mis brazos. Y no me detengo aún cuando siento la mano del oficial sostener mi hombro. Solo quiero abrazarlo, y nunca soltarlo, por que siento que si lo hago se romperá, se romperá y volveré al primer día en el que no volví a verlo. Y lo extraño más aún, no se si podré vivir con la idea de que lo perdí... lo perdí para siempre, y no había vuelta atrás. Estaba muerto, realmente lo estaba, no había más esperanzas, no era un sueño, no era una broma. Abusaron y asesinaron a mi pequeño. Quedaría grabado en mi para siempre, y no podría volver a ser feliz como el me lo pidió. Perdóname Jungkook, te dejé morir, y eso no me lo perdonaré yo mismo nunca.
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2 días después

No es normal, es un día horrible. Parece broma, el día más triste de mi vida, es un día tan oscuro y la tormenta no ayuda mucho.

Me encuentro en mi habitación,  sentado en la cama mirándome al espejo, mi traje negro perfectamente planchado. La luz tenue entra por la ventana donde las cortinas se abren por primera vez en mucho tiempo.

Las lágrimas mojan mi camisa blanca, lloro en total silencio, no hay expresión en mi rostro. Tan solo un fuerte vacío e imágenes viniendo a mi cabeza una y otra vez, cuando éramos felices, cuando estábamos juntos, y después cuando todo se fue por la borda y me lo arrebataron de los brazos junto con todo lo que soñamos alguna vez.

Escucho la puerta ser tocada y no respondo. Aún así la abren y la voz de mi hermano se escucha.

- Yoongi... ya es hora. - me dice de la manera más tranquila que puede y yo limpio mis ojos y me levanto. Ajusto mi corbata y camino hacia la salida de la habitación pero el no se mueve.