Transformers (One-short's) Situaciones

El heraldo, el esbirro y el niño

¿Swerve X Skids?

Continuación de Minion
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El silencio era sepulcral, el mini-bot y su compañero habían sido descubiertos. Ninguno estaba dispuesto a perder, el más alto se colocó delante del menor para defenderlo mientras que este alzó un poco su pecho para no demostrar su miedo.

- Chevy, Chevy; realmente no pensé que fueras tan tono como para oponerte contra Unicron -escupió el recién llegado.

- ¿Y que si lo somos? -exclamó el barman.

Ante esa exclamación el heraldo se frustró y gruñó elevando su arma apuntando en la dirección en la que se hayaban Chevy y Swerve, y ante el ruido del disparo, el mayor tomó a su compañero para esquivar el disparo el cual cayó directamente en T-cog de aquel horrible ser, lo cual empezó a causar una reacción en cadena, que causando algunos daños colaterales, h terminando en una gran explosión que también se difundió de una manera lineal y catástrofica.

Ante este caos, sólo vieron que su yo alternativo estaba envuelto en una ira total.

- ¡Corre! -fue el gritó que dio el barman a su compañero al ver que ya no podían estar más en aquel lugar y aprovecharon la oportunidad de escapar por una abertura que se había hecho gracias a la explosión.

Mientras que aquel que trataba de controlar el fuego de la explosión se volteó y vio como sus prisionero y su ex aliado escapaban, rápidamente empezó a correr para alcanzarlo, aun cuando varios de sus compañeros estuvieran en su camino, él los apartaba de un golpe para así poder alcanzar a aquellos que se dirigían a las naves.

Estos no obtuvieron mucha resistencia gracias a que los esbirros y los heraldos de Unicron estaban más preocupados por controlar la irremediable situación que ellos habían creado.

Antes de ser alcanzados por su enemigo, tomaron una nave pequeña, capaz de dividirse en dos partes; la prendieron lo más rápido posible y salieron del destructor de planetas, quien parecía ya incapacitado.

- Chevy... -dijo nerviosamente Swerve al ver que estaban siendo perseguidos, el mencionado solo aumento el nivel de la velocidad de la nave al límite, pero eso no evitó que el heraldo les disparara a diestra y siniestra.

Los disparos no sesaban hasta que resivieron un golpe crítico, que dejó incontrolable a la nave.

- ¡Vamos a chocar! -gritó Swerve al ver como iban a estamparse contra un meteorito, mientras que Chevy hacia todo lo posible para evitar la caída.

Pero inevitablemente cayeron, creando una sucesión de estruendos y pedasos de metal esparcidos. Ante la ya destruida nave salió el mini-bot y el mech con el mismo tono de rojo, que trataban de ocultarse de su enemigo.

Cada uno trató de evitar dejar un rastro de su energon, buscaban desesperadamente un lugar donde pudieran estar al salvo, o al menos el suficiente tiempo para así idear algo. Chevy vio un estrecho pero a la vez amplio hueco, inmediatamente llamó la atención del ruidoso Autobot, quien se movió con entusiasmo al "seguro" lugar.

Cuando los dos se asentaron en aquel lugar, empezaron a discutir como poder sobrevivir ante aquella situación.

- ¿Estás seguro de que funcionará? -cuestionó el más pequeño -: Es posible que lo arruine -continuó en un intento de convencer a su contrario.

Pero el mayor negó con la cabeza, pero ahí fue cuando el energon de cada uno paró, al escuchar la estruendosa voz de su enemigo.

- ¡Chevy! ¡Swerve! -gritó al aire aquel infame ser.

- No se si puedan escucharme, pero les tengo un trato; salgan. Es lo mejor que pueden hacer, después de todo nadie les está esperando allá, ¿saben? Siempre es así, ustedes lo saben tan bien como yo; nadie nos respeta, solo somos un alivio cómico, alguien que puede ser pisoteado sin más... -tomó una pausa antes de seguir -: Además son un niño de Primus y un esbirro de Unicron, ¿que puede ser un par de de ilusos?

Swerve, dirigió su mirada en Chevy, quien miraba dos fotos, en una estaba él con los demás miembros de la Lost Light y en la otra estaba Chevy con sus demás compañeros Autobots, pero su vista se enfocó en Skids, más bien en ambos Skid's.

Apretó un poco la comisura de sus labios, pero miro a su compañero quien también parecía tener miedo, los dos tenían miedo, pero era lo suficientemente ilusos para a sentirse el uno al otro y seguir con su plan.

Mientras que el heraldo seguía hablando tratando de convencerlos, quienes estaban ocultos se movieron cuando este los empezó a buscar por las demás partes del meteorito.

- No se preocupen, soy un buen tipo; me encargaré de que no sean asesinados por todo lo que hicieron -rió escandalosamente,y ahí fue cuando el esbirro tomó la oportunidad de empujarlo al piso, lo cual el hijo de Primus aprovechó para golpearlo.

- ¿Sabes? No, nos interesa lo que digas, que tal seamos un yo que se, pero somos capaces de hacer intentar ser lo mejor, somos uno ilusos orgullosos de serlo-dijo Swerve convencido de sus palabras.

Pero antes de que el mayor hablara Chevy le golpeó con su propia arma.
Ambos se unieron para ver lo que habían hecho -. No lo puedo creer. ¡ Lo hicimos! -dijo en alta voz el mini-bot quien, quien resivio un pulgar arriba.

Ya tenían una forma de escape, la nave de su enemigo, que era idéntica a la que ellos tenían -. ¿Entonces estas naves se puede dividir? -preguntó impresionando el mini-bot.

El mech simplemente asintió y activo la separación de la nave, no tardó mucho en terminar su transformación.

- Entonces esto es el adiós -comentó algo triste este Swerve.

Chevy le abrazo fuertemente, para posteriormente quitarse su máscara y dársela al más pequeño -. Pero es tu máscara -El más alto le dijo -. Ahora es tuya, y esto ahora es mío -tomando así su antifaz, y retirándose a su nave.

Ambas despegaron en el espacio, y siguieron una misma ruta, hasta que dos portales aparecieron, cada uno para llevarlos a sus respectivos hogares.

Uno en la Tierra y el otro en el infinito espacio; mientras que uno se dirigía a un plano territorio, el otro a una habitación de las tantas que había en la Lost Light.

En el caso de Chevy, se colocó atrás de aquel que le había esperado por un largo tiempo, quien al verle solamente le abrazo efusivamente, mientras que Swerve tocó la compuerta de la habitación, siendo abierta por Skids quien le empezó a preguntar de la razón de sus heridas, llevándolo rápidamente a la medbay.

Para ninguno de los le importaba si eran amados como parejas, para ellos les bastaba con esa amistad; estar con su familia ya fuesen los Autobots o los tripulantes de la Lost Light, eso era suficiente.
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Espero que les haya gustado.