Capitulo 2

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Me despierto por el resplandor del sol que entra en mi ventana, parece que me quede dormida recordando mi pasado, y es donde entro en cuenta de mi presente y de lo doloroso que es, miro el reloj que esta en la pared y miro que voy tarde para llegar a la sesión de fotos, ser modelo no es fácil y el que piense que me es fácil solo por mi apellido se equivoca, ya que me ha costado sangre, sudor y lágrimas llegar a donde estoy, corro al baño y me ducho lo más rápido que puedo, cuando salgo, busco ropa deportiva, y no me hago nada ni el rostro ni en mi cabello, así lo dejo manejable para los expertos.

Bajo a sótano donde esta mi auto y emprendo camino a mi trabajo, es un día muy lindo tan lindo que recordé el día en que mi hermano y sus amigo volvieron de la universidad por sus vacaciones y la pasaron con mi familia, fue hermoso y fue la primera vez que marco y yo hablamos como por primera vez solos y lo mal que termino, recuerdo que tenía 14 anos y pues mi cuerpo ya tenía algunas curvas y yo como toda chica quería llamar su atención.

Recuerdo haberme pasado por la playa, ese día me había cansado de buscar las formas para que el me hablara y quería estar sola, así que camine por la orilla del mar con mi corazón dolido, porque había encontrado al amor de mi vida con una chica en su cuarto, después de ver eso salí corriendo, solo quería estar sola y la playa es un hermoso lugar para estarlo y poder pensar, recuerdo haberme asustado cuando sentí una mano en mi hombro, estaba por darle un golpe, pero por suerte primero mire el rostro de dicha persona y me tope con los ojos avellana que me vuelven loca.

-Hola pequeña- Dijo con un tono tan dulce dulce que mi corazón se derritió-¿Estas bien?-

Y a mi mente vino la forma en que lo encontré con esa chica.

-¿Y por qué no debería de estarlo?-Dije secamente y el me miro asombrado por mi tono.

-No lo tomes a mal, pero estas muy arisca últimamente- Dijo viéndome a los ojos y yo saque mi mejor risa sarcástica.

-¿ Y si tal vez he sido así desde siempre?-Digo como si nada.

-Por que se que tu no eres así- Dijo desviando la mirada a la playa.

-Marcos no me conoces como para saber como soy o como me comporto- Dije deseando la mirada al igual que él.

-Que no hablemos no significa que no te vea-Dijo como si nada y yo lo mire sorprendida por su reciente confesión-Eres una niña muy linda como para pasar desapercibida-

También recuerdo como se sintió mi corazón por que el solo me miraba como una niña y desde el fondo de mi sabía que el jamás me miraría de otra forma y fue allí donde tome mi decisión de que me olvidaría de el fuese como fuese, salí corriendo sin decir nada y no volvimos a decirnos nada durante el viaje.

Después de eso el volvió a la universidad y yo intente hacer mi vida, me metí a escuela de modelaje y empecé con mi carrera con el apoyo de mis padre, a los 16 años ya tenia mucho trabajo y viajaba mucho con mi madre, ya que mi padre se tenia que quedar cerca de la empresa familiar, mi cuerpo había cambiado para bien, me concentre tanto en mi carrera que no tuve tiempo para pensar en chicos y me sentía bien así.

Y ahora creo que debí de haberme quedado así, tal ves ahora no me sentiría tan mal, con ese pensamiento llegue a donde seria la sesión de fotos, salude a los que nos ayudarían a sacar las foto y me acerque a mi mejor amigo que resulta ser el fotógrafo.

-¿Cómo te sientes hermosa?- Dice mientras arregla algo en su cámara, pero mi silencio parece alertarlo -¿ Que paso?

-Se casara, Leo-Digo en un susurro.

Sorpresas del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora