El SOl

compromiso

Las noticias de que el clan cuervo cada vez ganaba más territorio y se hacía de dominios se expandió, las personas vivían con el temor de lo pasaría, se sabía ya que los uchihas se dirigían a la capital 'el sol', su llegada se esperaba dentro de dos semanas aproximadamente, así que cuando el doncel aceptó contraer matrimonio con kurama sólo hubo una pequeña celebración por pedido del lord, además así su gente sabría que aún había esperanza de salir victoriosos de la guerra. un dia despues de la fiesta kurama se puso a realizar estrategias, claramente era un buen líder se había decidido que mujeres y niños serian resguardados en el sótano del gran castillo, mientras los campesinos resguardan las entradas principales hacia esta,  mediante lo cual los soldados se encargaron de combatir y proteger al sol impidiendo la entrada de los uchihas al Reino o eso era lo que se esperaba. con su actual compromiso todos estaban dispuestos a apoyar la esperanza se hacía presente a crecer.

Mi señor- al ver que kurama se encontraba solo, el rubio se acerco a este y decidió mostrarse agradecido, y como no estarlo, el pelirrojo, se estaba esforzando para proteger al reino de las garras de aquellos cuervos sedientos de venganzas- muchas gracias por todo.

No tiene nada que agradecer naruto, dentro de poco seré el señor de esta tierra así que mi deber es protegerlos, después de todo esta tierra es maravillosa, y lo es mucho más el doncel con el que me cansaré, que hombre no estaría fascinado con este tesoro. Buenas tierras y su señor un bello doncel- el lord acerco su mano hasta la mejilla del menor acariciando todo el contorno de su rostro derecho.

Señor Yo...- lo que el rubio pudo haber dicho se perdió en el aire en el momento en que unos soldados entraron precipitadamente, suponiendo la manera de su llegada se asumió que las notícias que portaban no eran para nada buenos.

Que está pasando- exigió saber el pelirrojo.

Señor... ahg sfg - los guerreros intentaban recuperar el aire perdido al parecer habían dado una carrera para poder llegar hasta el gran salón- acabamos de divisar una horda de guerreros enemigos... - al ver la mirada afilada que le dedicó el lord siguió hablando- pero no es todo se acaba de divisar varias embarcaciones que están  desembarcando en las orillas y se dirigen a gran velocidad hacia acá, se calcula que aproximadamente diez enemigos es equivalente a un soldado del sol- informó el guerrero.

Podemos hacerlo, todos a sus puestos y estén listos para contrarrestar el ataque, no podemos permitirnos perder, POR EL SOL- gritó el moreno siendo seguido por los gritos de los soldados que estaban presentes en la habitación. dándole así la orden el de ojos carmín, una vez dicha esta orden se giró hacia el doncel- mi señor será mejor que se vaya a protegerse dentro del jardín sagrado junto a las ninfas y las sacerdotisas...-  kurama deseo poder besar los labios de su doncel, pero justo en el momento en que decidió se empezó a escuchar el choque de las espadas- rapido mi señor ir a protegerse, y recordar que pase lo que pase usted no debe alterarse y dejar fluir su poder- declaró kurama sacando su espada y poniéndose en posición de ataque por si lograban los enemigos ingresar al palacio.

Por favor tenga cuidado señor- con la adrenalina recorriendo por su cuerpo, naruto sabia correctamente que lo que kurama le había dicho era en gran parte esencial, y sin pensarlo mas se dirigió al gran jardín que se encontraba en la torre más alta del palacio, definitivamente llegar ahí suponía un gran reto y más cuando la horda enemiga se hacía paso, pudo contemplar desde la ventana de las escaleras como los hombres iban cayendo, y ahí lo vio a lord kurama se encontraba combatiendo con seis enemigos al mismo tiempo el rostro del rubio mostró terror cuando contempló como una estocada era acertada por uno de los enemigos con quien el lord luchaba, insertándose en las costillas del pelirrojo, sin estar dispuesto a ver mas prendió carrera nuevamente hacia los jardines sagrados, no importaba nada en estos momentos su deber era mantener resguardado los secretos del sol aunque eso le costara la vida, una vez llegó a los jardines se apresuró a llamar a las protectoras de este emblemático lugar- ninfas de los cuatro elementos por favor muestren su presencia- sentía que en cualquier momento colapsaría, le faltaba el aire.

Príncipe naruto.... que es lo que desea- se escuchó una voz a las espaldas del rubio, pero este no voltio.

Por favor se los suplico protejan al sol...- cualquiera que hubiera sido su justificación fue callada por un enorme estruendo.

No lo vamos a hacer el destino de la tierra dorada está escrita en las runas del árbol sagrado, usted sabe muy bien que las runas son nuestra ley, y me sorprende mucho que usted sea el que nos esté pidiendo esta barbaridad- expresó una segunda voz, frente al oji azul se encontraba lo que parecía ser un hada solo que esta tenía el cuerpo translúcido como si de agua se tratase- usted más que nadie debería saber el castigo que se nos será impuesto si nos oponemos y sobre todo que usted se llevará la peor parte.

Ya no lo aguanto como es posible que aquellas que supuestamente tenían el deber de proteger la sagrada tierra dorada entregarán tan fácilmente el sol a los bastardos uchiha- yo estoy dispuesto a recibir mi castigo si eso ayuda a mi pueblo o es que acaso les importa mas su seguridad antes que la del Reino que deben proteger.

Usted sabe que no es así mi señor- una ráfaga tranquila se hizo presente en el momento en que la tercera voz se oyó- antes que nuestra seguridad se encuentra la vuestra, no realizaremos ningún acto que afecte su integridad y si para mantenerlo a salvo tenemos que entregar el reino que así sea- declaró la tercera ninfa aunque su voz fuera calmada se pudo distinguir claramente que esta hablaba.muy en serio.

No pueden hacer esto.... si ustedes no hacen nada esta bien pero yo no me quedaré  viendo como matan a mi pueblo, no estoy dispuesto a aceptar tal atrocidad- replicó el doncel.

Justo antes de que alguna de las ninfas pudiera responder se escuchó una explosión, derribando las puertas del gran jardín.

Pero miren nada mas lo que tenemos aquí....